Nueva York y Porto Alegre debaten las ventajas y desventajas de la globalización

Los principales representantes mundiales de la política y la economía se reúnen hoy en Nueva York, en el seno del Foro Económico Mundial, para discutir sobre la evolución económica global, la seguridad y estabilidad y para hallar caminos que reduzcan la distancia entre ricos y pobres. Mientras, en Porto Alegre (Brasil) se reúne la contracumbre económica, la del Foro Mundial Antiglobalización, que reúne a los descontentos con el sistema capitalista mundial.

La tradicional cumbre económica de la localidad suiza de Davos se traslada este año, después de 30 ediciones, a Nueva York como gesto de solidaridad tras los atentados del 11 de septiembre.

La reunión del foro de Davos, de cinco días de duración, se celebra en el mítico hotel Waldorf-Astoria, a poco más de cinco kilómetros de la zona cero, donde yacen los restos de las Torres Gemelas, en lo que supone la primera gran reunión de alto nivel desde los ataques. Sin embargo, EE UU estará representado por el secretario de Estado, Colin Powell, y por el del Tesoro, Paul O'Neill, y no por el presidente, George W. Bush.

La larga serie de seminarios y ponencias que llevarán a cabo los líderes políticos, económicos y religiosos del mundo tendrán un lema común: "El liderazgo en tiempos de crisis: una visión para un futuro compartido".

El ex alcalde de Nueva York ha sido el encargado de dar la bienvenida a los asistentes, que se han quejado de las dificultades para acceder a los recintos debido a las medidas de seguridad.

Mientras, en Brasil, unas 50.000 personas pertenecientes a 3.500 ONGs, sindicatos, asociaciones de defensa de los derechos humanos y ecologistas tratarán de mantener el nivel de audiencia de anteriores ediciones, al tiempo que buscan alternativas al capitalismo salvaje defendido en Nueva York. La polémica ya está servida desde que se sabe que uno de los países más ricos del mundo, Francia, ha enviado más representantes a Brasil que a Nueva York. Además, se cuestionará la guerra internacional contra el terrorismo emprendida tras los ataques del 11 de septiembre.

Entre los máximos representantes industriales que se darán cita en Nueva York destacan los mandatarios de Microsoft, Bill Gates, de MacDonald's, Jack Greenberg, además del financiero George Soros. Entre los líderes políticos estarán el canciller alemán, Gerhard Schröder, el ex alcalde de Nueva York, Rudolph Giuliani o el ministro español de Economía, Rodrigo Rato.

Mientras, en Porto Alegre, destaca la presencia del intelectual Noam Chomsky, de la Premio Nobel de la Paz Rigoberta Menchú o del activista francés José Bové.

Los delegados presentes en Nueva York estarán rodeados de unas impresionantes medidas de seguridad, reforzadas ante el riesgo de atentados. Las calles aledañas al Waldorf son prácticamente un cuartel. Hasta 4.000 policías, además de personal privado de seguridad, vigilará el entorno de la reunión, a donde se prevé que acudirán miles de manifestantes antiglobalización. Ya hoy por la mañana se han producido las primeras detenciones.

Unos 1.000 ejecutivos de las principales empresas del mundo se mezclarán con ministros de Finanzas, jefes de estado, líderes culturales para discutir los desafíos a que se enfrenta el capitalismo mundial. Uno de los puntos de interés será el análisis de cómo los atentados del 11 de septiembre han cambiado la política y la sociedad.

Mientras, desde la calle, multitud de grupos antiglobalización de las más diversas tendencias y centrados en multitud de aspectos tomarán las calles para expresar a los representantes del capitalismo su desacuerdo con unas políticas que no hacen sino agrandar las distancias entre ricos y pobres. Ante la presencia de estos grupos de manifestantes, la ciudad se ha blindado, lo que ha suscitado las críticas de los activistas, que consideran exagerada la presencia policial. Las reuniones previas de este foro y otras organizaciones económicas internacionales ya han provocado graves disturbios en Seattle, Génova -donde se registró la primera víctima mortal de la antiglobalización- y Praga.

Por su parte, los reunidos en Porto Alegre discutirán temas que van desde la crisis argentina hasta una acceso más democrático a los medios de comunicación, la supresión de paraísos fiscales o el libre acceso a los medicamentos por parte de los más desfavorecidos.