Pakistán cierra el consulado talibán en Karachi y EE UU aconseja mantener la embajada en Islamabad
La clausura del consulado se suma al veto contra las ruedas de prensa del embajador talibán
El Gobierno paquistaní ordenó ayer el cierre del consulado general del régimen talibán en la ciudad de Karachi, al sur de Pakistán, dos días después de vetar las ruedas de prensa del embajador. La clausura se hará efectiva en un plazo de tres días.
La orden de cierre del consulado general en Karachi sigue al veto impuesto el martes por el gobierno paquistaní a las ruedas de prensa que habitualmente convocaba el embajador del régimen talibán, Abdul Salam Zaif.
El único embajador del régimen talibán, en declaraciones publicadas por la prensa paquistaní, calificó de injusta la decisión del gobierno paquistaní de prohibir las ruedas de prensa que convocaba casi a diario para dar la versión del régimen talibán sobre la evolución de la campaña bélica en Afganistán.
"Pakistán aplica un doble rasero. Si a nosotros se nos veta debería hacer lo mismo con el consulado de Estados Unidos en la ciudad de Peshawar, que edita un panfleto con un lenguaje que denigra a los talibanes", declaró el embajador.
El Gobierno paquistaní, que hasta los atentados en Estados Unidos fue el principal sostén exterior de los talibanes, reconoce a su régimen, pero mantiene cerrada su embajada en Kabul, la capital afgana.
La otra embajada afgana en Pakistán, la de Islamabad, seguirá probablemente abierta, ya que Estados Unidos considera "útil" su mantenimiento, según ha indicado hoy el portavoz del departamento de Estado, Richard Boucher.
"Estimamos que una oficina talibán en Islamabad es y puede ser útil, dado que hay estadounidenses y otras personas detenidas en Kabul", ha explicado Boucher.
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