Miles de ciudadanos europeos exigen el fin de la guerra
Berlín, París y Londres, escenarios de nuevas marchas masivas contra la guerra en Irak
Muchos ciudadanos europeos han querido mostrar hoy de nuevo su rechazo frontal a la guerra en Irak. Las calles de las principales ciudades europeas han sido escenario de nuevas protestas. Berlín, Londres, París y Roma han sido un clamor contra el ataque aliado.
La manifestación de la capital británica, aunque no ha llegado al millón y medio de personas que se reunieron el mes pasado, sí ha sido la mayor celebrada en el Reino Unido desde que comenzó la operación contra territorio iraquí. La policía británica ha informado de que asistieron en torno a las doscientas mil personas, aunque los organizadores hablan de medio millón.
Los manifestantes han pedido el boicot contra productos estadounidenses, han gritado lemas como "No a una guerra por el petróleo" y han expresado su apoyo al Ejecutivo de Francia, abanderado de la oposición europea a la guerra.
En París se han manifestado casi cien mil personas que han lanzado gritos y han mostrado pancartas en contra de la guerra y del presidente estadounidense, George W. Bush, en una marcha que ha congregado a políticos de izquierda, estudiantes, kurdos y palestinos.
En Estrasburgo, en el este del país y donde han protestado más de 3.000 personas, se han producido incidentes violentos al margen de la manifestación entre unos cientos de asistentes y decenas de policías, en primer lugar ante el consulado estadounidense y después tras el lanzamiento de piedras contra una hamburguesería de una conocida cadena. En los choques, la Policía, que fue blanco del lanzamiento de piedras y barras metálicas, tuvo que utilizar gases lacrimógenos y practicó algunas detenciones.
Altercados en Milán
En Italia, decenas de miles de personas se han manifestado en las principales ciudades del país, donde han destacado los dos cortejos de Roma y la acción de los ecologistas de Greenpeace que han colocado una pancarta contra Silvio Berlusconi en el Altar de la Patria, en la capital. Todas las marchas en Italia se han desarrollado con normalidad. Sólo en Milán se han producido algunos incidentes: varios manifestantes han arrojado botellas incendiarias contra tiendas del centro de Milán, han roto cristaleras de bancos y de varios McDonald's y han tirado piedras y petardos contra el consulado de Israel.
Cerca de 35.000 personas, según la policía, se han manifestado en Lisboa, donde la pianista Maria Joao Pires ha leído el manifiesto final. En la manifestación en la capital portuguesa, la más multitudinaria de las que se han celebrado en todo el país, se han portado pancartas en las que se leía "Durao, Bush y Blair esta guerra no la quiere nadie", "Paz si, guerra no", "Juntos vamos a parar la guerra", o "Esta guerra es injusta, ilegal y asesina".
En Bruselas la manifestación ha reunido a unas 10.000 personas y en ella se han practicado diez detenciones y tres heridos durante enfrentamientos con la policía belga contra algunos participantes violentos.
Por otro lado, en Berlín se han manifestado alrededor de 30.000 personas, respondiendo a la convocatoria del movimiento antiglobalización Attac y de varios sindicatos, que expresarán su protesta por la apertura del espacio aéreo alemán a los aviones de la coalición internacional.
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