Ocho palestinos muertos al atacar el ejército israelí una sede de Hamás en Nablús

El fundador y jefe espiritual del grupo integrista islámico Hamás, el jeque Ahmed Yasín, no ha tardado en reaccionar y ha culpado al Gobierno israelí de una "nueva masacre", a la que "se reaccionará en un futuro próximo". "Dedicaré todo mi tiempo a reaccionar ante este crimen, que tendrá su merecida respuesta". Por su parte, la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que preside Yasir Arafat, ha declarado tres días de duelo.

El Departamento de Estado de EE UU también ha arremetido con dureza contra esta acción militar, considerada parte de una escalada de violencia que ha merecido el calificativo de "altamente provocadora".

Según testigos presenciales, el ataque ha sido llevado a cabo por helicópteros de combate; sin embargo, otras fuentes afirman que los misiles provenían de tanques situados en las montañas que rodean la ciudad, al norte de Cisjordania.

Un portavoz del Ejército israelí ha justificado el ataque asegurando que "los hombres de Hamás que murieron tenían planes concretos de perpetrar atentados de grandes proporciones en el corazón de Israel".

Esta nueva acción protagonizada entre israelíes y palestinos ha provocado una nueva ola de respuestas violentas entre las dos partes. Por un lado, una pareja de colonos israelíes y su hijo han resultado heridos a última hora de la tarde del martes en la colonia de Kiryat Sefer, en las cercanías de la ciudad cisjordana autónoma de Ramala, según han informado fuentes militares.

La familia circulaba en un vehículo cuando los palestinos han abierto fuego contra ellos, según las mismas fuentes, que no han facilitado más detalles.

Un intelocutor de las Brigadas de Mártires de Al Aqsa, brazo militar de Al Fatah, ha reivindicado el ataque como "una venganza por la muerte de los palestinos abatidos por el Ejército israelí en Naplusa".

Por otra parte, palestinos han disparado contra soldados de Israel junto a la base militar de Ofer y en la zona de Bitunia, ambas en Cisjordania, y contra un autobús israelí en la franja de Gaza, aunque no ha habido víctimas.

En otros puntos de la franja de Gaza se produjeron enfrentamientos entre palestinos y soldados israelíes, que tampoco han provocado víctimas.

Otros incidentes

Además, un policía palestino ha muerto este mediodía en la colonia judía de Netzarim por disparos de soldados israelíes, y un activista del movimiento radical palestino de la Yihad Islámica ha sido abatido por la mañana en un enfrentamiento con soldados israelíes en la franja de Gaza.

Las fuerzas de seguridad israelíes permanecen hoy en estado de alerta máxima ante la amenaza de atentados palestinos, después de que ayer murieran seis activistas de Al Fatah al explotarles una bomba que preparaban.

Israel ha decretado el sitio en las ciudades palestinas autónomas de Belén, Ramala, Tulkarem y Naplusa, en la zona de Cisjordania.

Ayer, Jerusalén sufrió una escalada de atentados en los que, tras el estallido sin consecuencias de una lata de cerveza con explosivos en un supermercado, resultaron heridos a puñaladas un judío religioso en el barrio musulmán de la ciudadela antigua, y una mujer mientras paseaba con una amiga por el barrio Armón HaNatziv.

Poco después, helicópteros israelíes atacaron con misiles una comisaría palestina en Gaza, hiriendo a siete agentes.