Por Andalucía fracasa y las izquierdas separadas pierden diez escaños
Teresa Rodríguez consigue dos diputados y resta apoyos a la confluencia avalada por Yolanda Díaz, Podemos, IU y Más País, que logra grupo propio por la mínima. Los resultados amenazan la estabilidad del espacio
La coalición Por Andalucía falla en su estreno. La unión de Podemos, IU y Más País, primera apuesta por la reconstrucción del espacio a la izquierda del PSOE, ha fracasado este domingo en su intento de movilizar al electorado progresista. La marca respaldada por la vicepresidenta Yolanda Díaz y el resto de ministros de Unidas Podemos logra grupo propio ―por la mínima― al obtener cinco escaños y el 7,7% de los votos; pero el resultado se sitúa 8,5 puntos por debajo del que logró ese espacio político en 2018, cuando la anticapitalista Teresa Rodríguez lideraba el proyecto y alcanzó los 17 diputados. Rodríguez, candidata de Adelante Andalucía, que concurría en esta ocasión por separado, consigue dos parlamentarios (4,6%) y resta apoyos a sus antiguos compañeros de filas. Tras una campaña en la que ha ido de menos a más, el resultado, aunque muy modesto, avala su apuesta por un andalucismo libre de “tutelas” de Madrid. El batacazo de la confluencia encabezada por Inmaculada Nieto amenaza la viabilidad de una coalición que nació envuelta en polémicas, la estabilidad de Unidas Podemos e incluso la estrategia de frente amplio que promueve la propia Yolanda Díaz.
Desde la sede de Izquierda Unida en Sevilla, la cabeza de lista de Por Andalucía ha querido espantar los fantasmas y se ha comprometido a “fortalecer la unidad” dentro del espacio y hacer un “buen uso del voto” depositado en la candidatura. “La reflexión era acertada. La unidad es imprescindible para fortalecer el respaldo institucional a las políticas que, entendemos, necesitan los trabajadores. Lamentablemente, la fuerza política que no se sumó ahora podrá ver el destrozo electoral, y por tanto social, que provoca la desunión”, ha acusado Nieto, evitando la autocrítica y responsabilizando, sin nombrarla, a Teresa Rodríguez.
Fuentes de Podemos, en un primer momento, han tratado de desmarcarse del resultado, atribuyéndoselo a IU y a Yolanda Díaz. Las únicas valoraciones oficiales han llegado a través de redes. “Es una noche difícil para las personas progresistas. Necesitamos abrir un nuevo tiempo que mire al futuro. La ciudadanía nos está esperando”, ha apuntado la vicepresidenta en alusión a su proyecto. La candidata de Por Andalucía también ha querido desvincular lo sucedido este domingo de su futura plataforma. “Es una mala noticia para el pueblo andaluz que sigan gobernando quienes recortan y privatizan los servicios públicos”, ha señalado, por su parte, la ministra Ione Belarra.
Votó Andalucía. Es una noche difícil para las personas progresistas.
— Yolanda Díaz (@Yolanda_Diaz_) June 19, 2022
Necesitamos abrir un nuevo tiempo que mire al futuro.
La ciudadanía nos está esperando
Mientras en Francia la unión de la izquierda de Jean-Luc Mélenchon y los socialistas ha conseguido un segundo puesto en las legislativas, el experimento andaluz obtiene una respuesta mucho más tibia. Además de luchar contra el desconocimiento de Nieto entre la población (solo un 35,8% de los electores la identificaba hace unos días, frente al 69,3% que conoce a Teresa Rodríguez), los partidos no han sido capaces de sobreponerse al accidentado alumbramiento de la marca. Las tensiones en torno al nombre del grupo, el liderazgo —que la formación de Belarra quiso retener— y el reparto de puestos y recursos retrasaron tanto el acuerdo que Podemos y el ecologista Alianza Verde quedaron fuera del registro oficial (sus candidatos tuvieron que concurrir como independientes). La negociación provocó un fuerte malestar en el partido fundado por Pablo Iglesias, que se encargó de verbalizar su enfado y ahondó la crisis abierta hace meses con Díaz y el partido de Alberto Garzón.
