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Mazón y López Miras acuden a la Moncloa con el objetivo de exigir una reforma de la financiación

Sánchez recibe a los presidentes de las comunidades peor financiadas, entre ellos, el de Castilla-La Mancha. García Page se ha desmarcado sistemáticamente de sus acuerdos con los independentistas

El presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, durante un encuentro el martes en la UCAM.
El presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, durante un encuentro el martes en la UCAM.Marcial Guillén (EFE)

Pedro Sánchez se enfrenta este viernes a la tercera jornada de reuniones con presidentes autonómicos en La Moncloa. Y la más incómoda, a priori, hasta la fecha, tanto para Génova como para el jefe del Ejecutivo. En un mismo día, Sánchez se verá con tres de los cuatro presidentes de las comunidades más infrafinanciadas de España: Región de Murcia, Comunitat Valenciana y Castilla-La Mancha. Los barones del PP Fernando López Miras y Carlos Mazón no se cierran a una futura quita de la deuda pública, pero exigirán primero la reforma del sistema de financiación autonómica en una mesa multilateral. Mientras, Emiliano García-Page, uno de los dirigentes socialistas más beligerantes con los acuerdos con los independentistas, acude a la cita firme en su oposición a la financiación singular para Cataluña pactada entre PSC y ERC. Los tres coincidirán además en otros asuntos centrales como el agua y la mejora de las infraestructuras.

La ronda de barones tendrá lugar en Madrid mientras el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, interviene este viernes en el foro de A Toxa, en Galicia. Pero la dirección nacional del PP tendrá a buen seguro un ojo puesto —o más bien los dos bien abiertos—, en La Moncloa, donde prácticamente a la misma hora a la que interviene Feijóo se estarán viendo las caras Sánchez y Mazón. El presidente valenciano no está dispuesto a renunciar a una condonación de la deuda que se conceda a otras regiones, como así se prometió el año pasado a Cataluña y cuya quita se ofreció después también al resto de territorios. De todos modos, Mazón tendrá que hacer equilibrios para no entrar en materia y evitar soliviantar al jefe de los populares, pues Feijóo ha vetado cualquier negociación bilateral en materia de financiación.

Será López Miras quien arranque la jornada de encuentros con Sánchez. El presidente de la Región de Murcia, la más infrafinanciada de España, tampoco se cierra a la condonación de deuda, pero una vez se haya acometido la reforma del sistema de financiación autonómica, caducado desde 2014. Porque tanto Mazón como López Miras consideran como un “parche” cualquier quita que no vaya aparejada primero de una actualización del modelo. Los barones del PP ya han amenazado con hacer valer la potestad que les otorga el reglamento de la Conferencia de Presidentes, en su artículo 5, para incorporar dicho asunto al orden del día del futuro foro, que se celebrará en diciembre, y que Sánchez pretendía se centrase solo en vivienda. La comisión preparatoria de la Conferencia arrancará el próximo 28 de este mes y los barones del PP, que alcanzan el requisito mínimo de 10 presidentes autonómicos establecido en la normativa, pueden forzar que se incorporen cuestiones en la agenda no previstas por La Moncloa. Fuentes del gabinete de López Miras avanzan que así se lo harán saber a Sánchez.

El tercer y último turno de la ronda de mañana corresponde a García-Page. Sánchez y el presidente de Castilla-La Mancha no coinciden en una reunión en La Moncloa desde 2018 y después de un gran distanciamiento político entre ambos. Fuentes de la Junta explican que la legislatura pasada fue excepcional y que en todo caso hubo muchas reuniones a través de las conferencias de presidentes en las que se abordaron los asuntos que interesaban al barón del PSOE, además de haber coincidido recientemente en otros encuentros institucionales. El entorno de García-Page pone en valor que Sánchez recibe a los presidentes autonómicos en La Moncloa, a diferencia de lo que le sucedió al presidente castellanomanchego con Mariano Rajoy, informa José Marcos. El dirigente socialista encara la reunión como un “apóstol del diálogo”, pero contrario a la financiación singular para Cataluña. “Inventarse un régimen especial es un privilegio. Me da lo mismo que quieran llegar al objetivo del privilegio por trozos, que de golpe, no va a ser posible”, expresó a los medios este jueves horas antes de entrevistarse con el presidente del Gobierno y secretario general de su partido.

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