Margarita de Dinamarca pide perdón “como madre” por quitarle los títulos a sus nietos: “He subestimado mi decisión”
Cinco días después de anunciar la reducción de la familia real danesa, la monarca ha emitido un comunicado reconociendo que no sabía que el príncipe Joaquín y sus hijos iban a sentirse tan molestos
La reina Margarita de Dinamarca ha lamentado la reacción de su hijo menor, el príncipe Joaquín, a su decisión de quitar el título de príncipes y princesa a sus vástagos, aunque se mantiene firme. “He tomado mi resolución como reina, madre y abuela, pero como madre y abuela he subestimado hasta qué punto mi hijo menor y su familia se sentirían afectados. Me ha causado una gran impresión y lo siento”, señaló la monarca danesa en un comunicado publicado la noche del lunes en sus redes sociales.
La casa real danesa comunicó por sorpresa la semana pasada la decisión, que entrará en vigor el próximo 1 de enero, justificándola por el deseo de la reina de que estos nietos puedan formar su “propia vida” sin las obligaciones de la institución. El anuncio fue vinculado además a otro anterior de 2016, en el que se avisaba de que el príncipe Christian, hijo de su primogénito, Federico, sería probablemente el único de los ocho nietos de la reina que recibirá una asignación del Estado como adulto.
La resolución afecta a cuatro de los ocho nietos de Margarita II: Nicolás, de 23 años, y Félix, tres años menor, fruto del primer matrimonio de Joaquín con la condesa Alejandra; y Enrique, de 13, y Athena, de 10, del segundo matrimonio con la princesa Marie. Alejandra ya reaccionó el mismo día, mostrando su “tristeza” y “conmoción” en nombre de la familia, mientras que su exmarido lo hizo al día siguiente con declaraciones a los dos tabloides daneses.
El príncipe Joaquín aseguró que había sido informado en mayo de que sus hijos perderían el título real al cumplir los 25 años, pero que cinco días antes del anuncio se le avisó del cambio de planes. “Estoy muy, muy triste por verlos tristes a ellos y sin entender lo que les ha ocurrido”, dijo Joaquín, que habló de “castigo” e insinuó que la relación con su madre no era buena.
El pasado viernes, la princesa Mary, mujer del príncipe heredero Federico de Dinamarca, también reaccionó a la decisión de la reina, asegurando que iban a revisar el título de sus hijos —a excepción del de Christian— “cuando llegue el momento”. Horas más tarde, desde París, era el príncipe Joaquín quien habló a los medios de comunicación daneses junto a su esposa Marie, donde aseguraron que desde que se hizo público el deseo de la reina, no había vuelto a haber comunicación con ella.
En su último comunicado, Margarita aseguró que llevaba tiempo meditando su resolución y que su “obligación” y su “deseo” eran que la monarquía se adaptara a los tiempos, lo que de vez en cuando implicaba “decisiones difíciles”. “Nadie debe dudar de que mis hijos, nueras y nietos son mi gran alegría y orgullo. Ahora espero que como familia podamos encontrar la tranquilidad y el camino en esta situación”, afirmó.
“Ser poseedor de un título real implica una serie de compromisos y tareas que, en el futuro, recaerán sobre unos pocos miembros de la familia real. Este ajuste, que veo necesario para asegurar el futuro de la monarquía, quiero que se haga en mi propio tiempo [de reinado]”, afirmaba la reina en su comunicado, reconociendo que pese a esa decisión como monarca, como matriarca de la familia había infravalorado el poder de esa decisión.
Margarita tiene otros cuatro nietos, hijos de Federico y la princesa Mary: Christian, el segundo a la sucesión al trono danés, de 15 años; Isabella, de 14, y los mellizos Vincent y Josefina, de 11.
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