Duhalde anuncia medidas proteccionistas y confirma la devaluación del peso

El presidente de Argentina, el peronista Eduardo Duhalde, ha remarcado hoy que su gobierno pondrá especial énfasis en la protección de la industria local, tras confirmar la esperada devaluación, en un discurso ante empresarios a quienes convocó para informales sobre los detalles de tal devaluación así como del plan de emergencia económica que se conocerá esta noche.

Duhalde hizo esta promesa en torno a las medidas de protección de la industria local, para comenzar a revertir el proceso de desnacionalización de los últimos años, al que atribuyó parte de la responsabilidad de la grave crisis que atraviesa su país.

"Nadie piensa en el viejo proteccionismo, pero sí en ayudar a recuperar el trabajo de los argentinos", ha dicho Duhalde, durante su discurso ante el sector empresarial.

"Devaluación descontada"

El peronista Duhalde ha confirmado que "la devaluación está descontada en el país" por lo que ha pedido "a todos patriotismo para evitar aumentos de precios".

Además, Duhalde ha llamado a los empresarios a "tener cuidado" durante los primeros días que sigan a la devaluación de la moneda y se abstengan de hacer cualquier tipo de maniobra especulativa.

Asimismo, ha llamado a despertar la conciencia nacional y ha adelantado que desde el Poder Ejecutivo se impulsarán leyes para otorgar prioridad a los productos argentinos en las compras del Estado.

El presidente Duhalde ha declarado además que hoy termina "la alianza del poder político con el sector financiero" y ha llamado a iniciar una unión con los sectores productivos. "La comunidad productiva debe gobernar", ha definido el jefe del Estado, tras analizar los motivos por los cuales "Argentina está quebrada y fundida".

"Ustedes, es decir la comunidad productiva, son los que deben gobernar en el país. Esto puede parecer una exageración, pero no lo es", ha dicho el gobernante al centenar de empresarios presentes en la residencia oficial de Olivos, a las afueras de Buenos Aires.

El mandatario peronista ha culpado de la actual situación a los argentinos y sobre todo a sus dirigentes. "Estamos quebrados, estamos fundidos y ustedes (los empresarios) tienen el riesgo de también estarlo".

"Hace más de 40 años que la dirigencia política está desvinculada de todo lo que tenga que ver con la producción y no hay país en el mundo que no salga sin el esfuerzo y el trabajo de su gente", ha añadido.

Nuevo plan económico

El mandatario argentino ha dicho que no dará a conocer el esperado paquete de medidas económicas hasta que las dos cámaras del Congreso argentino se reúnan este fin de semana y aprueben todas las leyes que el Ejecutivo necesita antes de que el lunes abran los bancos y comiencen a operar los mercados.

"Toda referencia concreta en torno a la ley" que las autoridades tienen previsto enviar hoy al Parlamento "puede ser tomada como una presión del Ejecutivo sobre el Poder Legislativo, actitud que sería incorrecta", ha apuntado.

Temor a un estallido social

Duhalde no ha querido terminar su intervención sin lanzar un renovado mensaje de tranquilidad a la población, que afronta la devaluación con el temor a que se mengüe aún más su debilitado poder adquisitivo. Duhalde se ha comprometido a "lograr la paz social" y evitar así nuevos estallidos de violencia que desborden al recién estrenado Ejecutivo.

El líder peronista ha dicho que su "primera obligación" consistirá en "ordenar el país" . Para ello, en opinión de Duhalde, no es suficiente el empleo de policía o del Ejército sino "un ejercicio de comprensión de todos los sectores".

Las medidas económicas

El encargado de explicar en el Congreso el nuevo paquete de medidas económicas para sacar al país de la actual crisis económica y social es Jorge Remes Lenicov, nombrado ayer ministro de Economía por Eduardo Duhalde. Entre las medidas propuestas se encuentra la devaluación del peso, que perderá la paridad con el dólar.

De este modo, el tipo de cambio monetario fijo será de 1,35 pesos por dólar. Además, el Gobierno pretende convertir en pesos todos los créditos negociados en dólares que no excedan los 100.000 dólares. Esto significa que los beneficiarios de estos préstamos tendrán que pagar en pesos la misma cantidad que pagaban en dólares. Para compensar esta medida con la devaluación, se bajarán las tasas de interés y se ampliarán los plazos de financiación. Además, el Banco Central ha decidido ampliar en 24 horas la paridad cambiaria para que los ciudadanos puedan cancelar en pesos los saldos de sus tarjetas de crédito.

En el borrador del documento elaborado por el nuevo Gobierno, los nuevos dirigentes argentinos aseguran que su objetivo principal es "emprender el gran desafío de que la devaluación no se traslade a una gran inflación", algo que ya empezó a suceder ayer, cuando los precios aumentaron en algunos casos hasta el 25%. Para impedir un crecimiento desmesurado de la inflación, el Ejecutivo fijará precios máximos para los medicamentos y los combustibles.

El texto que hoy presentará Lenicov también pretende que se cambien a pesos las tarifas de los servicios públicos privatizados, lo que obliga a que "no se tenga más en cuenta la inflación que determinaba la indexación de la moneda de los Estados Unidos".

Aquellos que paguen en la actualidad un alquiler de vivienda en dólares verán cómo la cantidad que pagan mensualmente se transforma en pesos durante los próximos 180 días. Después, habrá que renegociar los alquileres.

La nueva ley no toca, en principio, el llamado corralito, es decir, las restricciones impuestas por el ex ministro de Economía Domingo Cavallo a la retirada de dinero en efectivo de los depósitos a plazo fijo y las cuentas de corrientes.

El nuevo ministro de Economía, que ayer estuvo reunido toda la noche con el nuevo presidente, Eduardo Duhalde, propondrá además nuevas modificaciones para la Ley de Convertibilidad con la que se estableción la paridad entre el peso y el dólar. Ese texto legal, sin embargo, "no será anulado porque peligrarían las reservas del Banco Central", según han explicado fuentes del Ministerio de Economía.

Lenicov también pretende que, a partir de ahora, el presupuesto de cada año incluya el programa monetario para ese ejercicio. También se realizará una "emisión restringida" de bonos Lecop.

Por su parte, el nuevo jefe de gabinete, Jorge Capitanich, ha anunciado que el nuevo Gobierno tiene previsto presentar una nueva Ley de Ministerios con la intención de recortar los gastos burocráticos del Estado. Además, se han respetado las medidas de austeridad que impuso el ex presidente Rodríguez Saá para recortar los salarios de algunos funcionarios públicos.

Las propuestas económicas del nuevo Gobierno se discutirán simultáneamente durante al menos dos días en la Cámara de Diputados y en la de Senadores.