El PP busca una imagen de respaldo a Mazón en medio de la incertidumbre: “Como no aclare lo de la comida, fatal”

“Puede que Feijóo esté cabreado con Mazón, pero no es de los que van dejando a la gente tirada como una colilla”, reflexiona un presidente autonómico del PP sobre la decisión del líder popular de reunir este viernes a todos los barones del PP con el president valenciano, que se encuentra en plena tormenta política por su gestión de la catástrofe de la dana. En realidad, el partido ha dejado hasta ahora solo a Mazón con la crisis, desde hace más de una semana, marcando distancias con su gestión, que no ha respaldado de forma expresa. “Corresponde a Mazón dar explicaciones de su agenda”, llegó a decir este jueves el portavoz parlamentario del PP, Miguel Tellado, preguntado por la ausencia del president hasta las siete de la tarde en la reunión de coordinación de emergencias el fatídico martes 29 de octubre en el que se desató el temporal que ha dejado más de doscientos muertos. La cita de este viernes de Feijóo con todos los presidentes, que se ha celebrado por videoconferencia, supone el primer respaldo colectivo del PP al barón popular en el centro de la polémica, aunque en el partido algunos ya dan por hecho que su futuro político está sentenciado.

“Como no aclare lo de la comida, fatal”, juzga un barón popular sobre el almuerzo de Mazón el día de la tragedia, que EL PAÍS ha publicado que se alargó hasta las seis de la tarde en un conocido restaurante del centro de Valencia, sin que el equipo del president haya confirmado con qué comensales. “Esas cosas más simbólicas y truculentas, mediáticamente son letales”, estima este líder territorial del PP.

“Todos pensamos que Mazón tendría que haber dicho: con esto no puedo solo; pero también habríamos esperado que Sánchez hubiera dado un paso adelante”, razona otro presidente del PP sobre los momentos posteriores a la catástrofe. Aunque el principal problema político para el Gobierno valenciano está, sobre todo, en los momentos anteriores, por la tardanza en enviar la alerta a la población, que no se difundió hasta las ocho de la tarde cuando a las 7.37 de la mañana la Agencia Estatal de Metereología ya había lanzado el aviso rojo por la tormenta en la provincia de Valencia. Hasta ahora, nadie en el PP ha salido a respaldar la actuación del Gobierno valenciano en esas doce horas críticas, en un sonoro y elocuente silencio tanto de la dirección como de los barones populares. Incluso Isabel Díaz Ayuso, que nunca rehúye ningún asunto, ha evitado pronunciarse sobre la gestión de la dana. “No voy a hacer declaraciones. No puedo. Lo lamento. Solo quiero lo mejor para el pueblo de Valencia”, se excusó la líder madrileña.

Feijóo, que en un primer momento sí viajó a Valencia para apoyar a Mazón y trató allí de responsabilizar al Gobierno de Pedro Sánchez de la tragedia, pasó pronto a poner distancia en una “separación forzosa” del barón valenciano. Dirigentes del PP interpretan que el líder del PP sabe que lo sucedido en Valencia es un “agujero” político al que no quiere verse arrastrado. Feijóo no ha tenido reparos en defender, en contra del criterio de Mazón, que se declare la emergencia de interés nacional que le daría el mando al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en vez de a la Generalitat que es quien la ostenta desde el comienzo de la crisis.

En la videconferencia con Mazón y los barones populares, el líder del PP ha destacado la “solidaridad ejemplar” de las comunidades populares con la tragedia de Valencia. “Nadie la ha tenido que solicitar”, ha remarcado Feijóo, tras subrayar que la Generalitat se está volcando en la mayor catástrofe nacional que se recuerda, según un breve comunicado del PP. Feijóo ha recordado, además, según informa el PP, que el Gobierno no quiso decretar la emergencia nacional. “Han dimitido de sus responsabilidades”, se ha quejado tras subrayar que los organismos que informaron a la Generalitat dependen del Gobierno, como son la Confederación Hidrográfica del Júcar y la AEMET. El breve comunicado del PP no dice nada sobre la gestión de Mazón, tampoco para respaldarla.

El PP ha representado este viernes con la reunión un cierre de filas con el presidente valenciano, pero en privado el partido es un hervidero de conversaciones sobre su futuro político, que algunos ven ya muy tocado. Fuentes conocedoras de la tesis del núcleo duro de Feijóo sostienen que el líder del PP no tratará de forzar la salida de Mazón en el corto plazo, pero no pueden asegurarlo a medio y largo. Aunque a Mazón, que está gobernando, el PP no puede obligarle a dimitir, el partido sí podría sumirse en una guerra interna. Algunos dirigentes populares consideran que el president valenciano debería remodelar a todo su Gobierno en cuanto pase lo peor de la emergencia y dejar en el aire que vaya a presentarse a las siguientes elecciones, mientras apuntan a la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, como la única que sale “sin mácula” de esta crisis.