Un máximo de 5.000 soldados iniciará su despliegue en Kabul antes de fin de año

El Gobierno británico ha confirmado hoy que el contingente internacional de paz que se desplegará en Kabul para proteger la buena marcha de la transición afgana estará formado por un máximo de 5.000 soldados.

Además, el ministro de Exteriores británico, Geoff Hoon, ha informado de que el grueso de tropas estará en la capital afgana para el día 28 de este mes. El resto del contingente, que encabezará el general británico McColl, se irá desplegando en las siguientes semanas hasta completarlo "bien entrado el mes de enero."

La estancia de las tropas internacionales en Afganistán es otro de los asuntos todavía sin confirmar. El británico Hoon ha propuesto a Naciones Unidas una duración máxima de tres meses.

El ministro de Defensa afgano, Mohammad Fahim, ha puesto esta mañana fecha a la llegada de la fuerza de paz auspiciada por la ONU. Fahim ha dicho que los primeros soldados llegarán a Kabul el próximo viernes.

En cuanto al número de hombres que integrarán el contingente, el gobierno de Afganistán no quiere que superen los mil soldados.

"No creo que superen las mil personas", ha insisitdo Fahim esta mañana. "Si superan este número, el resto deberá participar sólo en tareas de logística y asistencia sanitaria". Además, el ministro de Defensa ha expresado su deseo de que estas fuerzas permanezcan en país seis meses desde el día de la toma de posesión del Gobierno, prevista para el sábado.

España ofrece 700 efectivos

Mientras tanto, el Gobierno español ha ofrecido para la fuerza internacional de paz en Afganistán una agrupación integrada por Infantería ligera de Tierra e Infantería de Marina con los apoyos necesarios, hasta un total de 700 efectivos, sin que, en principio, esté prevista la utilización de vehículos blindados, aunque sí de transporte ligero.

En la Comisión de Defensa del Congreso, donde ha comparecido el ministro de Defensa, Federico Trillo, ha reconocido los "innegables" altos riesgos de la misión, pero ha insistido en que la experiencia de las Fuerzas Armadas en otras operaciones internacionales de paz hace que las unidades que se envíen sean "suficientemente idóneas".

Trillo ha asegurado también que sigue la situación requiriendo que la presencia internacional en Kabul y sus alrededores sea una realidad el 22 de diciembre próximo, cuando comiencen a gobernar las autoridades interinas del país.

Una posible avanzadilla

A partir de entonces, ha afirmado, "cabe imaginar la sucesiva llegada de contingentes con el objetivo de que estuviere ultimado el despliegue de la fuerza multinacional a mediados del próximo mes de enero".

En declaraciones posteriores a la prensa, el ministro ha considerado "posible" enviar una avanzadilla de fuerzas españolas, que prefiere denominar "misión de asentamiento", que "probablemente estaría formada por oficiales, no por soldados".

Trillo ha añadido que las tropas puestas por España a disposición de la misión de paz estarán mandadas por el coronel Jaime Coll, jefe del Regimiento de Montaña Galicia 64, "salvo que tenga que tener otro diseño la contribución" de España.

Respecto al coste económico para España, que serían entre 700 y 900 millones de pesetas mensuales, lo que habría que multiplicar por tres meses, si se desplaza el máximo de tropas previstas: 700 efectivos, que se trasladarían a Afganistán por medios propios y con las "contrataciones" que, además, fueran necesarias.

El ministro ha precisado que la oferta del Gobierno es "abierta" y que esos 700 militares son un "número inicial", pues pueden ser menos o distintivos los efectivos, por lo que hablar sobre cuáles vayan a ser finalmente es "especular en balde".