Ximo Puig acusa a la Comunidad de Madrid de causar “un grave problema” al Tajo por no depurar todas sus aguas
El presidente valenciano sale en defensa del trasvase al Segura que el Gobierno quiere recortar y critica la contaminación del Jarama de la que alerta un trabajo de la Universidad de Castilla-La Mancha
El presidente valenciano, Ximo Puig ha incidido esta mañana en que “uno de los problemas graves del Tajo es que la Comunidad de Madrid no depura”. Lo ha dicho esgrimiendo una fotografía desde la tribuna de las Cortes valencianas en la que se ve la confluencia del río Jarama, con un agua de color marrón oscuro, con el Tajo, mucho más claro. El político socialista ha reiterado que la falta de una depuración integral de las aguas del afluente que discurre de Norte a Sur por el territorio madrileño es uno de los principales problemas del río más largo de la península Ibérica. También ha instado a la portavoz parlamentaria del PP, María José Catalá, a que hable con la presidenta madrileña, la popular Isabel Díaz Ayuso, sobre el problema.
De esta manera, el presidente valenciano ha salido en defensa del actual trasvase Tajo-Segura, que riega Alicante, Murcia y parte de Almería y que el Gobierno pretender recortar para fijar e incrementar el caudal ecológico en su cabecera, y ha respondido a las críticas de Catalá. La portavoz popular ha acusado al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page (PSOE), de humillar a los “valencianos” al invitar irónicamente el pasado martes a Puig y al presidente murciano, Fernando López Miras (PP), a visitar Israel, país puntero en aprovechamiento al máximo del agua, para conocer las técnicas que allí se utilizan, como la del riego por goteo, muy extendido en la Comunidad Valenciana. García-Page contestaba a su vez a la concentración en contra del trasvase del día anterior en Alicante con presencia de todos los principales partidos valencianos y murcianos.
No es la primera vez que Puig señala al río Jarama. También lo ha hecho la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera. Para la también vicepresidenta tercera del Gobierno la mejoría del Tajo pasa por depurar mejor en Madrid y los vertidos al río Jarama, por optimizar el trasvase, reduciéndolo, y por crear infraestructuras en Alicante y Murcia para paliar las aportaciones. El ministerio quiere incrementar el caudal ecológico del Tajo progresivamente hasta 2027 y que en Aranjuez pase de los 6 metros cúbicos al segundo actuales a 8,6, lo que supondrá una reducción del trasvase al Segura de más de un centenar de hectómetros cúbicos al año.
El principal objetivo de la Cátedra del Tajo de la Universidad Castilla-La Mancha y la Fundación Soliss, constituida en 2021, es “la recuperación integral y la mejora del estado ecológico y químico del río” que baña la ciudad de Toledo y sus afluentes. En uno de sus trabajos recientes, indica que el Tajo recibe en su confluencia con el Jarama unos aportes de aguas residuales más de tres veces superior a su caudal, con altas concentraciones de contaminantes que los sistemas de depuración actuales no son capaces de reducir
En la confluencia de los dos ríos destacan dos detalles: la desproporción de caudal entre el Jarama (afluente) y el río Tajo (receptor) y la diferente tonalidad de las aguas, un azul verdoso las del Tajo y un pardo oscuro intenso las del Jarama, según recoge la información de Efe, datada el pasado mes de abril. El motivo es la alta concentración de contaminantes, ya que según la Confederación Hidrográfica del Tajo el volumen de vertidos de aguas residuales urbanas e industriales en los ríos Manzanares (afluente del Jarama) y Jarama supera a los caudales circulantes, “lo que impide que se den procesos de autodepuración en el cauce, y por consiguiente, que se cumplan las normas de calidad”. Uno de los problemas más señalados son los vertidos incontrolados e ilegales en el río a los que no se ha puesto freno a lo largo del tiempo, según han denunciado plataforma cívicas y diversos expertos.
Fuentes de la Consejería madrileña de Medio Ambiente han asegurado a este periódico que se depuran el 100% de las aguas residuales que se vierten en los ríos y han declinado entrar a valorar declaraciones políticas, no basadas en argumentos técnicos. En el mismo sentido se han manifestado fuentes de la empresa pública madrileña Canal Isabel II y aseguran que se cumple la ley a rajatabla en materia de depuración, “el 100%” de las aguas residuales del ámbito de su competencia. “Todos los vertidos que realiza Canal de Isabel II a los cauces madrileños desde sus depuradoras están autorizados por la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) y cumplen estrictamente con las condiciones de las autorizaciones de vertido que dicta este organismo como regulador de la cuenca”, aseguran. Y añaden: “Del total de vertidos autorizados por la CHT (1.810 autorizaciones y 1.754 hm3), los correspondientes a las depuradoras gestionadas por Canal solo representan el 9,7 % de las autorizaciones y el 33 % de los volúmenes vertidos”.
El presidente valenciano ha insistido en que la guerra del agua “con fines electoralistas” que propugna el PP no conduce a ninguna parte y ha apostado por la búsqueda de soluciones para disponer de “agua para siempre, de calidad y a un precio competitivo”, que incluye todo tipo de aportes. No obstante, ha manifestado su intención de defender “política y judicialmente el trasvase Tajo-Segura” y ha recordado que la Generalitat ha recurrido ante los tribunales en 39 ocasiones por minoración de aportes hídricos.
Minutos antes, María José Catalá había criticado al PSOE por apostar por la eliminación de los trasvases y por el uso extendido de las desaladoras y había pedido a Puig que medie ante el socialista Pedro Sánchez, presidente de Gobierno, para que no se pruebe el decreto que el trasvase al Segura para garantizar un mayor caudal ecológico en Aranjuez, en el entorno de los embalses de Entrepeñas, Buendía y Bolarque, donde confluyen el Jarama y el Tajo.
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