Los zapatos de Dorothy de ‘El mago de Oz’ robados hace 20 años se subastan por 28 millones de dólares

Si hay un símbolo que represente el Hollywood dorado y la cultura cinematográfica de Estados Unidos, ese es el par de zapatos de lentejuelas rojas que llevó Dorothy en la película El mago de Oz. Pero tenían truco: para el filme de 1939 se realizaron varias copias de los célebres chapines de rubíes, y hoy quedan, que se sepa, al menos cuatro. Este sábado se ha subastado uno de los pares que está en manos privadas, recuperado hace seis años de un robo. Aunque se esperaba que lograran un precio alto, han alcanzado una cifra astronómica: 28 millones de dólares.

La venta la ha celebrado una casa de subastas con sede en Dallas (Texas) llamada Heritage, que pone a la venta con frecuencia objetos del mundo del cine y el entretenimiento. La puja partía de 1.550.000 dólares y esperaban que alcanzara los tres millones, pero fue escalando rápidamente. En su web, la casa explica que inicialmente recibieron 25 ofertas y que se quedaron en dos, y finalmente los zapatos los adquirió un comprador anónimo que pujó por teléfono. Después de impuestos, pagará 32,5 millones de dólares, 20 veces más del precio de partida.

El vicepresidente de relaciones públicas de Heritage, Robert Wilonsky, ha declarado en un comunicado recogido por CNN que “con 32,5 millones de dólares, las zapatillas se han convertido en el tesoro cinematográfico más valioso del mundo, y han logrado que esta sea la subasta de artículos de entretenimiento más exitosa jamás realizada”. Con El mago de Oz en boga gracias también a la llegada a la pantalla del musical Wicked, una precuela de la historia que trata sobre las famosas brujas del filme, la fiebre por Oz está más a la orden del día que nunca.

Hay varios pares de estos célebres zapatos lucidos por Judy Garland, aunque se desconoce la cantidad exacta. Estos, en concreto, fueron robados en el año 2005 del museo de Grand Rapids, la localidad de Minessota donde nació Garland. Entonces se ofreció nada menos que un millón de dólares de recompensa, pero de poco sirvió. La investigación se alargó durante 13 años: no fue hasta el año 2018 cuando el FBI logró recuperarlos en Mineápolis, tras una operación encubierta de más de un año de duración. Más tarde encontraron dos culpables, dos hombres de más de 70 años llamados Terry Martin (que se declaró culpable el 2023) y Jerry Hal Saliterman (que sigue asegurando que es inocente). Los zapatos pertenecían un coleccionista llamado Michael Shaw, que los prestaba a esa colección local con objetos personales de Garland. Este sábado, se ha hecho millonario.

La fallecida actriz Debbie Reynolds compró uno de los célebres pares de zapatos, aunque un modelo con la punta curvada, un prototipo que jamás se usó, pero los más famosos del país están expuestos de manera permanente en el Museo Smithsonian de Historia Americana de la capital, Washington, desde el año 2012. Ese mismo año, Leonardo DiCaprio y Steven Spielberg, entre otros nombres célebres de la industria, se hicieron con otro de los pares, con intención de donarlo al entonces lejano proyecto que era el Museo de la Academia de Hollywood. El museo abrió hace algo más de tres años y están dentro de su colección; de hecho, son una de las piezas que más atraen a turistas y angelinos, e incluso sirven de reclamo publicitario en los carteles de promoción del museo que cuelgan de las farolas de la ciudad. Tanto que la tienda de recuerdos vende una réplica que cuesta ya 350 dólares. No son baratos, pero sí una fracción 100.000 veces menor que los originales.