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Ayuso vuelve al Zendal para su discurso de Año Nuevo y describe un Madrid rodeado de “desafíos y amenazas”

La líder del PP elige el hospital para su discurso de Fin de Año, en el que defiende la Hispanidad, la colaboración público-privada y la capitalidad regional

Ayuso hospital Zendal
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante su visita este martes al Zendal.COMUNIDAD DE MADRI
Juan José Mateo

Nada es casual en política. Y mucho menos la escenografía. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, elige este martes como escenario de su discurso de Fin de Año el hospital enfermera Isabel Zendal, la infraestructura que convirtió en el centro de su estrategia durante la pandemia del coronavirus. Con el futuro del complejo rodeado de interrogantes ―tras costar más de 150 millones, apenas tuvo un ingreso de media al día en 2023―, la baronesa defiende su utilidad para atender a enfermos de ELA y usa su intervención para mezclar gestos, promesas y advertencias que invocan al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sin llegar a nombrarlo. Los gestos: una catarata de agradecimientos a médicos, profesores, bomberos... y una reivindicación de la Hispanidad. La promesa: Ayuso ofrece políticas “sin ideología” tras celebrar su apuesta por “innovar” en modelos de colaboración público-privada o hacer de la maternidad y la paternidad “centro” de sus políticas. Y la advertencia: describe a Madrid como una región enfrentada a amenazas, y dispuesta a defenderse.

“Tenemos por delante muchos desafíos, incluso amenazas: el reto de la energía, sin la que nuestros proyectos industriales y digitales no serán posibles”, dice la presidenta de Madrid, que en enero acusó al Gobierno central de querer “asfixiar” a la región con la actualización del plan de Desarrollo de la Red de Transporte de Energía Eléctrica 2021-2026. “También”, continúa la baronesa conservadora; “preservar nuestras competencias mientras seguimos siendo la región más solidaria; defender la unidad de España, nuestra Constitución y el Estado de derecho, la independencia del Poder Judicial, la dignidad del Parlamento y el decoro de la vida pública, la concordia entre españoles, el respeto al papel fundamental de la Corona, y de nuestras Fuerzas Armadas y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado”.

Pero la cosa no se queda ahí. “Se nos exige mucho a Madrid”, asegura Ayuso. “Todos los ojos nos miran: los de quienes nos admiran por el mundo entero, y también los ojos de quienes menos la quieren”, describe, situando a la región en el centro de un conflicto que esboza pero no concreta. “Por eso somos los primeros en cumplir la ley, y en pedir que se cumpla en España y por el mundo. En no permitir la impunidad, ni callar ante el abuso, ni el totalitarismo en cualquiera de sus formas”, asegura. “Madrid no se acostumbra, ni cede, ante la indignidad y el abuso”.

De nuevo, la intervención de la líder conservadora incluye algo parecido a una lista de quejas, apenas insinuadas, contra el Gobierno de Sánchez. Las hay, por ejemplo, por el choque institucional. “Ser la capital de España es una enorme responsabilidad y una riqueza para todos los españoles”, argumenta Ayuso. “Sería suicida privar a cada español de un activo que ha costado siglos y que resuena en el mundo entero, como todo lo que pasa en cada región española, que resuena aquí en Madrid”, añade en una referencia velada a sus enfrentamientos con el Ejecutivo central, que han incluido el proyecto estatal de ubicar fuera de la región la mayoría de sedes de nuevos organismos.

Y las hay, también, por la política fiscal. Por eso desliza Ayuso ese “preservar nuestras competencias mientras seguimos siendo la región más solidaria” y concreta que aboga “por tener impuestos bajos y no arbitrarios, en ejercicio de nuestra autonomía financiera”. Una evocación de la apuesta de su gobierno por rebajar impuestos, que el Gobierno central critica. Un choque que ha llevado a que Madrid recaude la tasa del patrimonio a las fortunas de más de tres millones de euros para evitar que lo haga el Estado.

Así despide a 2024 Ayuso y así da la bienvenida a 2025: con un discurso que recuerda que no está dispuesta a ceder ni un centímetro y centrado en una región “con muchas ganas”, un guiño al lema electoral con el que logró la mayoría absoluta en mayo de 2023.

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Sobre la firma

Juan José Mateo
Es redactor de la sección de Madrid y está especializado en información política. Trabaja en el EL PAÍS desde 2005. Es licenciado en Historia por la Universidad Complutense de Madrid y Máster en Periodismo por la Escuela UAM / EL PAÍS.
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