De Zimbabue a Madrid: los votantes desde el extranjero que le dieron un escaño más a Vox

Es 19 de mayo, y quedan apenas nueve días para las elecciones municipales y autonómicas del 28-M. Jonathan, que vive en Alemania, está inquieto. Las papeletas para votar en las elecciones de la Comunidad de Madrid no han llegado todavía a ningún consulado, según cuenta en un correo dirigido a esta redacción. Y él quiere ejercer su derecho, y participar de los comicios, aunque eso suponga tener que desplazarse a otra ciudad distinta a la que reside, en un país diferente al que organiza los comicios, y hacer la cola pertinente. No es un caso único. Hasta 28.833 madrileños residentes en el extranjero votaron el 28-M. Muchos lo hicieron contra viento y marea, como refleja el ejemplo de Jonathan, y desde destinos con resonancias exóticas y husos horarios bien distintos a los de Madrid, como Arabia Saudí, Azerbayán, Bangladesh, Ghana, Irak, Irán, Malasia, Nueva Zelanda o Namibia, según un balance publicado este viernes en el boletín regional. Su participación fue clave: cuando se contaron sus votos, días después de los comicios, Vox ganó un escaño que perdió el PP (para un balance de 11 y 70), sin que afectara a la mayoría absoluta de Isabel Díaz Ayuso.

“Muchas gracias a todos los que nos habéis votado desde el extranjero, gracias a vosotros tenemos un escaño más”, celebró Rocío Monasterio. “Los que estáis en la distancia entendéis muy bien quién defiende las ideas de la verdad, la belleza, la libertad y la hispanidad”, siguió. “Gracias amigos de corazón”.

El escaño ganado por Vox en el último suspiro validó el esfuerzo hecho por los partidos para captar apoyos entre esa bolsa de votantes compuesta por 372.447 electores. El PP incluso hizo dos vídeos explicándoles cómo podían ejercer su derecho, y lanzó un tercero en el que Ayuso les pedía ayuda. Más Madrid, por su parte, publicó un documento con instrucciones, e intentó crear una comunidad de posibles votantes alrededor de la etiqueta #MadridTanLejosTanCerca para redes sociales. Esa inversión de tiempo y recursos muestra que los partidos creían que estos electores podían marcar la diferencia. Y de alguna manera lo hicieron: apenas 2.453 papeletas emitidas desde fuera de España le sirvieron a la extrema derecha para subir un escaño, pese a que el PP había cosechado en ese recuento 12.018, por 4.385 de Más Madrid y 4.234 del PSOE, según cifras publicadas en Twitter por José Antonio Martínez de Páramo, el representante de los conservadores ante la junta electoral.

¿Y de dónde vinieron esos votos? Alemania, con 3.598 votantes, fue el país con más sufragios emitidos desde el extranjero para las autonómicas madrileñas, seguido por Reino Unido (3.461) y Francia (3.254), según las cifras publicadas este viernes por la junta electoral en el boletín oficial de la región. Pero hubo muchos votos que llegaron desde fuera de Europa, y procedentes de destinos alejados y recónditos. Así, 199 personas votaron desde Emiratos Árabes; 163 lo hicieron desde Australia; 111 desde China; 29 desde Cuba; 20 desde Kuwait; o 9 desde Zimbabue.

Níger y Moldavia

En Zimbabue, precisamente, votó un 53% del censo, por el 54% de Níger, y el 67% de Moldavia. El país con más votantes potenciales era Estados Unidos, con 45.714, de los que solo votó el 6,5% (3.014), seguido por México (37.037, de los que votó el 3,45%) y Reino Unido (3.461, el 10,79%). Por ciudades, donde más se votó fue en Londres (2.732 sufragios), seguido de Bruselas (1.538) y México (1.057).

Los madrileños residentes en el extranjero con derecho a votar tenían dos opciones de cara al 28 de mayo. Entre el 3 y el 23 de mayo podían enviar su voto por correo certificado. Y entre el 20 y el 25 de mayo podían votar en urna, normalmente en las embajadas y consulados de sus países de residencia. Para ello tenían que estar inscritos en el Censo Electoral de Residentes Ausentes en el Extranjero (CERA). Sin embargo, las primeras elecciones sin el sistema del voto rogado para los residentes permanentes en el extranjero, que antes obligaba a anunciar la intención de ejercer ese derecho y solicitar la documentación correspondiente, no se han traducido en un gran aumento de la participación.

En el caso de Madrid, la abstención de los votantes desde el extranjero llegó hasta el 92,25%. Solo participó, por tanto, el 7,7% de esos electores, frente al 6,1% de las elecciones adelantadas de 2021, de altísima participación. Porque cuando uno vive fuera, la excepción es querer participar en la política de una región que queda a miles de kilómetros.

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