La Assemblea Nacional Catalana desafía a los partidos y aprueba concurrir a las elecciones
La decisión implica renunciar a la unidad del independentismo y abunda en la división
La Assemblea Nacional Catalana (ANC) va a poner sus apoyos a prueba de urnas. La entidad independentista que los últimos diez años ha influido y condicionado a los partidos soberanistas ha aprobado impulsar una lista para concurrir a las elecciones al Parlament. Es un paso al frente que trastoca la posición de supuesta neutralidad y de nudo galvanizador del independentismo que jugaba la asociación, y que le sirve para criticar recurrentemente la acción política de los partidos. La entidad acusa a las formaciones independentistas de haber “malbaratado” lo que califica de “gran hito”, en referencia a lograr el 52% de los votos en las elecciones autonómicas de 2021. La presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, ya había advertido a los partidos secesionistas que si ejercían un Govern “sin plan para hacer la independencia” la entidad dejaría de estar “a su lado”.
La nueva hoja de ruta de la ANC cuenta con la validación de un 96% de los socios que atendieron a la décima asamblea general de la entidad. La mayoría es abrumadora, pero la letra pequeña refleja que la convocatoria, que era telemática, apenas rebasó las 4.000 personas. En los momentos más álgidos de su tirón movilizador, la Assemblea presumía de superar los 100.000 afiliados.
El rumbo de la ANC empezó a quedar en entredicho a medida que quedaba más demostrada su sujeción a los partidos tradicionales. Esquerra perdió control en los puestos de mando cuando Carme Forcadell oficializó su entrada en política, y entonces fue el espectro postconvergente quien tomó posiciones. Jordi Sànchez, presidente de Junts, saltó directamente desde la cúpula de la ANC a las filas de la formación que lidera Carles Puigdemont.
La nueva hoja de ruta de la ANC, más allá de impulsar una “lista cívica” a las elecciones catalanas, apuesta por proponer una candidatura unitaria a las elecciones generales y, si no fuera posible, sugiere a sus simpatizantes optar por el voto en blanco o nulo. El documento reitera las acusaciones por “autonomistas” contra las formaciones independentistas que están al frente de la Generalitat y del Parlament.
La estrategia señala que hace falta “un organismo político” en el exterior y se apuesta por potenciar el papel del Consejo por la República, que controla Puigdemont desde Bélgica. Nada dice la ANC acerca de los vínculos que tejió el expresident con Rusia. Sobre este asunto, el pleno del Parlament tumbó ayer una moción de Cs en la que se pedía la creación de una comisión de investigación para “aclarar la verdad de los contactos entre varias formaciones políticas y el Kremlin”.
Este punto de la moción contó con el ‘sí’ de PSC, Cs, y PPC, la abstención de los comunes y Vox y el ‘no’ de todos los partidos independentistas (ERC, JxCat y CUP), por lo que no salió adelante. Otro apartado del texto hacía un llamamiento “a las formaciones políticas que han tenido contactos estrechos con el Kremlin y han recibido financiación a hacerlo público e informar a la ciudadanía”. Tampoco prosperó al recibir el rechazo de ERC, JxCat y la CUP.
La iniciativa de la ANC por promover una lista propia cumple con una vieja amenaza de la entidad hacia los partidos políticos. Hace unos tres años, la misma hoja de ruta advertía de que, si no se lograba la unidad de acción entre Junts, ERC y CUP, la ANC iba a proponer “estrategias para sobrepasarlos”. Ya hubo un intento en ese sentido. La Assembla dio apoyo a la iniciativa Primàries de Catalunya, que buscaba configurar listas independentistas municipales alternativas y que terminó con un resultado muy discreto. La ANC también se ha sumado a los llamamientos de Junts a las listas únicas, pero sin lograr eco en ERC. La idea de la lista de la ANC “sin personalismos ni intereses de partido” también se tendrá que conjugar con el cambio de cúpula en la entidad y con el relevo de Elisenda Paluzie.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.