_
_
_
_

Enfermeras especialistas en atención primaria reubicadas en hospitales: “A un cardiólogo no le pondrían en dermatología”

El trasvase de personal de enfermería tras las oposiciones crea malestar entre el personal que no trabaja en plazas de su especialidad. El ICS asegura que la afectación es menor

Una enfermera se prepara para atender a un paciente
Una enfermera se prepara para atender a un pacientecarlos rosillo
Bernat Coll

Adriana tiene 30 años, es especialista en enfermería familiar y comunitaria y ahora tendrá que trabajar en un hospital. Inés, de 38, atendía en un consultorio rural desde hace 10 años pero hace una semana que trabaja en la UCI de un gran centro hospitalario. Laura, nombre ficticio, de 54, no quiere incorporarse a una planta hospitalaria y dejar atrás 12 años en un CAP.

La reubicación del personal de enfermería tras las oposiciones que han consolidado más de 3.300 puestos de trabajo fijos en Cataluña ha dejado descontento a una pequeña parte del sector, especialmente aquella que ha tenido que pasar de la atención primaria a la hospitalaria. “No han tenido en cuenta ni la especialidad de cada una ni la experiencia de todos estos años”, coinciden las profesionales que han tenido que iniciar una aventura en otro ámbito sanitario.

El Departamento de Salud planteó una oferta conjunta de plazas de enfermería sin especificar su naturaleza, agrupando a la vez las plazas de atención primaria con la de hospitalaria. El resultado ha sido un trasvase de piezas que ha dejado sin alternativa a algunas profesionales expertas en Primaria: las últimas plazas disponibles eran para trabajar en hospitales, que tradicionalmente ofrecen condiciones que dificultan más la conciliación por los turnos nocturnos y de fines de semana. “Con este proceso se produce una pérdida de experiencia y conocimiento en las enfermeras sin opción a ejercer su especialidad; y una sobrecarga de las profesionales que tendrán que formar a las recién llegadas”, alerta el Colegio Oficial de Enfermeras de Barcelona (Coib, por sus siglas en catalán).

Sin saber qué plazas estarían disponibles, las enfermeras eligieron primero las zonas en que querían trabajar. No conocieron la oferta concreta hasta el día de la elección definitiva, realizada por orden de puntuación. “Cuando me tocó elegir, solo había plazas en un hospital”, lamenta Inés. La enfermera llevaba 10 años en un consultorio rural, con un cupo de unas 2.200 personas distribuidas por una amplia extensión geográfica. Ahora, entre los pasillos de una UCI, las cosas son muy diferentes. “El cambio es muy heavy. Muchas compañeras lo están pasando fatal porque no han colgado nunca un suero”, compara. Algunas de ellas, añade, han cogido incluso la baja por “angustia y ansiedad”, aseguran, como Laura, que tras 12 años en un ambulatorio ahora no quiere dar el salto al ámbito hospitalario: “No estoy preparada. Si me ponen en una UCI no quisiera que mi madre fuera mi paciente”, comparte. Todas las fuentes consultadas piden que no se las identifique.

Ester Giménez, presidenta de la Associació d’Infermeria Familiar i Comunitària (Aificc), combate la idea de que las enfermeras tengan que asumir todo el abanico de tareas propias de su profesión y reclama potenciar las especialidades. “¿Verdad que no ubicarían a un cardiólogo en una unidad de dermatología?”, se pregunta. “Pues con las enfermeras igual”.

¿Qué hace diferente la atención hospitalaria de la primaria? “La relación y las técnicas”, responde Inés. “Desde el consultorio haces mucha educación sanitaria y prevención; mientras que en un hospital afrontas otras situaciones y requieres otras acciones: tienes que saber poner la medicación endovenosa, preparar la medicación individual, poner sondas vesicales, nasogástricas, vías...”, comparte.

La reubicación ha llevado a los algunos equipos sanitarios a readaptar agendas, según las portavoces. Las nuevas incorporaciones requieren unos días de adaptación y algunas necesitan formación. “Se han tenido que anular visitas en estos primeros días”, señala Giménez. la presidenta del Fòrum Català d’Atenció Primària, Meritxell Sánchez-Amat, considera que la falta de experiencia en Primaria puede ser “un paso atrás”. “Se ofrecen formaciones de tres días y ha repercutido en algunas agendas”, asegura.

Según cálculos de la Aificc, unas 250 profesionales están afectadas por el cambio de plazas, aunque el Institut Català de la Salut (ICS) asegura haber solucionando hasta el 70% de los casos y aún está pendiente de resolver más. “El ICS trabaja para consolidar los profesionales donde puedan desarrollarse con toda su experiencia”, responden fuentes del órgano público.

Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Bernat Coll
Periodista centrado actualmente en la información sanitaria. Trabaja en la delegación de Catalunya, donde inició su carrera en la sección de Deportes. Colabora en las transmisiones deportivas de Catalunya Ràdio y es profesor del Máster de Periodismo Deportivo de la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_