La mano derecha de Borràs dimite como vicepresidente de Junts pero se mantiene como diputado

El vicepresidente de Junts Francesc de Dalmases, mano derecha de la presidenta del partido, Laura Borràs, ha anunciado este martes que dimite de la dirección del partido, tras el escándalo por su comportamiento con una periodista de TV3 tras una entrevista a la líder suspendida del Parlament. Los hechos se remontan a julio pasado pero los sectores cercanos a Borràs y sus críticos han vuelto a chocar después de que el pasado domingo trascendiera el informe interno que certificaba las intimidaciones a la comunicadora. De Dalmases mantendrá el acta de diputado, lo que augura más desgaste para su protectora, pues aún está pendiente que la Cámara decida si ha violado el código de conducta del Parlament.

La decisión ha sido comunicada tras una reunión extraordinaria de la Ejecutiva, sin la presencia del afectado. Varios de los asistentes consultados calificaron de “duro”, “encendido” y “tenso” el tono de las intervenciones. En la reunión se estudiaba el contenido del informe interno sobre lo sucedido en la entrevista a Borràs, en la que el diputado increpó a la subdirectora del programa FAQS por el tono crítico de algunas de las intervenciones de los tertulianos. De Dalmases y la autora del informe, la abogada Magda Oranich, habían chocado en público el pasado lunes, después de que NacióDigital adelantara el contenido. El hasta ahora vicepresidente de Junts cuestionó el informe, a su autora y pidió investigar la filtración. Oranich salió a defender su trabajo y, de paso, denunció presiones por parte de la propia Borràs durante la elaboración del texto.

Las decisiones de la Ejecutiva se han de tomar por unanimidad. Esas mismas voces dicen que la presidenta de la formación inicialmente no quería que su mano derecha renunciara pero que terminó cediendo ante las intervenciones de los sectores que defendieron que la situación era insostenible “de cara a la ciudadanía”. Él dimite para evitar más desgaste. de Borràs. Dentro de ciertos líderes cayó especialmente que se cuestionara la profesionalidad de Oranich, muy vinculada al movimiento antifranquista y en defensa de los derechos de la mujer. “Se ha ido por la vía del medio”, asegura un miembro de la cúpula. Había dirigentes que querían que directamente dejara el acta de diputado.

La presión por el escándalo ya provocó en su día que De Dalmases se apartase de su cargo como portavoz del partido en la Comisión de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales, donde también tuvo que dar explicaciones, insistiendo en que nunca coaccionó a la periodista sino que se había tratado de una discusión profesional “encendida”. Ahora la abandona completamente esa comisión, eso sí, sin dejar su acta como diputado. El resto de grupos de la Cámara ya han dejado claro que quieren que se estudie si el diputado ha violado el código de conducta interno y ello podría derivar en que se le imponga una multa. También será un foco de desgaste para Borràs.

El informe de Oranich había sido entregado tanto a la presidenta de Junts como a su número dos, Jordi Turull hace días. En el entorno de Borràs están convencidos que su publicación en medios es una maniobra para atacarles y una deslealtad, pues no se había tratado el contenido aún en la Ejecutiva. Después de que el pasado fin de semana, tras la ruptura con ERC, el partido intentara unificar unidad en su nueva travesía en la oposición, el caso De Dalmases vuelve a poner las espadas en alto. Borràs y Turull habían pactado dividirse a medias la conformación de la Ejecutiva y por tanto le correspondería a ella proponer a un sucesor o sucesora. Ese nombre, sin embargo, tendrá que ser refrendado por la militancia.

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