Valencia niega que se pierda espacio peatonal en la supermanzana de la Petxina pese a los aparcamientos habilitados

Los técnicos del Ayuntamiento de Valencia han contestado el requerimiento del Ministerio de Transportes sobre la supermanzana de la Petxina e insisten en que “el estado actual de la actuación cumple lo solicitado y concedido y por ello no hay infracción”, y califica los cambios introducidos en la zona peatonal de “ajustes técnicos” que no alteran el proyecto. El ministerio envió hace unas semanas una carta al Gobierno local de María José Catalá por las modificaciones realizadas en esta superisla urbana, entre ellas, la creación de unas 28 plazas de aparcamiento para vehículos y motos, que, según sostiene el Ayuntamiento, “no quitan espacio peatonal”.

Transportes envió el pasado 19 de junio un requerimiento —también a otras capitales españolas— en la que preguntaba a Catalá por qué ha reducido el espacio peatonal en favor de nuevos aparcamientos en la supermanzana de la Petxina, un proyecto inaugurado en marzo de 2023 para pacificar el tráfico y crear zonas sin coches en pleno casco urbano de la capital. El departamento que dirige Óscar Puente pedía a la alcaldesa que “aporte información adicional y detallada sobre posibles alteraciones del proyecto original, y justifique que se cumple su solicitud de subvención” porque su incumplimiento implica una multa y la devolución de las ayudas europeas recibidas por un importe total de 3,5 millones de euros.

Ahora, el consistorio, gobernado por PP y Vox, advierte que la actuación no se da por finalizada hasta el 31 de diciembre y por ello están en plazo de realizar ajustes, y consideran el requerimiento de Transportes “una afrenta al racional debate administrativo”, es decir, “si no hay acreditado incumplimiento alguno de hitos y objetivos generales y específicos programados de la actuación” no se puede revocar la ayuda concedida.

Según los técnicos de Urbanismo, el objetivo de la supermanzana, que era recuperar para el peatón un espacio público que antes estaba destinado al vehículo, se sigue cumpliendo, así como la mejora de la calidad climática al reducirse las emisiones de CO2 y el cambio de movilidad hacia un modelo más activo y sostenible, fomentando el uso de transporte publico colectivo.

El informe señala que las actuaciones posteriores se han ejecutado para mejorar el proyecto original después de 15 de meses de puesta en servicio tras detectarse insuficiencias en la señalización y protección de espacios peatonales definidos en el proyecto original.

El consistorio justifica además parte de las modificaciones en las numerosas quejas y sugerencias de los vecinos de la zona, “que no merman el espacio peatonal” y suponen la creación de 10 plazas de estacionamiento de motocicleta, seis de turismo y el cambio de uso de 12 de las 24 plazas de carga y descarga, así como la creación de una nueva plaza para personas de movilidad reducida entre estas 12 plazas reconvertidas.

Respecto a las plazas de motocicletas, se han creado en zonas pequeñas sin uso peatonal útil puesto que hasta ahora estacionaban en las aceras, recuperándose así espacio para el peatón. Según los técnicos, “la pérdida de espacio peatonal se debe considerar neutra o residual ya que estos vehículos antes ocupaban la acera y el espacio peatonal utilizado para generar estas plazas tenía un uso nulo”.

El informe remitido al Ministerio recuerda que el proyecto de la supermanzana supuso la supresión de 256 plazas de aparcamiento libre, lo que ha complicado el estacionamiento de los vecinos en la zona, por lo que se han creado seis plazas de aparcamiento de carácter temporal en los espacios destinados a terraza de bar ya que hoy en día no existen peticiones sobre estos espacios. Estas nuevas plazas son de uso provisional como zona de aparcamiento para residentes hasta que se solicite su ocupación para terraza, por lo que son reversibles.

En cuanto a las plazas de carga y descarga, se han cambiado 12 de las 24 plazas para plazas de estacionamiento, al existir un exceso de las primeras, puesto que anteriormente a la supermanzana no había reserva de plazas de carga y descarga y 24 es una cifra sobredimensionada vistos los comercios existentes, lo que ha provocado un uso indebido de las mismas, ya que los vecinos las utilizan como aparcamiento permanente ante la falta de otras zonas de aparcamiento.

Además, estas plazas de carga y descarga, antes y ahora, son susceptibles de utilización para aparcamiento por los vecinos en horario nocturno, festivos y domingos, por tanto, se trata de un uso compatible, por lo que “la pérdida de espacio peatonal se debe considerar nulo”, indica la respuesta al Ministerio.

La concejala socialista María Pérez ha apuntado, tras acceder al expediente municipal en la que los vecinos expresan su opinión sobre la súpermanzana y revela que de las 33 opiniones vecinales recogidas por escrito, una mayoría reivindica las zonas peatonales y más zonas verdes frente a una minoría que pide que se revierta el proyecto. “Solo una persona solicita aparcar dentro”, ha manifestado.