El Supremo cita como testigo a Juan Lobato por la filtración de los correos del novio de Ayuso

El magistrado de la Sala de lo Penal Ángel Hurtado, instructor de la causa abierta al fiscal general del Estado y la fiscal jefe provincial de Madrid, ha dictado una providencia en la que acuerda la citación como testigo del secretario general del PSOE de Madrid, Juan Lobato, para el próximo viernes 29 de noviembre a las 10 de la mañana. El instructor explica que acuerda esta citación a la vista de una información publicada hoy en ABC en la que se asegura que el líder de los socialistas madrileños depositó en una notaría mensajes con otros miembros del PSOE sobre la supuesta filtración de los correos intercambiados entre la Fiscalía y el abogado de Alberto González Amador, imputado por dos delitos fiscales. En la providencia, el magistrado indica que Lobato deberá aportar copia del acta de manifestaciones notariales que, “al parecer”, realizó en relación con los hechos. En otra resolución notificada este lunes, el Supremo rechaza suspender cautelarmente de su cargo al fiscal general del Estado y a la jefa provincial de Madrid, en contra de lo solicitado por dos de las acusaciones.

La citación del líder de los socialistas madrileños se produce después de que el diario ABC haya publicado este lunes una información bajo el siguiente titular: “Moncloa filtró el documento secreto del novio de Ayuso y trató de implicar a Lobato”. El texto sostiene que la Presidencia del Gobierno “está tras la filtración de la información confidencial” de González Amador que investiga el Supremo y por la que está imputado el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz. La información se basa en una conversación de WhatsApp mantenida el pasado 14 de marzo entre Lobato y Pilar Sánchez Acera, que en ese momento era la jefa de Gabinete de Óscar López, entonces director de Gabinete de Pedro Sánchez y, actualmente, ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública.

La mañana en la que se produjo esa conversación, varios medios, entre ellos EL PAÍS, habían publicado que el abogado de González Amador había enviado un correo electrónico a la Fiscalía unas semanas antes en el que ofrecía un pacto que implicaba que su cliente admitiera la comisión de dos delitos fiscales a cambio de que no se le obligara a entrar en prisión. Ese correo desmentía una información falsa que estaba difundiendo desde horas antes el entorno de la presidenta madrileña, según la cual, era el ministerio público el que había ofrecido un acuerdo a la pareja de Díaz Ayuso, aunque luego, supuestamente, había retirado ese ofrecimiento “por órdenes de arriba”, en referencia al fiscal general. Las primeras informaciones publicadas entre la noche del 13 de marzo y la mañana del 14 hacían referencia al mail enviado por la defensa de González Amador a la Fiscalía, pero no reproducían íntegramente su contenido.

En ese contexto se produjo, a las 8.00 de la mañana del 14 de marzo, la conversación entre Sánchez Acera y Lobato, en la que la primera, supuestamente, trata de conseguir que el portavoz del PSOE en la Asamblea de Madrid esgrima en el pleno que se celebraba ese día el correo enviado por el abogado de la pareja de Ayuso. Ante la negativa de Lobato, Sánchez Acera le dijo que se lo iba a pasar a Ángelica Rubio, que entonces dirigía elplural.com y acaba de ser nombrada miembro del consejo de administración de RTVE. Una hora después, ese diario digital reprodujo el correo electrónico con el siguiente titular: “Esta es la carta del abogado del novio de Ayuso pidiendo un acuerdo a la Fiscalía. Alberto González reconoce dos delitos fiscales y uno de falsedad documental, pero la presidenta lo niega y acusa a Moncloa”.

Lobato, según la información de ABC, decidió dejar constancia ante un notario de los mensajes intercambiados con la jefa de Gabinete de Óscar López después de que se conociera que la justicia estaba investigando la filtración del correo electrónico. Contactado por ABC antes de publicar la información, Lobato dio la siguiente explicación por escrito: “Acudí al notario cuando se abrió el proceso judicial sobre los emails del novio de la Sra. Ayuso. Quería dejar registrado que de acuerdo con las pruebas que yo tengo, se acredita, en relación con el procedimiento de la Fiscalía General, que ni a mí ni a Pilar Sánchez Acera nos llega ninguna información por parte de la Fiscalía, sino que esa información ya la tenían los medios de comunicación. En época de bulos es útil dejar acreditada la realidad de los hechos. En todo caso llevaré a cabo las actuaciones que proceda ante la notaría”.

En otra providencia notificada este lunes, el magistrado Hurtado rechaza acordar la suspensión cautelar de Álvaro García Ortiz como fiscal general del Estado y de Pilar Rodríguez como fiscal jefe provincial de Madrid, suspensión que habían solicitado Manos Limpias y la Asociación Profesional e Independiente de Fiscales (APIF). “Cuando nos movemos en el ámbito de cualquier medida cautelar personal es conveniente valorar criterios de proporcionalidad y tener presente que, en modo alguno, su adopción ha de operar como un anticipo de la pena que, en su caso, pueda resultar, concluido el proceso, sino que ha de adoptarse en atención a su propia finalidad, nunca como anticipación de una condena”, señala el juez.

Hurtado recuerda que el fiscal general ha firmado dos decretos —fechados el 1 de abril y el 30 de octubre— en los que, para preservar la imagen de independencia, acuerda quedarse al margen de la actuación del ministerio público en la causa por la que él está imputado. “Ese compromiso de abstención que viene de la Fiscalía, como institución me inclinan a no acceder a la suspensión”, concluye el instructor.