Haider anuncia su retirada de la política nacional

El ultranacionalista Jörg Haider, líder del Partido Liberal austriaco (FPOE), que forma parte de la coalición del Gobierno de Viena, ha anunciado en una entrevista que se retira de la política nacional de su país. En el futuro se concentrará en la política regional.

El anuncio se produce tras las críticas de sus correligionarios al polémico viaje que hizo esta semana a Irak, durante la cual se entrevistó con Sadam Husein.

"Ya me fui", ha declarado Haider al decir que tiraba la toalla "a nivel federal" a primera hora de la noche de hoy, en una entrevista concedida al programa de noticias más importante de la televisión pública ORF.

A partir de hoy, Haider ya no pertenece a la Comisión de la Coalición del gobierno de Viena -integrado por el FPOE y por el Partido Popular (ÖVP) del canciller federal, Wolfgang Schüssel, según ha asegurado él mismo.

El populista político afirma que su decisión es "definitiva" y que en el futuro su gestión se limitará al sureño Estado federado de Carintia, donde ocupa el cargo de jefe de Gobierno local.

Amargado por las críticas

Tampoco en el futuro se ocupará de las "funciones a nivel federal", ha dicho el ex líder del FPOE, quien entregó la jefatura de su partido a la actual vice canciller, Susanne Riess-Passer, en mayo de 2000, tras las fuertes protestas internacionales que desató su llegada al poder en febrero del mismo año, así como el bloqueo diplomático impuesto a Austria por sus socios de la Unión Europea.

En la entrevista televisada, Haider se ha mostrado amargado por las críticas de varios miembros del gabinete que integran su propio partido y que desaprobaron la visita que efectuó esta semana el jefe del Gobierno de Carintia al presidente iraquí, Sadam Husein.

"Si ahora quieren ser adultos y caminar con sus propios pies, es consecuente y correcto no inmiscuirse más", ha dicho Haider en alusión a unas declaraciones previas del jefe de la fracción parlamentaria del FPOE, Peter Westenthaler, quien instó a sus correligionarios a decidirse entre una política de gobierno o una de oposición.

"Soy de la opinión de que hay que crear frentes claros", añade Haider, quien desde la formación de la actual coalición gubernamental, que él forjó en su momento, ha intervenido constantemente en las decisiones del ejecutivo de Viena desde Klagenfurt, capital de Carintia.

Hoy ha dicho que no deseaba que la población tenga la impresión de que la actuación de los ministros del FPOE que integran el gobierno federal, elegidos también por Haider, está dirigida desde Carintia.

El sorpresivo viaje de Haider a Irak, coincidiendo con una visita de la vicecanciller a Washington, provocó una crítica unánime tanto de los miembros del gobierno, incluido el canciller, como de la oposición, así como de la administración estadounidense.

Washington ha anunciado además que pedirá a la ONU que verifique si Haider no violó el sistema de sanciones impuestas a Irak al llevar a ese país aparatos destinados a un banco de sangre.