Barcelona modifica de urgencia la gestión del comedor de 42 guarderías públicas tras la quiebra de la empresa

Centenares de familias de 42 guarderías municipales de Barcelona han recibido con estupor este miércoles la noticia de que la empresa que gestiona el comedor escolar no puede continuar ofreciendo el servicio. El Ayuntamiento ha reaccionado rápidamente y ha puesto en marcha un procedimiento de urgencia para resolver el problema, que pasa por repartir la gestión de los comedores afectados entre las empresas que trabajan en el resto de las escuelas infantiles de la ciudad.

La empresa Comer Bien empezó a gestionar el pasado mes de septiembre el comedor de 42 guarderías públicas de un total de 105, después de ganar parte del concurso impulsado por el ayuntamiento. Según las familias de algunos centros, los problemas de pago de las nóminas ya se arrastran desde hace tiempo, pero las sospechas de las dificultades económicas se han hecho evidentes este miércoles, cuando las familias han recibido un correo del Instituto Municipal de Educación de Barcelona, anunciando que la empresa les había comunicado telefónicamente este martes “dificultades para continuar prestando el servicio en las condiciones requeridas”.

Según el Ayuntamiento, la empresa todavía no está en concurso de acreedores, pero cuando lo esté se cancelará el contrato con Comer Bien y se modificará el contrato con las otras cuatro empresas que actualmente prestan el servicio en el resto de centros. El Consistorio asegura que esta misma mañana se ha reunido con ellas. “Las empresas han aceptado y han mostrado su voluntad de colaborar para resolver la situación”, aseguran desde el ayuntamiento.

Temporalmente, el ayuntamiento también ha autorizado a las directoras de las escuelas para que puedan comprar comida y poder resolver el problema de abastecimiento de alimentos, en caso de que se produjera. Esta situación, en principio, debería durar solo unos días, ya que el pacto con las cuatro empresas restantes -Ausulan, Servei Àpats, 7 i Tria y Cuina i Gestió- es que estas asuman ya los 42 comedores afectados a partir de la semana que viene. De esta forma, la idea es que las familias no vean alterado el funcionamiento del comedor.

En cuanto a las trabajadoras -que no han cobrado la nómina de enero- continúan en sus puestos de trabajo y serán subrogadas por las nuevas empresas.

El ayuntamiento ha enviado un mensaje de tranquilidad a las familias, asegurando que tienen “una respuesta de forma bastante inmediata”, pero que están a la espera de la comunicación oficial de la empresa.

Esta situación de emergencia que ha comportado la modificación de los contratos actuales se prolongará hasta finales de este curso, ya que el consistorio asegura que pondrá en marcha el proceso para licitar de nuevo la gestión de los comedores afectados para que una nueva empresa lo asuma a partir de septiembre.

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