La Agencia Valenciana de Cambio Climático hará un barómetro sobre la percepción social de las políticas de mitigación

La Generalitat dispondrá de su propia agencia para coordinar los diferentes planes de lucha contra el cambio climático y la descarbonización. El dictamen al proyecto de ley —que todavía deberá pasar por el plenario para su aprobación definitiva— ha salido este martes adelante, tras el debate de enmiendas, en la comisión de Medio Ambiente de las Cortes Valencianas. La agencia elaborará un barómetro bienal sobre la percepción ciudadana de los efectos del cambio climático en sus vidas y de las políticas de mitigación.

La creación de este instrumento, uno de los compromisos del segundo pacto del Botànic, tiene como misión coordinar las diferentes estrategias contra el cambio climático, tanto en los diferentes departamentos de la Generalitat como con los ayuntamientos, la sociedad civil y la comunidad empresarial.

La agencia se encargará de analizar periódicamente la evolución de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y los mercados de carbono; también calibrará la vulnerabilidad de los recursos y los sistemas naturales, los sectores económicos y los territorios en los impactos del cambio climático y evaluará el grado de implantación de las políticas en materia de cambio climático, así como fomentar las actividades de investigación científica y de innovación sobre el cambio climático, y la participación de empresas, administraciones e instituciones en proyectos y programas de adaptación y mitigación, entre otros.

La diputado del PP, Elisa Díaz ha asegurado que la agencia es “un chiringuito más” del Botànic, que costará cada año 3,5 millones de euros: “Sus funciones las puede llevar a cabo por la Dirección General de Cambio Climático en la Consejería de Agricultura y Emergencia Climática. De hecho, la propia ley reconoce que hasta que se cree la agencia, sus funciones las llevará adelante ese departamento. Creemos que es innecesario”.

El parlamentario de Ciudadanos Eduardo del Pozo se ha posicionado en parecido sentido. “La agencia conllevará nuevos impuestos confiscatorios, que castigarán a los valencianos y a las empresas de la Comunidad”. Del Pozo ha señalado que, con la crisis económica actual, “no es el momento de gastar casi cuatro millones de euros de todos los valencianos en crear la Agencia Valenciana del Cambio Climático cuando ya existen organismos públicos que pueden hacer la misma función”.

Para el diputado de Vox, José Luis Aguirre, esta agencia supone duplicar organismos”; mientras que la diputada del grupo de No Adscritos, Rebeca Serna, ha pedido, vía enmienda, que los argumentos de la agencia “sean siempre técnicos y científicos y no políticos”.

La diputada de Compromís, Graciela Ferrer, por su parte, ha defendido que la agencia “dotará de eficacia y agilidad” las políticas “transversales, sectoriales y de coordinación” de la Generalitat en la lucha contra el cambio climático. Ferrer ha reiterado la “necesidad” de este nuevo organismo para “abordar la amplitud de las medidas que hay que poner en marcha, recogidas en la Ley de Cambio Climático”.

La diputada de Unides Podem, Beatriz Gascó, ha destacado “el peso político” que tiene esta agencia, ya que “ha de luchar contra el mayor reto que tenemos en este planeta”; mientras que el diputado del PSPV, David Calvo, ha defendido que es un proyecto de ley “muy claro, concreto y conciso” y ha insistido en buscar “el consenso y el diálogo”.

Creación de un observatorio del agua

Los grupos del Botànic han presentado también enmiendas que incluyen la creación de un Consejo de Participación Ciudadana, que permita “nutrir de las percepciones, conocimiento y capacidades disponibles en la sociedad a la hora de diseñar y llevar a término las tareas de la agencia”. Con ello, ha defendido Ferrer, se contribuirá además a la “transparencia, la rendición de cuentas y la participación activa de estas políticas que son fundamentales para hacer frente al reto del cambio climático”.

Compromís y Unides Podem han presentado también una enmienda conjunta para la creación del Observatorio Valenciano del Agua de la Comunidad Valenciana, como órgano consultivo y de participación ciudadana, vinculado al “reconocimiento del derecho humano al acceso al agua”, incluido en la Ley de Cambio Climático, ha defendido Ferrer. La elaboración del barómetro ha sido otro de los añadidos de los grupos parlamentarios del Botànic.