Revuelto de trastos
Delantales a los que les asoma un gatete, salvadores de verduras, guantes de horno para trekkies y batidoras bonitas: la recopilación de cacharritos de marzo para aficionados a la cocina trae todo esto, y más.
Ya está aquí, ya llegó, el revuelto de trastos de marzo ya aterrizó. En él encontraréis cosas bonitas, cosas prácticas, cosas absurdas pero muy necesarias, algún que otro cacharro para cocinar y vuestra dosis mensual de StarWarsfilia galopante. Disfrutadlo y mantened la tarjeta de crédito enfundada (si podéis).
Han tenido que juntarse los brasileños y los suecos para enseñarnos al resto del mundo algo tan –aparentemente– evidente como que una bandeja y una pandereta pueden perfectamente compartir funciones. Hecha de madera lacada antideslizante y metal, forma parte de una edición limitada de IKEA que se inspira en Brasil y es perfecta para sacar mojitos a ritmo de samba. ¿Su precio? 17,99 euros.
El delantal con gato de Jolyon Yates
Es un delantal, y tiene un gato negro: que una locatis de la cocina y los morrongos como yo acababa encontrando esta monada y publicándola en esta sección era solo cuestión de tiempo. Cuesta 31 euros, es de algodón y tinta textil, está hecho a mano y lo puedes pedir en blanco, amarillo, verde o naranja –el delantal, el gato negro es innegogiable– en esta tienda de Etsy.
Food protector, para alargar la vida de tus vegetales
Unos superhéroes han llegado a Kickstarter para salvar a las zanahorias, las uvas y demás habitantes de tu cocina. Gracias a los principios microencapsulados de aceites esenciales vegetales que contienen unos sobres que albergan en su interior, estas manzanitas y muñequitos de inspiración kawai facilitan la conservación en óptimo estado de frescura de las frutas y verduras.
Si alguien sobre su seguridad, en la página se puede ver como uno de sus creadores se come el contenido de uno de los sobres (aunque también avisan de que no están muy buenos). Puedes participar en la campaña y hacerte con uno de ellos a partir de 20 dólares.
Fondue savordaya de Emile Henry
Pocos platos hay tan entrañables como la fondue: está pensada para compartir con más gente, para ponerse ciego a vino blanco –cuenta la leyenda que si la tomas con agua se te hace una pelota en el estómago– y para hacer digestiones de boa constrictor feliz de haberse puesto hasta las patas de quesazo. Además, los cacharros en los que se hace son bonitos de narices, como este de 24 cm, esmaltado en cerámica para que el calor se reparta uniformemente y no se absorban olores o sabores. Lo fabrica –con arcilla de Borgoña cocida a más de 2000ºC– Emile Henry, una empresa francesa que fabrica artículos para la cocina desde 1850, con garantía de 10 años. Cuesta 89,90 en Claudia and Julia.
Molde de silicona de la Estrella de la Muerte
No sufráis, queridos frikis, que ya tenemos aquí nuestro trasto mensual de Star Wars. Esta vez se trata de un molde de silicona –lavable y resistente al calor, por si queréis usarlo para hacer pastelitos– para que os toméis vuestros whiskazos con un hielo con forma de la Estrella de la Muerte, aunque me temo que no tardará mucho en convertirse en una bola vulgaris. Cuesta unos 5 euros más gastos de envío en Amazon.
Batidora de vaso vintage de Smeg
Darle un toque retro a la cocina con los electrodomésticos es mucho más sexy que hacerlo con unas baldosas de flores o un gresite del año de la polka. Los fabricantes lo saben, y se esfuerzan cada vez más en hacer de sus cacharros algo digno de figurar en la cocina de Betty Francis de Mad Men. La gente de Smeg lo hacen especialmente bien, marcándose unos diseños retrofuturistas como el de esta batidora de 1,5 litros de capacidad y 800 W de potencia, con jarra de Tritan –un material plástico de larga duración– y carcasa del motor y base en aluminio fundido a presión. Cuesta 284 euros, y aunque también la fabrican en vainilla, plata y negro, nos quedamos con la roja sin ninguna duda.
Guante de horno del Doctor Spock
No hay campo sin flores ni revuelto de trastos sin guante de horno. El de hoy está inspirado en el Doctor Spock, el entrañable personaje de Star Trek interpretado por Leonard Nimoy que deseó “larga vida, y próspera” a la generación de los setenta, cuyo saludo queda plasmado en este pieza que te permitirá sacar y meter cosas del horno a la manera vulcaniana. Es lavable, de algodón y poliester y cuesta unos 16 euros en Amazon.
Piedra para hacer pan y pizza en el horno
Una base muy, muy, muy caliente es uno de los secretos de una pizza fina, crujiente y sabrosa (y también le va la mar de bien al pan). Hacerla directamente sobre el fondo del horno es uno de los trucos que seguro que nuestro ídolo de masas aprueba, pero si quieres hacer más de una a la vez o no te convence el sistema, siempre puede recurrir a una piedra como esta, con un soporte de alambre para cogerla fácilmente que también te permitirá servirla en la mesa y ayudará a que se mantenga caliente más tiempo. Cuesta 15,90 en María Lunarillos y te convertirá en un experto pizzero (con la ayuda de nuestra UBM, claro).
La cuchara-pluma para decorar platos
Es una cuchara, pero es una pluma. Se llama Deco Spoon, y sirve para que, si quieres, puedas escribir tu pasaje favorito del Quijote sobre tu ensalada. Su diseño, que deja caer el contenido con el mismo principio de una pluma estilográfica antigua, permite pintar platos con salsas, vinagretas densas, reducciones, cremas o purés ligeros. Son de madera y acero inoxidable, y hay una más grande para los platos salados y otra más pequeña pensada para los postres. Por solo 17,90 –en Gadgets Cuina– te asegurarás de que esas gotitas decorativas que querías ponerle a tu plato no acaban convertidas en churretones.
Vajilla de porcelana con estampado floral
No sé que tienen los platos con flores que los hace tan bonitos. Cualquier cosa que pongas en estos, de porcelana y con motivos diferentes –según el modelo–, lucirá como si fuera primavera. Hay platos planos, hondos, de postre y una bandeja preciosa, se pueden poner en el lavavajillas y el micro y cuestan entre 4,99 (el plato pequeño) y 22,99 (la bandeja ovalada) en Zara Home.
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