Sánchez acusa al Gobierno de Rajoy de provocar “con su impericia e irresponsabilidad” la crisis del ‘procés’

En un momento en el que el PSOE intenta volver a atraer a Junts para sacar adelante la ley de amnistía —el partido independentista la ha frenado temporalmente en el Congreso con su exigencia de mayores cesiones—, este sábado, Pedro Sánchez ha responsabilizado directa y exclusivamente al Gobierno del popular Mariano Rajoy, su antecesor en La Moncloa, del desafío ilegal secesionista que culminó en 2017 en Cataluña. Sin hacer ninguna mención a la responsabilidad que en aquellos hechos tuvieron la Generalitat, Junts y ERC, el presidente del Gobierno ha aludido así al procés: “Heredamos una crisis territorial, la más grave de los últimos 45 años de la historia de nuestra democracia. No la provocamos nosotros, no gobernábamos nosotros. Fue provocada por la impericia y la irresponsabilidad de quien gobernaba en Madrid entonces”. Sánchez, que participaba en un mitin en Ourense con el candidato socialista a las elecciones gallegas del 18-F, José Ramón Gómez Besteiro, ya reivindicó el jueves en Bruselas que “el independentismo catalán no es terrorismo”, aunque entonces sí deslizó que los partidos secesionistas “también” cometieron “errores” durante el procés.

“Hay gente que puede pensar que el tiempo lo cura todo. No es cierto. De 2011 a 2017 las cosas no fueron a mejor, fueron a peor con una declaración unilateral de independencia en el Parlament de Cataluña y con la intervención, gracias también al apoyo del PSOE al artículo 155, de la autonomía catalana. En cambio, desde que llegamos nosotros, Cataluña está mejor que en 2017, ¿sí o no?”, ha resaltado el líder socialista, dentro de su política de distensión con Junts. El PSOE lleva desde el martes —cuando no logró sacar adelante la ley de amnistía en el pleno del Congreso porque Junts la consideró insuficiente— tratando de reconducir la relación con el partido de Carles Puigdemont, cuidando al detalle cada una de las palabras que dedica a su socio más volátil e impredecible. Sánchez ya dejó claro el jueves, en su primera rueda de prensa tras la derrota parlamentaria de una ley de la que depende la legislatura, que no está por la labor de aceptar las últimas exigencias de Junts y considera la redacción de la amnistía “valiente, reparadora y constitucional”. Pero, a la vez, calificó globalmente al “independentismo” como una ideología no violenta, algo que Junts y ERC siempre han reivindicado. “El independentismo catalán no es terrorismo. Todos los independentistas catalanes van a ser amnistiados porque no son terroristas”, aseveró, en un gesto que sorprendió incluso a algunos dirigentes del PSOE.

“El tiempo no arregla las cosas, lo que las arregla es la buena política, la del reencuentro y no la confrontación territorial. La normalización de Cataluña no vendrá de la noche a la mañana. Pero mi convicción de normalizar la situación en Cataluña es total porque eso es bueno para Cataluña y para España”, ha enfatizado Sánchez en su primer mitin de campaña en Galicia, donde mantendrá actos en las cuatro provincias. A falta de cerrar su agenda, el presidente participará el próximo sábado en el acto central de la campaña socialista en Vigo, la mayor ciudad de Galicia y donde gobierna con mayoría absoluta el incombustible Abel Caballero. Para el cierre de campaña se espera su presencia en Santiago.

Sánchez se reservará así para las dos provincias atlánticas que concentran la mayor parte de población de la comunidad. La meta es movilizar al electorado progresista urbano que sí participa en las municipales —el PP solo gobierna una de las siete grandes ciudades (Ferrol)— y en las generales, pero que suele quedarse en casa en las autonómicas, en las que los socialistas obtienen la mitad de votos que cuando hay que votar los representantes al Congreso. El desembarco de referentes del PSOE en la campaña incluirá al expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, a varios ministros socialistas y al primer secretario general del PSC, Salvador Illa.

Como ya hizo en el arranque de la campaña, el candidato socialista, Gómez Besteiro, ha apelado a la movilización de electorado femenino para desbancar al PP de la Xunta de Galicia, donde los populares gobiernan de forma ininterrumpida desde 2009. “La fuerza de las mujeres va a ser decisiva el 18 de febrero y va a impulsar el cambio en Galicia”, ha vaticinado. Sánchez también se ha dirigido a las votantes con énfasis. El voto femenino fue una de las claves del resultado de las elecciones generales del 23-J, en las que el PSOE logró un millón más de votos respecto a 2019. “Si todas y todos votamos, toda Galicia gana. Por eso hay que votar cambio y por eso les digo a los gallegos, y en especial a las gallegas, que papeletas para el cambio hay muchas, pero papeleta para liderar ese cambio solo hay una, la del PSOE”, ha dicho el presidente.

“El PP no da la cara”

El PSOE ha encontrado un nuevo motivo para criticar al PP: la negativa de su candidato y presidente autonómico, Alfonso Rueda, de acudir a debates con el resto de aspirantes. “Es el candidato ausente, no quiere ir a los debates, no quiere dar la cara. ¡Y hay que darla! Pero a Rueda le vamos a quitar la careta”, ha afirmado Besteiro. El presidente gallego envió el viernes a su portavoz parlamentario y número seis de la candidatura de Pontevedra, Alberto Pazos, para enfrentarse a Ana Pontón, aspirante del BNG, y Besteiro. “He visto que no acudió al debate de la Cadena SER [y EL PAÍS] y tampoco irá al de RTVE. A mí esto me suena y sabemos cómo acabó: con un presidente socialista y un Gobierno progresista”, ha apostillado Pedro Sánchez, haciendo referencia a la campaña de las generales de 2023. “Esta tierra necesita líderes que den la cara, que respeten al ciudadano que está convocado a las urnas y el PP no lo está haciendo”, ha remarcado en un acto que ha congregado a un millar de militantes y simpatizantes.

Besteiro, que interviene en sus mítines en gallego como el resto de dirigentes regionales del PSOE, ha reprochado además al PP que votara en contra del uso de las lenguas cooficiales en el Congreso, donde el cabeza de cartel socialista fue el primer gallego que intervino en la lengua de Castelao. “Habrá quien piense que no es fácil el cambio. Nunca lo fue para los socialistas. Muchas veces hemos dado saltos de fe, como cuando entramos en Europa con Felipe González; como cuando ampliamos los derechos sociales con Zapatero y ahora con Pedro Sánchez, el mejor presidente del Gobierno en la historia de la democracia”, ha sentenciado Besteiro, sugiriendo así que el PSOE está cómodo con la campaña en clave nacional que también ha buscado Alberto Núñez Feijóo. Pese al ruido y la incertidumbre que rodea a la ley de amnistía.