Israel responde al doble atentado de Hamás con un ataque selectivo contra uno de sus líderes

Israel ha prometido "una operación militar muy dura" contra los territorios palestinos en respuesta a los dos atentados cometidos ayer por Hamás y en los que murieron al menos 17 personas -15 israelíes y los dos kamikazes- y otros 60 resultaron heridos. Las operaciones de castigo han comenzado esta madrugada con incursiones en varios campos de refugiados y con el fallido intento de asesinato selectivo contra un líder político del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), perpetrado esta mañana en Gaza. Por la noche, soldados israelíes han matado a tres palestinos en Nablús y cerca de Yenín.

Un avión de combate F-16 del Ejército israelí ha disparado esta mañana al menos un misil contra la casa en Gaza de un alto dirigente de Hamás. Esta acción, continuación de la estrategia de ataques selectivos contra los líderes de la organización terrorista que ha intensificado Israel en las últimas semanas, se produce tan sólo horas después de que dos atentados suicidas causaran 14 muertos y decenas de heridos en Tel Aviv y Jerusalén. Fue la respuesta de Hamás al ataque de un avión F-16 contra su líder espiritual del pasado domingo.

La última etapa de este círculo vicioso de muerte y destrucción comenzó el pasado 19 de agosto, cuando un terrorista suicida se inmoló en un autobús en Jerusalén y causó la muerte a otras 22 personas, en su mayoría religiosos israelíes. Dos días después helicópteros israelíes acabaron con la vida de un líder de Hamás, Ismail Abu Shanab, y dos de sus guardaespaldas. En cinco ataques similares entre el 24 de agosto y el 1 de septiembre murieron otros nueve palestinos, hasta que el 6 de este mes un F-16 hirió a Sheikh Ahmed Yassin, el líder espiritual de la organización terrorista.

Una base militar y un café

Hamás juró vengar éste ataque, y cumplió su amenaza ayer: un atentado en una parada de autobús frente a una base militar israelí en Tel Aviv causaba siete muertos y decenas de heridos. Poco después otro terrorista se inmolaba en un café de Jerusalén y mataba otros seis israelíes.

Tanto si es respuesta a este atentado o continuación de los últimos ataques selectivos, Israel ha intentado acabar hoy con la vida de Mahmud al Zahar de nuevo con un caza F-16, aunque en la ofensiva el que ha muerto ha sido su hijo de 23 años, Jaled al Zahar, y uno de sus guardaespaldas. Además, otras 25 personas han resultado heridas por la explosión de la bomba, de medio tonelada, que ha tirado abajo la vivienda del activista palestino, uno de los jefes políticos de la organización terrorista.

"No perdemos la esperanza"

Por si quedaba alguna duda, tras el atentado de ayer y el ataque de hoy el primer ministro israelí, Ariel Sharon, ha negado que se puedan producir progresos en el proceso de paz si no desaparecen antes "las hostilidades, el terrorismo y la incitación". Sin embargo, el político ha apostillado: "A pesar de los ataques reprensibles contra nosotros, no hemos perdido la esperanza de vivir en paz con nuestros vecinos".

Esperanza similar comparte Washington, donde hoy el Gobierno estadounidense ha coincidido en pedir al nuevo primer ministro palestino in pectore el cese del terrorismo y el desmantelamiento de las organizaciones radicales. Ahmed Qurei, más conocido por su sobrenombre de Abu Alá, ha aceptado hoy de forma oficial el cargo de primer ministro y ha anunciado la creación de un Gabinete de crisis de siete ministros para tratar de frenar la escalada de violencia. Entre tanto, en las oficinas de Yasir Arafat en Ramala sus hombres refuerzan con sacos terreros y bloques de cemento los edificios ante un posible ataque de Israel, que ya ha dicho por activa y por pasiva que sus intenciones pasan por desterrar al presidente palestino.

Por si la situación no fuera lo suficientemente tensa, Hamás ha amenazado hoy con cambiar el objetivo de sus atentados y comenzar a destruir edificios israelíes, en respuesta a la política de Sharon de tirar abajo aquellos bloques en los que se escondan los activistas palestinos a los que busca para exterminar.