El regreso de Daniel Day-Lewis: el actor pone fin a su retiro para actuar bajo las órdenes de su hijo

Mi pie izquierdo (1989), Pozos de ambición (2007) y Lincoln (2012) le convirtieron en el único actor ganador de tres Oscar en la categoría de protagonista masculino. Jack Nicholson tiene las mismas estatuillas, pero una de ellas, la de La fuerza del cariño (1983), es por un personaje secundario. Sin embargo, en 2017, a la edad de 60 años, Daniel Day-Lewis, anunció su retirada. El comunicado, remitido por su representante a la revista Variety, era escueto y no dejaba lugar a dudas: “Daniel Day-Lewis ya no trabajará como actor. Está inmensamente agradecido a todos sus colaboradores y al público a lo largo de muchos años. Se trata de una decisión privada y ni él ni sus representantes harán más comentarios al respecto”. Y, entonces, desapareció.

Ahora es la misma revista quien anuncia su vuelta a la actuación. El intérprete irlandés ha tomado la decisión de ponerse frente a la cámara, al menos una vez más, y tras ella, en la dirección, estará uno de sus hijos, Ronan Day-Lewis. Según informa Variety, la película, titulada Anemore, está coescrita por el actor y por su hijo, y se describe como una exploración de las intrincadas relaciones entre padres, hijos y hermanos, así como de la “dinámica de los vínculos familiares”. Daniel Day-Lewis liderará el elenco junto a Sean Bean, Samantha Morton, Samuel Bottomley y Safia Oakley-Green. “No podríamos estar más emocionados de asociarnos con un brillante artista visual como Ronan Day-Lewis en su primer largometraje, junto a Daniel Day-Lewis como su colaborador creativo”, reveló Peter Kujawski, el presidente de la productora encargada de desarrollar la cinta, Focus Features, en un comunicado. “Han escrito un guion verdaderamente excepcional y esperamos llevar su visión compartida al gran público”. Este 1 de octubre, el diario PageSix publicaba imágenes de Day-Lewis junto a Sean Bean en un rodaje por las calles de Mánchester, en Inglaterra.

Esta será la primera aparición del intérprete en una película desde El hilo invisible, dirigida por Paul Thomas Anderson, y estrenada precisamente en 2017. Desde entonces, Daniel Day-Lewis ha permanecido alejado de los focos de Hollywood, que nunca parecieron entusiasmarle demasiado, y su vida a lo Garbo ha sido todo un enigma que, de tanto en tanto, ha despertado el interés de los medios. “Sé que no fue algo propio de mí lanzar ese tipo de comunicado, pero quería trazar una línea. No quería verme atrapado en otro proyecto. Durante toda mi vida había pensado en dejar de actuar, y no sé qué sucedió exactamente en esta ocasión, pero el impulso fue muy fuerte, se convirtió en una obsesión. Era algo que debía hacer”, reveló el actor en una entrevista ese año en la revista W.

Ya en 1990, después de recoger su primer Oscar por Mi pie izquierdo, se tomó dos años de descanso, durante los que adquirió una propiedad en un pequeño pueblo del condado de Wicklow, conocido popularmente cono el jardín de Irlanda y cuyas montañas han sido tan cinematográficas como uno de sus más ilustres residentes, formando el telón de fondo en producciones como Braveheart o El conde de Montecristo. Incluso en los momentos más álgidos de su carrera, el actor mantuvo en Wicklow su residencia principal a pesar de sus largas estancias en Estados Unidos, y desde entonces mantiene un gran arraigo con su comunidad. Así lo declaró él mismo cuando le entregaron la llave del condado en 2009, siendo la primera persona en recibir este honor, por estar involucrado en varias causas solidarias: “Este es el lugar que me sostiene”, explicó Day-Lewis. “Aquí es donde me he establecido. Es el refugio donde me recupero”. El actor agregó que la vida en el condado le permitía “hacer lo que quiera con tranquilidad”.

Así lo atestiguaron también sus vecinos en declaraciones al periódico local Irish Independent, quienes de vez en cuando se lo encontraban en el bar Roundwood Inn, disfrutando de una pinta Guinness, y a quien describen como “un caballero”. “Pero normalmente le dejamos tranquilo, por eso le gusta vivir aquí”, resumía un local. “Es un hombre encantador, siempre tiene un momento para pararse y charlar un rato”, agregaba el dueño de un comercio local. “Viene de vez en cuando a por el periódico y eso”, reveló el dueño de la tienda de comestibles Justine’s, “pero es un hombre muy reservado”, agregó.

En Wicklow no está solo, sino que comparte su vida con su esposa, la realizadora y guionista Rebecca Miller, hija del dramaturgo Arthur Miller y de la fotógrafa Inge Morath. La pareja se casó en 1996 y tienen dos hijos juntos, Ronan Day-Lewis, de 26 años, y Cashel Blake Day-Lewis. El actor también es padre de Gabriel-Kane Day-Lewis, fruto de su relación con la actriz francesa Isabelle Adjani, con quien mantuvo una relación de 1989 a 1995, sin llegar a pasar por el altar.

A sus 67 años, Day-Lewis ha realizado alguna que otra aparición pública, aunque estas siempre han estado relacionadas o bien con su propia familia (en 2023 acudió al estreno de la película She Came To Me, dirigida por su esposa) o con sus amigos. En enero de 2024, asistió al homenaje que la National Board of Review le dedicó al director Martin Scorsese, a quien dedicó unas entusiastas palabras: “El trabajo de Martin, con la luz de su propia creación, iluminó mundos desconocidos que irradiaban con una energía peligrosa e irresistible, mundos que eran misteriosos para mí y absolutamente fascinantes”. Actor y director trabajaron juntos en dos largometrajes, La edad de la inocencia, de 1993, y Gangs of New York, de 2002: “Una de las mayores alegrías y privilegios de mi vida fue encontrarme un día trabajando con él”, aseguró el actor.

Poco más se ha sabido de su vida durante sus siete años de descanso. En la primavera de 2023, la revista People informó que había sido visto en la ciudad de Nueva York, sostenido por dos muletas. Ni él ni sus representantes informaron sobre lo sucedido. En las nuevas imágenes del rodaje, el actor reaparecer en plena forma.