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CORRUPCIÓN

La justicia francesa anula un procedimiento sobre tráfico de armas que implicaba al hijo de Mitterrand

El Tribunal Supremo achaca a un vicio de forma la invalidez del procedimiento

En concreto, la máxima institución jurídica francesa ha anulado el procedimiento sobre tráfico de armas por un vicio de forma, ya que fue iniciado antes de que los ministros de Defensa o Finanzas cursaran una denuncia, como exige una ley de 1939.

Corresponde ahora a la sala de instrucción del Tribunal de Apelación determinar qué partes del sumario deben ser anuladas o qué pasajes de ciertos documentos corresponde suprimir.

La sala tendrá que estar integrada por tres magistrados diferentes a los que el pasado 23 de febrero validaron la casi totalidad del procedimiento porque consideraron que una demanda de los servicios fiscales, dependientes del Ministerio de Finanzas, autorizaba la continuación de las investigaciones por tráfico de armas.

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Tras la decisión adoptada hoy, toda la investigación y las pruebas acumuladas sobre el presunto tráfico de armas tendrán que ser suprimidas, lo cual obligará a los jueces de instrucción a comenzar casi todo de nuevo.

Permanecerá vigentes, sin embargo, la instrucción sobre receptación de bienes y abuso o receptación de abuso de confianza, entre otros cargos.

Entre los beneficiados por esta decisión están personalidades de derechas e izquierdas, entre ellas Jean-Christophe Mitterrand, primogénito del que fuera jefe del Estado francés, el socialista Francois Mitterrand, y el director de la sociedad de venta de armas Brenco Internacional, Pierre Falcone, así como el socio de éste, el multimillonario de origen ruso Arcadi Gaydamak.Sobre éste último pesa una orden de arresto internacional y se encuentra actualmente en Israel.

Tramitación de la denuncia

El ministro de Defensa, el socialista Alain Richard, cursó una denuncia el pasado 25 de enero en relación con el supuesto tráfico de armas, pero ésta no permite regularizar las acciones judiciales efectuadas con anterioridad a esa fecha.

Desde que comenzaron su instrucción el pasado verano, los jueces Isabelle Prévost-Desprez y Philippe Courroye sospechan que Falcone y su socio Gaydamak vendieron armas procedentes de la ex Unión Soviética, sin autorización oficial de las autoridades francesas, al régimen del presidente angoleño José Eduardo Dos Santos, en 1993 y 1994, por más de 500 millones de dólares.

Jean-Christophe Mitterrand, procesado por "complicidad de tráfico de armas, tráfico de influencia y receptación de abuso de bienes sociales", está bajo sospecha de haber utilizado sus contactos en Africa, gestados durante la etapa en la que fue consejero para asuntos africanos en el Elíseo, para favorecer esas ventas de armas.

El hijo de Mitterrand, quien estuvo tres semanas en la cárcel a finales de 2000 y principios de 2001, fue puesto en libertad tras el pago de una fianza multimillonaria, que su madre, Danielle Mitterrand, calificó de "rescate" cuando fue a depositarla en persona.

Mitterrand, que proclama su inocencia, no participó en la petición de anulación del sumario. Pero según la defensa de otros procesados que sí la pidieron, la anulación de los cargos sobre tráfico de armas se aplicará a todos los procesados, incluido Mitterrand.

El personaje central del asunto es Pierre Falcone, procesado desde diciembre pasado. Sus abogados niegan que haya habido tráfico de armas, porque, dicen, no transitaron por territorio francés.

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