Miles de personas se manifiestan en Barcelona contra la ofensiva de Israel en Gaza
Antes de la protesta, un centenar de manifestantes ocupan durante una hora un hotel propiedad de un empresario israelí en el centro de la ciudad
Miles de personas —19.000 según la Guàrdia Urbana, 70.000 según la organización— se han manifestado este sábado en Barcelona en solidaridad con el pueblo palestino y contra la ofensiva que Israel lanzó sobre la Franja de Gaza tras los ataques perpetrados por milicianos de Hamás el pasado 7 de octubre. Bajo el lema “Paremos el genocidio en Palestina”, los manifestantes han protestado contra los masivos bombardeos del ejército israelí en el territorio palestino, y contra el bloqueo al que está sometiendo a la población. A la marcha, que ha empezado a las 18.00 horas en Jardinets de Gràcia y ha transitado por el Paseo de Gràcia hasta el cruce con la Gran Via, se han adherido más de 200 entidades, entre ellas sindicatos como CC OO, UGT o Ustec, partidos políticos como Barcelona en Comú Podem o la CUP, o entidades sociales y vecinales. Antes, por la mañana, un centenar de personas de diferentes entidades sociales han ocupado un hotel del distrito de Ciutat Vella propiedad de un empresario israelí, una protesta a la que han puesto fin ellos mismos una hora después.
Con gritos de “boicot Israel”, “free, free Palestine”, “Estado sionista, Estado terrorista” y “Gaza no estás sola”, los manifestantes han recorrido el paseo de Gràcia hasta el cruce con la Gran Via. A la manifestación han acudido representantes de partidos políticos, entidades vecinales y muchas familias árabes que residen en la ciudad, que portaban pancartas con mensajes como: “Quién iba a decir que los descendientes del holocausto provocarían un genocidio” o “Israel asesina y Europa patrocina”. También ciudadanos que llevaban pegatinas con la frase “No en mi nombre”.
En el camino la marcha ha llegado a la altura de la oficina del Parlamento Europeo en Barcelona, situada en la esquina frente a la Pedrera. El edificio, en cuyo balcón figura una pancarta de apoyo a Ucrania, estaba cercado con vallas y custodiado por cinco furgones de Mossos d’Esquadra. Los manifestantes han silbado y gritado contra la institución, pero no ha habido ningún incidente. Los manifestantes también han criticado al alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, por retomar las relaciones de la ciudad con Tel Aviv, suspendidas en el anterior mandato. “Collboni, basta de complicidad”, han clamado.
La acción de protesta de la mañana en el hotel Cortés, ubicado en la calle de Santa Anna de Barcelona (que es propiedad del magnate israelí Haim Tsuff) ha indignado a parte de la comunidad judía en Barcelona, y la embajadora de Israel en España lo ha condenado como un “acto brutal y antisemita” en su cuenta de X (antes Twitter). En la misma red social, el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha reaccionado diciendo que “las comunidades musulmanas y judías de la ciudad son ejemplares y promueven el diálogo y la convivencia”. “Por eso, condenamos cualquier acto de violencia o señalamiento de personas o propiedades”, ha dicho, sin hacer referencia explícita a la protesta en el hotel, en la que no han tenido que intervenir los agentes de los Mossos ni de la Guàrdia Urbana, ya que los manifestantes se han ido por su propio pie.
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