“Somos poco sostenibles y hacemos poco para corregirlo”, afirma el ecólogo Fernando Valladares

Hace apenas unos días que la COP26, la última Cumbre del Clima celebrada en Glasgow, se cerró y los análisis sobre sus resultados son inevitables. “En la cumbre sevha constatado que no solo somos poco sostenibles sino que hacemos poco para corregirlo”, concluye el ecólogo español Fernando Valladares, premio Rei Jaume I de Protección del Medio Ambiente 2021. El investigador considera que para luchar contra el cambio climático “no hay del todo” voluntad política en España, y afirma que “no se trata de poner más dinero, sino de usarlo con mucha más sesera” al aplicar las medidas.

Según ha indicado, en los últimos 30 o 40 años “hemos constatado que el ser humano ha hecho muy poco por corregir lo que en la cumbre de Río de 1992 se puso de manifiesto: que no éramos sostenibles”. Y sin ánimo de alarmar pero tampoco de ocultar la realidad, el galardonado recuerda que mueren todos los años del orden de medio millón de personas directamente por el cambio climático e indirectamente decenas de millones, “y no terminamos de tomar medidas concretas para ir frenando esa sangría”, sostiene.

Valladares, uno de los seis galardonados con los premios que este viernes entregará el rey Felipe VI en Valencia, ha destacado en una comparecencia ante la prensa que en España “no funcionamos bien en grupos multidisciplinares, los ministerios no se hablan entre sí”.

El biólogo del CSIC, después de muchos años dedicado a la investigación, dio hace cuatro o cinco un salto hacia la comunicación de la gravedad ambiental. Este científico investiga sobre la interacción entre factores de cambio global (cambio climático, especies exóticas invasoras, contaminación, sobreexplotación de recursos). “Nosotros estudiamos la interacción simultánea de todos ellos y cómo la diversidad puede atenuar alguno de los impactos del cambio climático. Así conseguimos modelizar escenarios de respuesta de los ecosistemas ante combinaciones de impactos del ser humano”, resume.

Según Valladares, la Cumbre del Clima ha desilusionado mucho, en parte porque algunas de las cosas que se esperaban resolver no es en la cumbre dónde pueden resolverse. Ha decepcionado también porque la ambición no ha sido la esperada. “Está el objetivo de no superar los 1,5 grados que ya se pactó en París hace seis años pero no se termina de aclarar el cómo”, añade. Y pone un ejemplo a modo de anécdota: “Me acuerdo cuando los líderes del G-20 se abrazaban todos felices diciendo una cosa que científicamente es un milagro, y es que la economía después de la covid iba a crecer y a la vez se iban a reducir las emisiones de carbono”.

La COP26 se ha quedado corta, en opinión del premiado, en el cómo y ha dejado demasiadas tareas a los países para que improvisen, para que hagan lo que puedan. “Pensemos además que la velocidad de implementarlas las marca el que va más despacio porque son acuerdos por consenso”, apunta Valladares.

Para este ecólogo con décadas de investigación a su espalda, España sale bastante bien parada en cuanto a preocupación por el cambio climático. El problema no es tanto la falta de conciencia social como de enfoque, de identificar objetivos.

Valladares ha echado en falta en la cita de Glasgow que se abordasen las causas últimas del cambio climático: “Y ahí es donde la ciudadanía y todos nosotros tenemos que hacer un análisis de conciencia y entender que todos tenemos que contribuir a ello, ser valientes y aceptarlo, como ahora estamos con las mascarillas. Hace falta que la ciudadanía entienda y empuje en una dirección muy concreta, y para eso los científicos podemos ayudar y el activismo puede cerrar el abanico de opciones [sobre las que empujar]”.

Antonio Cabrales, premio de Economía, especializado en modelos de comportamiento en redes sociales complejas, ha añadido que no se pueden reducir las emisiones contaminantes “si no estamos dispuestos a sacrificar nada. Es verdad que la gente es muy consciente del cambio climático pero cuando le preguntas si está usted dispuesto a pagar un 20% más en el precio de la energía para reducir el cambio climático una mayoría dice que no; entonces, no podemos echarle la culpa a los políticos si nosotros no estamos dispuestos a hacerlo”.

Según Cabrales, una de las razones por las que no quieren hacer algo es “porque no ven que afecte a todo el mundo por igual. La gente no quiere hacer nada si eso pica solo a una parte, seguramente a la que tiene menos”. En este sentido, el premiado ha abogado, al igual que Valladares, por que las ciencias sociales se unan a la medioambiental para hacer entender todas estas cuestiones a la ciudadanía.

Los galardonados de los Premios Rei Jaume I 2021, Licia Verde (Investigación Básica), Antonio Cabrales (Economía), Eduard Batlle (Investigación Médica), Fernando Valladares (Protección del Medio Ambiente), Nuria Oliver (Nuevas Tecnologías) y Benito Jiménez (Emprendedor) han coincidido en la necesidad de invertir en ciencia e investigación tanto por parte de las administraciones, como del ámbito empresarial, pero también, en el contexto actual de cambio climático y pandemia, donde “es urgente un compromiso individual de la sociedad”.