Siete detenidos en una mezquita de Londres en relación con el laboratorio de ricina
Unos 150 agentes, con el apoyo de helicópteros, parcicipan en la redada.- Se desconoce si el controvertido imán Abu Hamza Al Masri se encuentra entre los arrestados
La Policía británica ha detenido esta madrugada a siete personas en la mezquita londinense de Finsbury Park -donde predica el controvertido imán radical Abu Hamza Al Masri-. Esta redada, según fuentes de Scotland Yard, está relacionada con el descubrimiento a principios enero de un laboratorio de ricina, una sustancia vegetal muy tóxica prohibida por la ONU, en un apartamento de Wood Green, un barrio situado en el norte de Londres. Entre el día 5 y el siete ya fueron detenidas otras siete personas, con lo que ascienden a 14 los sospechosos de pertenecer a esta red. De los primeros siete arrestados, al menos cuatro trabajaban en la mezquita.
"Aunque esta operación, en la que han participado unos 150 agentes con el apoyo de helicópteros, esté relacionada con las detenciones llevadas a cabo en el norte y el este de Londres el pasado 5 de enero, en estos momentos nada permite sugerir que se encuentren sustancias químicas en las instalaciones y que haya un riesgo para el público", ha indicado un portavoz del Scotland Yard.
Los sospechosos, entre los que no se ha precisado si se encuentra el propio Abu Hamza, han sido puestos bajo arresto preventivo en una comisaría del centro de Londres. Según el portavoz policial, la operación se ha desarrollado desde las 2.00 hora local (las 3.00 hora peninsular española) y proseguía una hora después. Sin dar más datos, el portavoz ha añadido que "laoperación forma parte de una amplia investigación en curso de la sección antiterrorista de la Policía, planificada con informaciones de los Servicios de Inteligencia, sobre presuntas actividades terroristas en Londres y en otra partes del Reino Unido",
añadió el portavoz.
El uso de la ley antiterrorista
El ministro de Interior, David Blunkett, ha ordenado esta "importante" redada cuyo fin es combatir a los presuntos terroristas extranjeros que utilizan Reino Unido como retaguardia, según informa el diario The Daily Telegraph. Así, Blunkett ha autorizado a la Policía y al Servicio de Inteligencia Interna (MI5) a tomar "todas las medidas necesarias" para perseguir a los extranjeros sospechosos de representar una amenaza potencial para la seguridad del país, según el diario.
De este modo, el ministro recurre ampliamente a una nueva legislación antiterrorista aprobada a finales de 2001, que permite la detención ilimitada, sin acusación ni juicio, de un extranjero sospechoso de tener vínculos con una organización terrorista internacional. Asimismo, la Policía puede recurrir a la inculpación de presuntos terroristas por simples delitos como robo o fraudes, lo que permite manención provisional incluso sin poder probar rápidamente un lazo con una organización terrorista, indica The Daily Telegraph.
La mezquita de Finsbury Park, situada en el norte de la capital británica, es considerada como una de las más radicales del país. Abu Hamza, conocido por su discurso virulento contra Occidente, está amenazado de expulsión por la organización gubernamental encargada de regular los lugares de culto en Inglaterra y el País de Gales. Tras los atentados del 11-S, las autoridades británicas ordenaron la congelación de sus cuentas bancarias de Hamza y también le confiscaron el pasaporte.
La ricina, un arma química
La ricina es una sustancia 6.000 veces más tóxica que el cianuro. Derivada de la planta Ricinos communis, de la que también se extrae el purgante conocido como aceite de ricino, la ricina puede originar la muerte con el empleo de dosis mínimas, bien sea ingerida, inhalada o, sobre todo, inyectada. En 1978 fue utilizada para asesinar en Londres al disidente búlgaro Georgi Harkov, que recibió un pinchazo con un paraguas provisto de una jeringuilla infectada de ese veneno.
Aunque se utiliza de manera excepcional en algunas investigaciones médicas, como la lucha contra ciertos cánceres, está prohibida por la Convención de ONU para la Prohibición de las Armas Químicas, aprobada en 1992 y en vigor desde 1997. La ricina figura entre las sustancias químicas tóxicas de la lista 1, en la que se incluyen las que se han desarrollado, producido, almacenado o empleado como arma química, como las que permiten fabricar el gas sarín o el gas mostaza, por ejemplo.
Aunque no existe un antídoto, EE UU ha probado en ratones una vacuna para proteger a las personas de un ataque con ricina. Pero, aunque es mortal con dosis muy pequeñas y muy efectiva para asesinatos selectivos, los expertos dudan de que pueda ser utilizado en un ataque a gran escala y la policía insistió en que quiere alertar pero no alarmar a la población.
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