Andrea Genovart gana el premio Llibres Anagrama con una novela generacional sobre la precariedad

La ciudad se deshace, como arenas movedizas, y arrastra consigo a una generación –aquella que ronda la treintena– abocada a hacer equilibrios constantes entre trabajos precarios y la culpa de formar parte de un primer mundo en el que los vínculos humanos son cada vez más inciertos y fantasmales. Este es el retrato que busca esbozar Consum preferent, la novela de Andrea Genovart (Barcelona, 29 años), que acaba de ganar los 12.000 euros del 8º premio Llibres Anagrama. El galardón también ha supuesto el debut literario de la autora.

“El punto fuerte de la novela pasa por describir escenas con las que nos encontramos día a día, y por mostrar cómo la narradora los asume, los piensa y procesa”, ha deslizado Genovart tras recibir el premio este lunes en Barcelona. No tiene lugar un gran suceso, algo que lo mueva todo. Lo que hay son escenas de la vida cotidiana, parcelas, con las que tiene que lidiar la protagonista y narradora de la historia, Alba. Según ha descrito su creadora, el personaje intenta hacerse la imagen de una ciudad –Barcelona– “de desorden y ruido”. El objetivo es acumular los retazos que le permitan crear su propia identidad.

Este es el gesto de una generación que “está todavía en construcción”. La precariedad laboral, la progresiva disolución de los vínculos humanos y “la insistencia de un entorno que le reclama constantemente posicionarse” son algunos de los elementos que, en síntesis, buscan exponer las contradicciones de las ciudades que habitamos. En este caso, además, la propia ciudad se convierte en antagonista. Un enemigo que despierta la mirada cínica de la narradora, que también despliega diversos registros, como pueden ser mensajes de WhatsApp, un correo electrónico o las recuperación de voces del día a día en la ciudad, elementos que construyen Consum preferent, que se publicará a finales de marzo y hacia el otoño en castellano.

Se trata de una propuesta “atrevida” al servicio de una narración “mordaz y autodestructiva”, según ha descrito el jurado, integrado por Mita Casacuberta, Guillem Gisbert, Sergi Pàmies, Jordi Puntí, Imma Monsó y las editoras Isabel Obiols y Silvia Sesé. En este sentido, Monsó ha destacado durante su intervención que “la voz fresca y lúcida” de la protagonista “va haciendo su vida de joven que aprende a soportar su propio infierno y el de los otros”, además de exponer las “farsas del lenguaje bien intencionado” en la academia o el mundo del arte. (“Esto es grotesco, pero a veces yo también me veo en la necesidad de representar la farsa”, dice la narradora en algún momento a propósito una importante exposición fotográfica).

Andrea Genovart, que trabaja como responsable de prensa y de comunicación en diversas editoriales, ha ganado el Llibres Anagrama en una edición en la que han participado 92 originales, y tras otra –la de 2022– en la que el galardón quedó desierto. El premio se ha caracterizado por apuestas de temática abierta, y por “ampliar los márgenes” de la narrativa actual, en palabras de Pàmies. La lista de galardonados en las últimas ediciones da prueba de ello. Genovart se suma así a otros ganadores como Pol Guasch (2021), Anna Ballbona (2020) o Irene Solà (2019).

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