Valencia recupera sus grandes ferias presenciales con Iberflora

Feria Valencia agota las últimas horas antes de la inauguración de su primer gran certamen presencial después de año y medio de pandemia en que, o se cancelaron las citas comerciales o se celebraron digitalmente. Iberflora, que cumple medio siglo de existencia, abrirá mañana martes sus puertas a 400 expositores y entre 6.000 y 8.000 visitantes previstos —un millar serán extranjeros— con un protocolo de medidas anticovid —pese a la baja incidencia acumulada— como la toma de temperatura, los geles hidroalcohólicos o los tornos de acceso digitalizados.

La declaración del estado de alarma interrumpió abruptamente el calendario ferial, que volvió en julio del año pasado con el Salón del Automóvil de Ocasión, abierto al público general, y el evento dedicado a las comuniones pero de ámbito nacional. A lo largo del otoño tuvieron lugar también Gastrónoma en formato mixto —un aforo máximo de 1.000 personas y eventos online— e Iberflora se celebró también pero de forma mayoritariamente en formato digital. Al igual que Cevisama o Forinvest.

Año y medio después de estallar el coronavirus, el recinto ferial valenciano intenta recuperar el pulso poco a poco y el certamen de Iberdrola llega cuando ya hay movilidad internacional y buenos datos en España. El sector de las plantas y flores es partidario de volver a los certámenes comerciales porque el negocio ha crecido durante la pandemia. Los particulares y las instituciones han invertido mucho en jardinería desde que llegó el virus y los confinamientos.

Según fuentes feriales, este aumento de pedidos ha provocado escasez no solo de microchips sino también de productos de jardinería. Así que el certamen, que cumple 50 años de vida, ocupará tres pabellones del recinto ferial, tendrá 400 expositores y recibirá miles de visitantes, también extranjeros.

Feria Valencia ya pasó su examen anticovid en septiembre con la celebración de exámenes multitudinarios, como las oposiciones de Correos. Vuelven a la presencialidad “porque hay buenos datos de la pandemia y porque la movilidad internacional no está tan comprometida como en otras ocasiones”, explican.

La capital valenciana rompe con la celebración de Iberflora dos años sin certámenes relevantes, de los que se conocen como masivos, aunque los responsables feriales coinciden en que hasta 2023 no se reactivará el sector definitivamente. Para volver a las cifras anteriores a la pandemia habrá que esperar, por tanto, dos años, según las previsiones.

Tomarle la temperatura a expositores y visitantes es una manera también de recordarles que todavía hay covid. Además existe una aplicación de móvil que evitará el papel y permitirá acceder al recinto con un código en los dispositivos móviles. También funcionará un sistema que renueva el aire en pabellones de 10.000 metros cuadrados en cuestión de pocos minutos y el tránsito de personas estará organizado.

Después de Iberflora, que se celebra junto a Ecofira, el recinto ferial acogerá más congresos —por ejemplo, el del PSOE los días 15, 16 y 17— u otro que reunirá a todos los proveedores de Ford. Las siguientes grandes ferias serán a principios de 2022, con Cevisama (sector cerámico y azulejero) y Fimma-Maderalia.