Alba Bou: “La izquierda debe olvidar los dogmatismos y centrarse en convencer a la clase trabajadora”
La nueva alcaldesa de El Prat de Llobregat vaticina que los expertos de la comisión técnica que estudian cómo agrandar la infraestructura optarán por afectar el espacio de la Ricarda

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El PSUC ganó las elecciones municipales de 1979 en El Prat de Llobregat. Nunca ha dejado la alcaldía, aunque sí ha cambiado el nombre del partido de gobierno: ICV, después ICV-EUiA y ahora comunes. El pasado 16 de enero, renunciaba al cargo el alcalde Lluís Mijoler tras seis años al frente del Consistorio. Su sustituta es Alba Bou, una concejal histórica que con 40 años se ha convertido en la primera alcaldesa de esta ciudad que alberga el aeropuerto de Barcelona.
Pregunta: ¿Cuándo supo que iba a ser alcaldesa?
Respuesta: Después de las vacaciones de verano acordamos, entre todos, que al alcalde Mijoler no podía compaginar el Ayuntamiento y el Parlament.
P: ¿En qué se diferencia de Mijoler?
R: Yo participo en la vida política de esta ciudad desde los 17 años. Aprendí y me hice mayor en política de la mano del alcalde Luís Tejedor, que es mi padre político. Mijoler llegó mucho más tarde, en un momento en que nuestro contexto político se comía el mundo.
P: Tejedor fue alcalde durante 37 años. ¿Usted lo será mucho tiempo?
R: Seguro que estaré hasta final de este mandato. Tendré que ver si me gusta ser alcaldesa y si lo hago bien. Luego mi formación elegirá candidata.
P: ¿Qué han hecho mal los Comunes para que ahora solo gobiernen en El Prat?
R: Con la extrema derecha no hicimos una lectura correcta. En el mandato anterior, en el pleno de El Prat no estaba ni el PP; ahora tenemos PP y Vox. Les han votado. Tenemos que olvidar dogmatismos y esforzarnos para convencer que nuestros postulados son los que convienen a la clase trabajadora.
P: ¿Van a dialogar con Vox?
R: Me costará mucho entenderme con Vox pero a esa formación la ha votado gente trabajadora. Vox quiere destruir el estado del bienestar y mi esfuerzo debe ser para explicar a los que les han votado que nos necesitan a nosotros para mantener su nivel de vida.
P. ¿Por qué está en contra de ampliar el aeropuerto?
R: Lo que hoy tenemos es fruto del pacto Delta firmado en 1994 con el resto de administraciones. Entonces ya se amplió el aeropuerto y también el puerto. Ese pacto pedía a El Prat hacer unos sacrificios territoriales a cambio de compensaciones ambientales que garantizaban un cierto equilibrio. Estos pactos no se han cumplido.
P ¿Qué falta?
R: Nuestros espacios naturales están en una situación crítica. Falta agua en las lagunas porque ha habido un desequilibro provocado por la gran losa de cemento que es el aeropuerto. Esta losa ejerce de freno para que el agua llene las lagunas. El corredor biológico del delta no se está cumpliendo porque hay un aeropuerto en medio. Había un pinar con flora y fauna que está en estado comatoso. Además, en nuestro parque agrario hay trabajo y se da de comer a la provincia… No entiendo cómo se nos pide más esfuerzo con otra ampliación del aeropuerto.
P La infraestructura también paga sus tributos a El Prat y da riqueza.
R: El aeropuerto es una oportunidad laboral para muchos vecinos de El Prat, como lo son el Puerto y la Zona Franca. El Prat es un ayuntamiento con ingresos extraordinarios por tener estas infraestructuras en su término municipal. Aún así, no nos pueden hacer elegir entre oportunidades laborales y territorio. No es verdad que con la ampliación habrá más trabajo para nuestros vecinos.
P: Les han excluido de la comisión técnica que diseñará la propuesta de ampliación del aeropuerto.
R: Los expertos de la comisión técnica opinarán que la única posibilidad de la infraestructura es la ampliación del aeropuerto. Lo harán excluyendo al principal damnificado de cualquier propuesta que es El Prat. Es desleal.
P: Si la ampliación afecta a la zona de la Ricarda, ¿qué puede hacer el Ayuntamiento?
R: Personarnos como afectados e interponer acciones legales.
P: ¿Denunciarán?
R: Denunciar es mi responsabilidad, la del equipo de gobierno y la del ayuntamiento. Además, me gustaría contar con todas las fuerzas del pleno. En el mandato pasado fue unánime la oposición a la ampliación.
P: El ejecutivo central está formado por la coalición PSOE-Sumar, en El Prat gobiernan Comunes y PSC, y en la Generalitat el PSC necesita a los Comunes. ¿Si se amplía el aeropuerto, se romperán gobiernos?
R: No me corresponde romper gobiernos. Yo pediré posicionamientos claros ante los representantes nacionales de mi formación.
P: ¿Peligra la coalición con el PSC en El Prat?
R: No hay nada que me haga pensar que el PSC de El Prat esté a favor de la ampliación del aeropuerto. Ellos han manifestado públicamente que su partido, a nivel autonómico y estatal, tiene un posicionamiento, pero les acepta la discrepancia local.
P: ¿Cuál es su alternativa a ampliar el aeropuerto?
R: No queremos cerrarlo. Tenemos polígonos industriales, centros de logística, actividades satélites al aeropuerto que funcionan bien y que nos permiten tener la tasa de paro más baja del Baix Llobregat.
P: El aeropuerto da trabajo, pero molesta.
R: El Prat tiene un alto nivel de vida. Conocemos los problemas de ruido de ciudades vecinas -Castelldefels y Gavà- y nos solidarizamos. Nosotros hemos encontrado el equilibrio necesario.
P: El Ministerio de Cultura compró en enero la Casa Gomis en la Ricarda ¿Es un intento de poner fin a la ampliación?
R: Hace más complicada la ampliación, pero no la imposibilita.
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P: ¿Cómo reforzará la protección del delta?
R: Tenemos un consorcio de espacios naturales en el delta que está infrafinanciado, mientras la Comisión Europea nos dice que tenemos que proteger, mantener y ampliar los espacios naturales.
P: En el discurso de investidura dijo que otra prioridad era la vivienda.
R: Estamos construyendo 300 viviendas públicas de alquiler asequible. A largo plazo, nuestro proyecto de crecimiento es el Eixample Norte, desde las vías del tren a la autovía de Castelldefels. En este barrio -la Seda y la Paperera- hoy hay descampados, pero se construirán 5.000 viviendas y la mitad serán protegidas.
P: ¿Cómo se imagina la ciudad de aquí a una década?
R: Me gustaría que la ciudad hubiera rechazado definitivamente la ampliación del aeropuerto sin que tengamos que estar peleando cada cinco años. Me gustaría que las familias con niños o ancianos a su cargo quisieran quedarse en El Prat. Me gustaría que en algún momento la Generalitat soterrase la autovía o que llegue la línea 1 del metro al municipio.
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