Un juzgado investiga un presunto amaño en la cúpula de la Policía Local de Valencia

El juzgado de Instrucción número 4 de Valencia ha abierto diligencias de investigación ante un posible amaño en las pruebas de ascenso de comisarios principales en la cúpula de la Policía Local de Valencia. Dos de los mandos que se presentaron y fueron suspendidos se han querellado contra el tribunal de la prueba, formado por el actual jefe del cuerpo policial, José Vicente Herrera, y otros dos comisarios, por supuestas irregularidades. El juzgado admitió a trámite una querella el pasado 14 de octubre y ha abierto una investigación por posibles delitos de prevaricación, tráfico de influencias, falsedad documental y malversación contra los miembros del tribunal de selección. El resultado del examen está recurrido además por lo contencioso-administrativo.

El caso comenzó en 2021 cuando la Policía Local de Valencia convocó unas pruebas de mejora de empleo, en realidad un ascenso, a las que los agentes pueden presentarse si cuentan con la titulación adecuada y se someten a un examen. Los seleccionados se incorporan luego a una bolsa de empleo y ocupan las plazas disponibles hasta que se celebra la oposición. Aquel año se convocaron para todas las categorías: de agente a oficial, de oficial a inspector, de inspector a intendente, de intendente a comisario, y de comisario a comisario principal, que es la máxima de las categorías, y cuyo resultado ha acabado en los tribunales.

Los denunciantes son otros dos comisarios, Javier Genovés y Benjamín Lara, y los denunciados, el jefe de la Pplicía Local José Vicente Herrera , Rafael Mogro y Alberto Cabeza, los tres miembros del tribunal de selección. Los mandos afectados relatan en una de las dos querellas admitidas a trámite, como ha adelantado este jueves El Confidencial, una serie de presuntas irregularidades para promocionar a “personal de confianza” cuando falta poco tiempo para la jubilación de Herrera, señalan fuentes conocedoras de la investigación.

En la primera ocasión, días antes del examen, en marzo de 2021, corrió entre los comisarios un listado de nombres de comisarios como los seguros para el ascenso. Uno de los mandos candidatos al ascenso, que no se encontraba en la citada lista, puso a través de un burofax estos nombres en conocimiento de un abogado días antes de la prueba. Y pasado el examen, se confirmó el listado. El resto de candidatos al ascenso aprobaron pero con notas inferiores a las de los tres primeros seleccionados y beneficiarios de la mejora de empleo.

Uno de los perjudicados recurrió por la vía administrativa, que derivó en el juzgado de lo contencioso-administrativo número 5 de Valencia. Este resolvió que había que repetir la prueba por “indefension neta” de los suspendidos. El examen, de tipo oral, no se grabó, se hizo a puerta cerrada y sin darle publicidad, sin testigos. Así era complicado probar cualquier reclamación. El tribunal ordenó que se repitiese la prueba, se cesase a los aprobados y se organizase una selección con todas las garantías. La policía recurrió la sentencia al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) y los ascendidos continuaron en sus puestos.

Sin embargo, el TSJCV acabó dando la razón en 2023 al tribunal de lo contencioso pero hasta finales de septiembre de ese año, cuando hay elecciones y el PP gobierna en minoría, La Policía Local no cesó a los mandos ascendidos en 2021, según fuentes policiales. El jefe de la Policía convoca entonces la repetición del examen para el 4 de octubre de 2023. Pero de nuevo, cinco días antes de esa repetición, se hace pública una orden fake que anticipa los nombres de los que iban a salir de nuevo seleccionados.

En esta segunda prueba de ascenso, se convocó a todos los candidatos a la vez —aunque uno de ellos, que luego sería aprobado, se presentó tarde— pero hubo tres representantes de los sindicatos CC OO y UGT presentes. Las notas se firman el mismo día 4 y salen aprobados los mismos que aparecen en la orden fake. Y de nuevo, los suspendidos reclamaron la revisión de la prueba y sus alegaciones fueron rechazadas por el propio tribunal de selección, según testimonio de afectados, que volvieron a recurrir el resultado en la jurisdicción contencioso-administrativa. Precisamente en una de las diligencias de investigación ordenadas por ese juzgado se confirma, tras un análisis de metadatos de la documentación facilitada por el tribunal de selección, que las actas de los exámenes se hicieron y retocaron con posterioridad a que los suspendidos reclamaran su revisión y pidieran explicaciones, concretamente el 17 de octubre.

Fuentes policiales aseguran que el convenio laboral que rige este tipo de pruebas dicen que en el tribunal para las mejoras de empleo tiene que haber un funcionario, habilitado nacional, que actúe de fedatario público. En ese caso, no lo hubo, según los denunciantes.

Fuentes del Gobierno local que preside María José Catalá remiten, a preguntas de este diario, el caso al anterior gobierno municipal, de Compromís y PSPV pero, si bien el primer examen, que un tribunal acabó ordenando repetir, fue en 2021, momento en el que gobernaban los dos partidos citados anteriormente; el proceso de ascenso se repitió en octubre de 2023 con María José Catalá, del PP, en la alcaldía de Valencia. El ejecutivo local no ha hecho ningún comentario ni precisión más sobre el caso.

José Vicente Herrera, actual jefe de la Policía Local de Valencia, es un veterano del cuerpo municipal. Hizo un paréntesis cuando se convirtió en jefe de gabinete de Juan Cotino, del PP, cuando este estuvo al frente de la Dirección General de la Policía, y más tarde se convirtió en comisario jefe de Valencia, con Rita Barberá en la alcaldía. José Serrano lo sustituyó en el cargo en 2015 pero, tras su jubilación en 2019, Herrera volvió a hacerse cargo de la jefatura hasta la fecha.