De cómo Cameron Díaz y el abandono de su terapeuta salvaron a Drew Barrymore en su recaída en el alcohol

Las historias sobre los problemas con el alcohol y las drogas de Drew Barrymore se repiten desde que la actriz (Culver City, California, EE UU, 48 años) tenía 11 años. Ella misma ha sido la encargada de contar, en reiteradas ocasiones, los duros momentos que ha tenido que atravesar. La intérprete vivió una infancia y adolescencia rodeada de focos tras protagonizar siendo una niña E.T., el extraterrestre (1982) y se vio obligada a crecer de una manera que no le correspondía por edad. Ahora ha sido su amiga Cameron Diaz quien ha hablado sobre cómo vivió el proceso y cómo la acompañó durante la época más tormentosa de su vida.

Lo que vivió Barrymore siendo una niña podría considerarse como una de las experiencias más traumáticas de la historia de Hollywood: adicta al alcohol, a la marihuana y a la cocaína desde los 11 años e internada en un centro de desintoxicación a los 14. Desde entonces, su vida ha sido como una montaña rusa entre el alcoholismo y la sobriedad. La separación de su marido, el marchante de arte Will Kopelman, en 2016, con quien estuvo cuatro años y tuvo dos hijas (Olive, de 10 años, y Frankie, de ocho), fue la gota que colmó el vaso para una nueva recaída en la bebida, que se convirtió en su consuelo.

En una larga entrevista con el diario estadounidense Los Angeles Times, Barrymore explica cómo ella era la única persona que no se apoyaba a sí misma, mientras que quienes la rodeaban sí lo hacían. “Te tratas como una mierda y dices: ‘¿Cuándo voy a ser suficiente para mí misma?’. Finalmente, en 2019, tras grabar el episodio piloto de su programa de televisión The Drew Barrymore Show, dejó de beber definitivamente. Fue cuando se dio cuenta de lo importante y lo feliz que le hacía su trabajo y que, para poder hacerlo bien, tenía que estar sobria.

Cameron Diaz, a quien conoce desde los 14 años (su primer encuentro fue en una cafetería en la que Barrymore trabajaba por entonces) y con quien protagonizó Los ángeles de Charlie (2000), estuvo junto a ella todo el tiempo, aunque reconoce que fue “difícil”. “Sabía que si todos nos quedábamos con ella y le dábamos el apoyo que necesitaba, encontraría su camino. Tengo fe absoluta en ella. Uno no puede ni siquiera imaginar lo duro que fue ser ella de niña, y luego tuvo la capacidad de salvarse a sí misma”, explica la actriz de 50 años en el mismo especial.

Barrymore reveló en la entrevista cómo su terapeuta, Barry Michels —especialista de renombre que ha trabajado también con Gwyneth Paltrow— la abandonó en el proceso porque era incapaz de lidiar con ella, explicándole que no podía tratarla si ella misma se daba por vencida. “Era por mi forma de beber. Le dije: ‘Lo entiendo. Nunca te he respetado más. Ves que no estoy mejorando y espero, algún día, poder recuperar tu confianza”, recuerda la actriz. Incluso sus amigos la amenazaron con hacer lo mismo. En 2018, llamó de nuevo a Michels y le confesó que ya se sentía capaz de cambiar y de terminar con su problema con el alcohol. Volvió a trabajar con ella y un año después el problema con el alcohol terminó.

El divorcio con el padre de sus hijas la llevó a una etapa que poco a poco ha ido dejando atrás. En la entrevista, Barrymore ha contado como, tras la separación, decidió volcarse en su soltería y estuvo seis años sin mantener relaciones sexuales: “Necesitaba permanecer honrada, en una especie de luto por la pérdida de una familia que juré que tendría para mis hijas. También quería aceptar la que sería nuestra nueva normalidad como una familia diferente”. Aunque ha confesado que estuvo muy a gusto durante ese periodo de tiempo, también explica que le preocupó no volver a la normalidad nunca. No ha reconocido ni ha dado más detalles sobre ello, pero si ha dejado claro que la etapa de mantenerse soltera ya es historia.

Ahora, la intérprete y empresaria se encuentra en uno de los momentos más importantes de su carrera: con sus líneas de belleza y de hogar, además del exitoso programa de entrevistas que lleva su nombre y que ha renovado ya por una cuarta temporada: “Estoy preocupada por saber cuándo saldré del carrusel. Trabajo desde que tenía 11 meses, no estoy segura de cómo parar”.