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Los Tedax intervienen en varios institutos de León para retirar ácido pícrico, un explosivo usado hace un siglo para cargar granadas

El peligroso material químico no tenía uso en los laboratorios de química y biología debido a su antigüedad

Los TEDAX de la Guardia Civil con el ácido pírico retirado de varios institutos de la provincia de León.
Los TEDAX de la Guardia Civil con el ácido pírico retirado de varios institutos de la provincia de León.Guardia Civil de León
Juan Navarro

Probetas, matraces, componentes químicos sin especial peligrosidad y, en las estanterías, la carga con la que hace más de un siglo se rellenaban los proyectiles y granadas sin que nadie les hubiese prestado especial atención en los últimos tiempos. El ácido pícrico, conocido también como trinitrofenol y picrinita, es un explosivo con capacidad rompedora que se fue dejando de utilizar en la industria armamentística con la irrupción del trinitrotolueno (TNT). Este desuso propició que acabara desde hace décadas en laboratorios de institutos de la provincia de León, donde tampoco se utilizaba pero suponía un riesgo para los alumnos o ante potenciales robos. El equipo de Técnicos especialistas en desactivación de artefactos explosivos (Tedax) de la Guardia Civil ha retirado y destruido estos componentes tras recibir el aviso de que seguían disponibles en centros escolares por donde han pasado miles de alumnos leoneses.

La propro ha remitido un comunicado de prensa en el que ha informado de la retirada de este ácido pícrico hallado en varios institutos de educación secundaria de la provincia. El explosivo, de fórmula química C6H2OH(NO2)3 tiene características rompedoras y de carga aumentadora que se utilizó como carga principal de “proyectiles y granadas a finales del siglo XIX y principios del XX” hasta la irrupción del TNT, con más capacidades. El ácido se ubicaba en “laboratorios de química y biología de varios centros docentes” y en los últimos años no se le daba uso ninguno, también teniendo en cuenta la antigüedad del componente peligroso.

Los agentes de la Guardia Civil con capacitación para manejar y destruir esta clase de explosivos suelen intervenir con asiduidad cuando en obras, casas viejas o terrenos poco frecuentados aparecen minas o armamento de la Guerra Civil, de ahí el aviso a la población de que en cuanto los detecten avisen a las autoridades competentes para que acudan y eliminen ese potencial peligro.

“La Guardia Civil recomienda que, ante el hallazgo de cualquier tipo de material o artefacto explosivo, nunca se toque ni se manipule debido al peligro que conlleva una posible activación fortuita, por lo que se aconseja su señalización y pasar aviso de forma inmediata llamando al teléfono de Seguridad Ciudadana 062″, ha señalado la Guardia Civil, cuyos especialistas en la unidad Tedax asumieron todas las precauciones posibles para retirar el ácido pícrico, o trinitrofenol o picrinita, de las proximidades de los institutos leoneses.

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Sobre la firma

Juan Navarro
Colaborador de EL PAÍS en Castilla y León, Asturias y Cantabria desde 2019. Aprendió en esRadio, La Moncloa, buscándose la vida y pisando calle. Grado en Periodismo en la Universidad de Valladolid, máster en Periodismo Multimedia de la Universidad Complutense de Madrid y Máster de Periodismo EL PAÍS. Autor de 'Los rescoldos de la Culebra'.
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