Muere Olivia Valère, reina de la Marbella dorada, a los 75 años

La empresaria francesa Olivia Valère, una de las mujeres clave de la etapa dorada de Marbella, ha fallecido este jueves 9 de junio en su casa de París (Francia), a los 75 años, a causa de un cáncer de estómago que padecía desde hace aproximadamente un año. La enfermedad se había agravado en las últimas semanas y por eso se había trasladado hasta su vivienda en la capital francesa, donde ha pasado sus últimos días junto a su familia, entre ellos sus tres hijos, Arnaud, Karen y Xavier. Valère será enterrada en los próximos días en la localidad marbellí, como había solicitado, donde ha vivido buena parte de los últimos 40 años en una bella casa de aires andaluces en la zona de Guadalmina, que compaginaba con otras estancias en localizaciones como Punta del Este (Uruguay), Nueva York o la capital francesa.

Valère era una de las personas más reconocidas y singulares de Marbella. Hace dos años, durante el verano de 2020 y poco después de acabado el confinamiento, la empresaria charló con este periódico acerca de su vida y sus negocios. Recordaba que llegó por primera vez a la Costa del Sol a principios de 1983 para el cumpleaños de la cantante Kimera. “En París había nevado y hacía mucho frío. Aquí el cielo era turquesa y brillaba el sol. Y me quedé”, aseguraba entonces. “Todo el que viene a Marbella sueña con volver. Aquí la vida es fácil y sabes que cada mañana el sol va a brillar”, añadía. Solo un año después de su primera visita, en 1984, abría su primera discoteca, a la que eran asiduos personajes como Sean Connery, Alfonso de Hohenlohe, Jaime de Mora o Shirley Bassey. En el hall de su casa contaba con un montaje fotográfico donde compartía imagen con personajes tan variados como Naomi Campbell o Jesús Gil.

En el año 2000 inauguró cerca de Puerto Banús la discoteca Olivia Valère, club que sigue siendo una de las referencias nocturnas de Marbella y que hoy gestionan sus tres hijos. Allí, de hecho, celebró su 59 cumpleaños en 2019 el actor Antonio Banderas, que acudió junto a su pareja, Nicole Kimpel, y la hermana de esta, Barbara, además de varios amigos, fiesta que fue amenizada por los Gipsy Kings. Allí también trabajó una noche Paris Hilton, que pinchó música aunque Valère no quedó muy contenta con su actuación. “La nueva Marbella es de los DJs”, decía entonces, en 2015. Uno de sus últimos proyectos fue su participación en el reality Mujeres ricas, aunque también pasó por programas como Ven a cenar conmigo o ¡Mira quién salta!

Valère llegó a Marbella a mediados de los años ochenta, donde rápidamente logró hacerse un nombre gracias a aquella primera discoteca, que abrió en Puerto Banús. “Era otro mundo, otro público. La noche ahora la hacen los jóvenes”, contaba con su acento francés a este diario en una entrevista hace siete años. “Los famosos de entonces hacían una vida normal, salían y se mostraban tranquilamente. Había paparazis, pero menos que ahora y no eran tan pesados”, recordaba, explicando cómo entonces “los famosos no se vendían”: “Hoy es más complicado (…) Si asisten a un evento, es por amistad o porque les pagas”.

Uno de sus peores momentos llegó hace dos años, con la pandemia de coronavirus. “Esta temporada es dificilísima: nadie se atreve a organizar sus vacaciones para que se las cancelen a última hora”, reconocía a este diario hace dos años, en su casa, sentada junto a sus dos perros, Dolce y Gabbana y recurriendo a la nostalgia. “Esto ahora es otra cosa, ya no es como las noches que echábamos con Sean Connery, Alfonso de Hohenlohe, Jaime de Mora o Shirley Bassey”, rememoraba. “Esta ciudad sobrevivirá porque tiene cosas que no tiene ninguna otra: clima, moda, mar. Y, además, no tiene comparación con otros destinos de lujo como Ibiza, Saint-Tropez o Mikonos: aquí es todo mucho más barato”, aseguraba, siempre desde su prisma de inversora.