Junts da un portazo al pacto con el PSC en la Diputación de Barcelona

La Ejecutiva de Junts per Catalunya ha optado por, de momento, darle un portazo a la oferta de pacto de los socialistas en la Diputación de Barcelona -donde han gobernado este mandato- y se lanzan ahora a “trazar una mayoría alternativa”. Así lo ha asegurado este martes el portavoz de la formación, Josep Rius, aunque sin detallar con qué partidos específicamente, sin aclarar si un posible fracaso de vía implicaría reactivar las negociaciones con el PSC o si incluiría al Partido Popular en esos contactos, por lo que había abogado Xavier Trias. El pleno de Constitución de la entidad provincial sigue sin fecha determinada y, de momento, tendría que ser después del día 10 de julio, para cuando técnicamente se ha de celebrar la última sesión de este mandato.

El portavoz no ha mencionado ni una sola vez a sus exsocios del Govern de Esquerra Republicana, que tendrían que jugar un papel clave para poder obtener esa mayoría alternativa. La Diputación cuenta con 51 sillas y su reglamento dice que si en primera vuelta ningún candidato obtiene 26 votos, en la segunda se elegirá a quien tenga más apoyos. PSC (17) y Junts (12) sumaban muy cómodamente, pero con este portazo y el veto ya conocido de ERC (11) a los socialistas, cualquier suma que los de Jordi Turull quieran bascular tendrá posibilidades reales en segunda vuelta.

La cercanía de las elecciones generales, con el independentismo queriendo rentabilizar en las urnas el rechazo contra la elección de Jaume Collboni como alcalde de Barcelona, hace muy difícil de asumir para Junts un apoyo en la Diputación. Rius ha aceptado que hay “un antes y un después” tras la jugada que dejó a Xavier Trias sin poder repetir en el cargo ante la suma alternativa de PSC, comunes y PP. “Lo que pasó es un ejemplo de mala política. Fue una operación de Estado para evitar que el independentismo gobierne la ciudad”, ha insistido.

Rius tampoco ha querido mencionar a Tot per Terrassa (TxT) y se ha escudado en la necesidad de llevar las negociaciones “con discreción” para evitar decir si hay ya acercamientos. La formación independiente de Jordi Ballart tiene un solo diputado que sería clave para decantar la balanza de cualquier lado. PSC, comunes (5) y TxT sumarían 23 escaños. Junts, ERC y TxT, también. En la población del Vallès, Ballart gobierna en coalición con las dos formaciones independentistas. “La Diputación no es de nadie, tampoco del PSC”, ha insistido para marcar distancias, aunque en ningún momento ha descartado de manera categórica que se pueda volver al escenario de repetir la coalición posteriormente. Los socialistas, según La Vanguardia, tantean un acuerdo con los comunes y dos diputados que, pese a haber concurrido a las elecciones en coalición con Junts, pactarían en el PSC en protesta ante el rechazo a la decisión de los neoconvergentes.

Junts ha logrado 336 alcaldías tras el 28-M, 274 de ellas con mayoría absoluta. La decisión de cerrarle la puerta al PSC significa que en la Ejecutiva ha fracasado el sector alineado con los alcaldes y dirigentes locales del partido, del que surgían la mayoría de las voces que abogaban por repetir la coalición en el Gobierno provincial. Si el PSC, que también explora una mayoría alternativa, sale victorioso, los de Jordi Turull perderán el gran altavoz y fuente de poder local que les quedaba tras la salida del Ejecutivo catalán, el pasado mes de octubre.

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