Los gimnasios ya han perdido un 30% de los abonados precovid

Tras meses de dificultades, el sector del fitness confía en comenzar a curar sus heridas. Según estimaciones de la patronal catalana, la asociación de empresarios catalanes de clubes de fitness (ADECAF), los gimnasios han perdido de media un 30% de los socios que tenían antes de la pandemia. Pero después del verano, se ven algunos brotes verdes. “La evolución de altas en septiembre y octubre es parecida a la de años anteriores”, celebra August Tarragó, su presidente. La recuperación económica, sin embargo, se prevé complicada porque el verano es una época tradicionalmente pobre para los centros deportivos y el sector encadenó cinco meses de pérdidas desde el inicio de la epidemia. “Los meses de julio y agosto fueron un desastre”, lamenta el presidente.

En los centros deportivos municipales de Can Mercadé y Parc Esportiu Llobregat, en Cornellà de Llobregat, calculan haber llegado a perder hasta un 40% de los socios. “Pero a partir de septiembre hemos tenido nuevas altas y estamos sobre el 32% de reducción social”, asegura Salva Valls, director de las instalaciones, de unos 6.000 abonados. La nueva normalidad muestra dos conclusiones: las actividades dirigidas siguen teniendo éxito y los abonados que mantienen su cuota no son de los que se quedan en casa. “Ahora ya no hay aquellos usuarios que pagaban y no venían”, explica Valls, “y las salas de actividades se siguen llenando mayoritariamente, siempre respetando las medidas sanitarias”. Para recuperar a los usuarios, sin embargo, los responsables del centro no pueden realizar campañas de márketing: “No podemos incentivar a la población que realice actividad en el centro para cuadrar números. Si pedimos cautela y tranquilidad a los vecinos por la pandemia, debemos actuar del mismo modo”.

La vuelta paulatina de los abonados a los gimnasios desvanece los miedos del sector, que temía un rebrote. “Esto habría limitado el repunte de usuarios que ahora tenemos desde septiembre”, añade Valls. La patronal celebra la sensación de normalidad tras el regreso escolar. “Los niños vienen a los centros deportivos con normalidad. Ni ellos ni nosotros somos foco de contagio”, aplaude Tarragó.

A pesar del crecimiento de las últimas semanas, el sector sigue en peligro. “Algunas empresas plantean volver a hacer ERTE por limitación productiva”, admite Tarragó. “Y entre un 20% y un 30% de los empleos se reducirán o se perderán”. La patronal ya pone la mirada al próximo año. “Esta temporada será de recuperación lenta”, avanza el presidente, “confiamos en empezar mejor la próxima temporada, a partir de verano del 2021”.