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Los chiringuitos de las playas de Barcelona amenazan con no abrir este verano

Barcelona llama al civismo al salir con niños el domingo y recuerda que parques y playas siguen cerrados

Un agente de la Guardia de Barcelona cierra el acceso a una playa de Barcelona, el 15 de marzo.
Un agente de la Guardia de Barcelona cierra el acceso a una playa de Barcelona, el 15 de marzo.Joan Sánchez
Clara Blanchar

Los chiringuitos de las playas de Barcelona, los 15 que están sobre la arena, amenazan al Ayuntamiento con no abrir este verano. Aseguran que, sin saber todavía cuando reabrirán las playas y previendo que podrán tener menos clientes por las medidas de distanciamiento durante el desconfinamiento para evitar contagios de la covid-19, no les sale a cuenta. Como condición para abrir, los empresarios piden que se les perdonen los elevados cánones que pagaron a inicios de marzo. El Ayuntamiento asegura que se les devolverá lo que corresponda por los días que han estado cerrados y recuerda que la fecha de apertura la marcarán las autoridades sanitarias.

Mientras, y a 48 horas de que entre en vigor la autorización de que los niños salgan una hora al día de casa, el consistorio ha llamado este viernes “civismo” y el “sentido común” para que la salida de los menores se produzca sin incidentes. El teniente de alcalde de Seguridad y Prevención, Albert Batlle, ha recordado que las playas y los parques siguen cerrados. “No estamos desconfinando la ciudad. Es importante que salga bien, sin poner en riesgo el confinamiento que nos ayuda a evitar repuntes”, ha apuntado la concejal de Salud, Gemma Tarafa.

Desde los negocios de la playa, el propietario del local Barcelona Beach (en el Bogatell), y vicepresidente de la Asociación de Chiringuitos de Barcelona, Josep Carbonell, asegura que “esta temporada será ruinosa”, dice sobre un conflicto revelado por El Periódico. Los cánones, que los locales pagan a Parcs i Jardins, oscilan entre 100.000 y 500.000 euros al año y se pagan antes de abrir, a comienzos de marzo, explica. “Desde entonces el Ayuntamiento tiene tres o cuatro millones de euros nuestros”, lamenta y recuerda que un par de chiringuitos llegaron a abrir antes del cierre de las playas el día 14 de marzo. En total, los 15 locales emplean a 600 personas, mantiene. Es una media de 40 por local, porque abren todos los días 16 horas (de 10 de la mañana a 2 de la madrugada).

“La propuesta al Ayuntamiento es que nos devuelvan el dinero a cambio de abrir y no ganar nada, pero por lo menos que las playas tengan chiringuitos y lavabos, porque nos obligan a dar el servicio”, dice. “Si no, nos acogeremos a la cláusula que por razones excepcionales tenemos derecho a renunciar y a la devolución del canon”.

Batlle y la concejal de Hacienda, Montserrat Ballarón, han asegurado que el consistorio mantiene “un diálogo permanente con este sector”. “A los que han abonado el canon entero se les devolverá los días que no han podido abrir, el resto se decidirá en función de cómo evolucione la temporada y las playas puedan volver a la normalidad”, han explicado.

En vistas al domingo, cuando los niños podrán salir a la calle por primera vez en más de seis semanas, Batlle ha llamado a “evitar concentraciones que pongan en peligro las distancias. Disfrutemos del domingo en estas condiciones de seguridad, Barcelona ha dado una imagen de civismo que estamos seguros de que se mantendrá”, ha señalado Batlle. El concejal ha recordado que se recomienda el uso de mascarillas a partir de los tres años, lavarse las manos antes y salir de casa, o que hay que mantener la distancia interpersonal entre uno y dos metros.

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Tarafa ha pedido “prudencia y responsabilidad” y también ha apelado “a la corresponsabilidad de todos, como hemos hecho en las últimas seis semanas”. “No nos estamos desconfinando como ciudad, estamos dando un respiro a nuestros niños para el equilibrio de su salud física y mental después de tantas semanas de esfuerzo”.

La edil ha hecho balance del despliegue de servicios y políticas sociales extraordinarias durante la crisis de la covid-19: “Los sistemas de cuidado son los que nos han aguantado como ciudad y como sociedad”. Entre otras cifras, ha enumerado las 714 plazas para personas sin techo habilitadas; el incremento de un 146% de comidas repartidas (9.400 en total cada día), o los 1,8 millones de euros extraordinarios en ayudas sociales.

Tarafa, además, ha pedido “cambios estructurales profundos a corto, medio y largo plazo” y en este sentido ha citado la implantación de una renta mínima, prolongar la moratoria de desahucios y “regularizar a las personas migradas en situación irregular, que viven una doble vulnerabilidad, porque no acuden a los servicios sociales”.

Sobre cuáles serán las condiciones de desconfinamiento en la ciudad, Batlle y Tarafa han recordado que la ciudad tiene redactados 40 planes de confinamiento para los servicios y espacios de la ciudad a la espera de finalizarlos y concretarlos cuando el gobierno fije calendarios y condiciones.

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Sobre la firma

Clara Blanchar
Centrada en la información sobre Barcelona, la política municipal, la ciudad y sus conflictos son su materia prima. Especializada en temas de urbanismo, movilidad, movimientos sociales y vivienda, ha trabajado en las secciones de economía, política y deportes. Es licenciada por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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