Cervantes, Shakespeare y el confinamiento
Me pregunto cuántos, durante estos días, habrán descubierto que la literatura es el mejor antídoto contra el aburrimiento

No sé si este año es lógico que hablemos de celebrar el día del libro. Hay tanta desolación a nuestro alrededor, tanta desesperanza, tantas malas noticias, que cualquier cosa que evoque un festejo suena a broma pesada. Hace semanas que vivimos confinados, que no podemos pasear por la calle, ir al cine, al teatro, a un concierto. Ni a una librería. Y evoco otros 23 de abril, cuando, ignorante de mi propia felicidad, compraba libros y a veces hasta los firmaba en Barcelona, en aquellas mañanas de rosas rojas y páginas escritas....
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