Después del enfrentamiento inicial, la realidad es que Podemos ha estado desdibujado en la campaña. Miembros de la coalición confesaban su temor en los últimos días a que se identificase al partido con la opción de Teresa Rodríguez. En los últimos días, la dirección de Podemos Andalucía envió cartas a la militancia e intensificó los mensajes en redes sociales para reforzar la idea de su pertenencia a la confluencia liderada por Nieto. De poco sirvió.
Es una mala noticia para el pueblo andaluz que sigan gobernando quienes recortan y privatizan los servicios públicos. Gracias a los y las militantes que habéis levantado a pulso esta campaña y que seguiréis defendiendo una Andalucía social, feminista y verde. Sois imprescindibles
— Ione Belarra (@ionebelarra) June 19, 2022
La candidata de Adelante Andalucía, cuya formación ha recibido el resultado en Cádiz con aplausos en la calle y gritos de “guapa”, ha cargado con dureza contra los que fueron sus socios de coalición. “Han puesto más esfuerzos en dejarnos fuera sin recursos que en enfrentar a la derecha y la extrema derecha, y creo que hoy deben estar haciendo examen de conciencia”, ha dicho. “Quienes hablan del marco de la desunión de la izquierda tendrían que haber pensado antes. Deberíamos haber preservado ese espacio plural, pero para algunos fue prioritario buscar el enemigo interno”, ha acusado.
Con pocos recursos, la líder anticapitalista ha sabido desmarcarse del resto de candidatos con un mensaje dirigido a un electorado joven, de izquierdas y andalucista. Aunque el balance es humilde, supone, en sus propias palabras, “germinar una semilla de ese proyecto netamente andaluz”.
Las dudas se ciernen a partir de ahora sobre Por Andalucía y las relaciones dentro de ese espacio político, también en Madrid. El reparto de culpas comenzó ya durante la noche: mientras Podemos cree que se les ha invisibilizado, IU daba por descontado que un mal resultado serviría a los de Belarra para cargar contra Díaz. Garzón ha sido el dirigente nacional que más ha reivindicado en los últimos días la continuidad del proyecto. “Tenemos mucho más en común que cualquier otra pequeña diferencia, y vamos a seguir construyendo sobre eso”, defendió el máximo dirigente de Izquierda Unida en el acto de cierre de campaña. “Enhorabuena a quienes lo han dado todo para defender las ideas justas. Tropezarse, levantarse, aprender y hacerlo mejor”, ha sostenido, por su parte, este domingo Íñigo Errejón, líder de Más País.
Aunque la vicepresidenta Yolanda Díaz ha repetido en multitud de ocasiones que su futura plataforma no será “una suma de siglas”, sino un proceso distinto, abierto a la sociedad civil y en el que los partidos, al menos por ahora, jugarán un papel secundario, su compromiso con la coalición ha sido pleno en esta campaña. A diferencia de lo sucedido en Castilla y León, donde su implicación fue mínima, en Andalucía ha posado con la candidata Inmaculada Nieto para las fotografías oficiales y ha protagonizado actos multitudinarios con el resto de líderes nacionales (Garzón, Belarra e incluso Errejón).
Los resultados de este domingo dibujan un panorama complejo y enrarecen el ambiente entre los partidos a menos de tres semanas de que la vicepresidenta lance Sumar, la gira por España para reunirse con diferentes colectivos y trazar su programa político. Pese a la reciente destitución de la jefa de gabinete de Irene Montero, la dirigente de IU Amanda Meyer, y el descontento evidente de unos con otros por la organización de la campaña, las formaciones habían pactado una especie de tregua hasta los comicios. Lo que pase a partir de ahora es todavía una incógnita. De momento, Podemos ha decidido no convocar la rueda de prensa habitual de los lunes a la espera de que Izquierda Unida haga su propia valoración. En todo caso, más allá de Twitter y si no cambia su agenda, será previsiblemente Pablo Iglesias, en su papel de tertuliano, el encargado de dar voz al descontento de los suyos.
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