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El Ayuntamiento de Berga aparta a una teniente de alcalde tras participar en una Patum improvisada pese a las restricciones sanitarias

Roser Rifà (CUP) apareció en un vídeo festivo donde desobedece en la calle un bando municipal

Roser Rifà y Francesc Ribera en la Patum improvisada.
Roser Rifà y Francesc Ribera en la Patum improvisada.
Marc Rovira

El Ayuntamiento de Berga ha retirado este jueves por la noche las delegaciones de tenencia de alcaldía a la Roser Rifà (CUP), hasta ahora segunda teniente de alcalde, por su participación en una Patum espontánea en la calle. Rifà apareció en un vídeo que corrió como la pólvora en las redes sociales y la oposición había pedido su dimisión por su “falta de empatía” y por mostrar una conducta “irresponsable” en el contexto actual. La regidora de la CUP lamenta los hechos y pide disculpas a los vecinos, según el comunicado del Consistorio. Berga aún está en fase 2, lo que limita el contacto social a grupos de hasta 15 personas y siempre manteniendo la distancia y las medidas de protección oportunas.

El vídeo del salt de maces ha generado no pocas críticas, que aluden a la poca idoneidad de desobedecer los mandatos de cuidado e higiene cuando el virus aún ronda descontrolado y ya se ha cobrado más de 40 muertos en Berga. En el mismo vídeo aparece Francesc Ribera, cantante del grupo musical Brams y conocido popularmente como Titot, que fue concejal de la CUP durante el mandato pasado.

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En una semana de Corpus al uso, Berga estaría en ebullición celebrando La Patum. La popular fiesta, que en 2005 fue reconocida por la UNESCO como Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad, se ha mantenido prácticamente sin interrupción desde el siglo XV pero, este año, la covid-19 obligó a aplazarla. La suspensión no ha sido óbice para que se hayan celebrado actos improvisados en plena calle, contrariando el bando emitido por el Ayuntamiento y que hacía un llamamiento a “la responsabilidad individual y colectiva” y a la necesidad de respetar las medidas de seguridad en los encuentros de carácter social que se puedan producir durante estos días.

La advertencia fue publicada el día 9 y, al día siguiente, Roser Rifà fue grabada participando en un uno de los actos organizados de manera aparentemente improvisada pero que sacó a decenas de personas a la calle.

El salt de maces es una danza ritual que simboliza la lucha entre el Bien y el Mal, representada a través de la escenificación de una batalla entre ángeles y demonios. Las mazas acostumbran a ser portadas por unos personajes vestidos de demonios y que llevan la cara cubierta con una máscara. Este año no se han organizado de manera oficial saltos en la calle pero sí han coincidido varias escenificaciones espontáneas, sin la ornamentación habitual, pero con varios grupos de personas reunidos alrededor de los bailarines. Se trata de unas concentraciones que desafían el bando publicado por el Ayuntamiento, que indica que las restricciones de la fase 2 obligan a dejar una distancia de dos metros entre personas y recuerda que “hay que hacer uso de la mascarilla en espacios abiertos o cerrados”.

Roser Rifà era la numero dos del equipo de gobierno de la CUP que lidera Montse Venturós, la alcaldesa que fue inhabilitada por negarse a retirar una estelada de la fachada de la casa consistorial. En las últimas elecciones Venturós vio refrendado su apoyo popular y se quedó a un solo concejal de la mayoría absoluta. Fue precisamente ERC quien le tendió la mano para atar un acuerdo que, a la postre, no se concretó.

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