Los 'antichavistas' convocan una gran marcha al panteón de Simón Bolívar
El Ejército venezolano advierte a la oposición de que impedirá el colapso económico
La oposición venezolana ha programado para hoy, día 16 de la huelga general indefinida para "sacar" del poder al presidente Huego Chávez, una marcha hasta el Panteón Nacional, donde reposan los restos del libertador Simón Bolívar. La marcha, convocada cuando se cumple el 172 aniversario de la muerte del caudillo, concluirá en la zona oeste de la ciudad, controlada por los seguidores de Chávez.
La semana pasada, los chavistas impidieron el paso cuando la oposición trató de llevar una de sus manifestaciones a la sede del grupo estatal Petróleos de Venezuela SA (PDVSA). Aunque esta protesta supone toda una provocación contra Chávez -el mandatario considera precisamente a Bolívar su modelo político-, el verdadero pulso se está librando en PDVSA, motor de la economía venezolana.
La paralización de PDVSA -es el quinto exportador mundial de crudo y genera la mitad de los ingresos del presupuesto nacional y el 80% de las divisas- se produjo el 4 de diciembre, dos días después de la huelga general, por iniciativa del mismo grupo de gerentes que lideraron la crisis de esa empresa durante el golpe de Estado del pasado 11 de abril contra Chávez.
La situación en PDVSA
Juan Fernández, uno de los gerentes rebeldes, afirmó ayer que PDVSA sólo produce actualmente 400.000 barriles diarios de los 3,2 millones que debería estar extrayendo. También dijo que las refinerías de PDVSA en Venezuela están detenidas, no así las que tiene en el exterior, y aseguró que la falta de gas está obligando a parar las principales industrias básicas del país, como son la del acero y el aluminio.
Las autoridades petroleras no han precisado el alcance de la paralización, pero han reconocido que los "daños" causados por esa acción son "muy altos" y que las pérdidas diarias pueden superar los 40 millones de dólares. Fuentes oficiales de las principales plantas de acero y aluminio, en el este del país, indicaron que las pérdidas diarias superan los 1,5 millones de dólares diarios por la reducción en el suministro de gas.
En este sentido, el Ejército ha ratificado su lealtad a la Constitución y ha advertido a sectores de la oposición de que se abstengan de atentar contra instituciones que, como la industria petrolera nacional, son vitales para la supervivencia de Venezuela. La advertenica ha sido lanzada por el Comandante general del Ejército, general Julio García Montoya, que calificó de "sabotaje" las acciones para paralizar la industria petrolera.
