Jamie Foxx rompe su silencio tras su complicación médica: “Bajé al infierno y regresé”
El actor ha hablado del misterioso problema de salud que le llevó a ser ingresado en un hospital, pero sigue sin precisar la causa. Ahora, insiste en que está listo para volver
El actor estadounidense Jamie Foxx (Texas, Estados Unidos, 55 años) ha hablado por primera vez desde que fue ingresado en el hospital el pasado 11 de abril debido un misterioso problema de salud. Este viernes, Foxx subió a sus redes un video en el que se sinceró sobre el susto que había vivido estos meses. “Pasé por algo por lo que pensé que nunca, nunca pasaría”, dijo el intérprete oscarizado. Y mientras que desmitificó algunos de los rumores que habían propagado estos meses sobre su condición, admitió: “Bajé al infierno y regresé”.
Foxx no reveló qué fue la causa de su hospitalización, pero sí por qué había tardado tanto tiempo en hablar. “Sé que mucha gente estaba esperando una actualización,” empezó a relatar el actor, cada vez más emocionado. “Pero para ser sincero, no quería que me vierais así, con tubos por todo mi cuerpo, sin saber si iba a sobrevivir”, continuó.
Sobre todo, expresó su enorme agradecimiento por todo el apoyo que ha recibido, de sus amigos, sus fans y, por supuesto, su familia. En el texto de la publicación escribió: “Mil millones de gracias a todos. Ha sido un camino largo, pero todas las oraciones, la buena gente y Dios me ayudaron”. Además, hizo una mención especial al papel esencial de su familia. Comentó que si no fuera por su hermana Deirdra Dixon, su hija Corinne Fox, junto con un buen equipo médico y su fe, no podría haberlo superado.
Dados los comentarios que recibió el video, es evidente que Foxx es una figura muy querida dentro de la industria del cine. Varios amigos, entre ellos actores como Will Smith, Dwayne Johnson, Kevin Hart, Reese Witherspoon y Cameron Diaz publicaron mensajes en los que expresaron su profunda felicidad al ver que su amigo se había recuperado. Johnson, por ejemplo, escribió: “Voy a darte el abrazo más grande del mundo cuando vuelva a verte”. Al ver a su compañero de reparto de Ali (2001) intentar prevenir las lágrimas, Will Smith, preguntó: “¿Quién está cortando las cebollas? Te quiero, Foxx. Se necesita y se aprecia tu luz ahora mismo”.
Reese Witherspoon y Cameron Diaz, su compañera de reparto de Back in Action, película en la que Foxx estaba trabajando cuando tuvo el problema que le llevó al hospital, reflejaron sentimientos similares. En un mensaje lleno de emoticonos de corazones, Diaz escribió: “Te queremos. El mundo necesita tu poder... tu luz... tu fuerza... Estoy muy feliz al verte de regreso, amigo”.
Foxx agradeció especialmente la discreción de sus seres queridos durante todo este proceso, pero admitió que esto provocó la propagación de varios rumores sobre su estado de salud mientras estuvo ingresado. “Al estar callado, a veces las cosas se escapan de las manos”, confesó en el vídeo. “Algunos dijeron que estaba ciego, que estaba paralizado, pero no lo estoy. Pero sí, bajé al infierno y regresé”. Como siempre, explicó todo con sentido de humor, cruzando los ojos en broma y hasta fingiendo quitarse una máscara porque se llegó a decir incluso que Foxx tenía un clon.
La primera noticia sobre que el intérprete de Ray había sido ingresado en el hospital se dio a conocer el pasado 12 de abril cuando su hija, Corinne, subió el siguiente mensaje en su Instagram: “Queríamos compartir que mi padre, Jamie Foxx, experimentó una complicación médica ayer. Afortunadamente, gracias a la rápida actuación y a los grandes cuidados, ya está en vías de recuperación”. El incidente ocurrió mientras el actor estaba rodando la película Back in Action en Atlanta (Georgia).
Jamie Foxx Waves to Fans on Boat, First Sighting Since Hospitalization https://t.co/W3GVrKgEde
— TMZ (@TMZ) July 10, 2023
Desde entonces, las actualizaciones sobre su estado de salud han sido pocas y esporádicas y, a raíz de la escasa información, los medios de comunicación llegaron a dar la impresión de que su familia se estaba preparando para lo peor. Sin embargo, sus primeras apariciones en público a principios de julio acallaron todas esas conjeturas. Fue entonces cuando Foxx fue fotografiado fuera de casa por primera vez, a bordo de un barco en el río Chicago, ciudad donde había estado recibiendo tratamiento médico.
Al concluir el video, el actor volvió a mostrarse emocionado de nuevo. “Sé que hablan de gente llorando en vídeos, pero no voy a hacer una segunda toma. Es lo que es”, confirmó. “Si me ves a partir de ahora ponerme a llorar de vez en cuando, es solo porque ha sido duro. Estaba enfermo. Pero ahora tengo mis piernas debajo de mí, así que me acompañarán”. Así de contundente han sido sus palabras y han dejado un mensaje claro: Jamie Foxx está de vuelta.
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