Sumar propone a Marta Lois como candidata a la Xunta de Galicia

Sumar ya tiene un nombre para encabezar su candidatura a las elecciones gallegas del 18 de febrero. La dirección propondrá este miércoles a su portavoz en el Congreso de los Diputados, la gallega Marta Lois, como cabeza de cartel de sus primeros comicios autonómicos, según han confirmado dos fuentes cercanas al proceso. Su designación se elevará a la promotora de Sumar Galicia en una reunión que se celebrará a las cinco de la tarde y, hora y media más tarde, se anunciará oficialmente en un acto en Santiago que presidirá Yolanda Díaz.

Lois (Vigo, 1969) es una persona de la máxima confianza de la vicepresidenta, y hasta las elecciones del pasado 23-J, una completa desconocida para la política nacional. Sin embargo, esta profesora universitaria de ciencias políticas, que figura como presidenta de Movimiento Sumar, ya ejerció como concejala de Igualdad, Desarrollo Económico y Turismo en el Ayuntamiento de Santiago con el grupo Compostela Aberta, la marea municipalista que lideró la ciudad entre 2015 y 2019 con Martiño Noriega al frente. En los últimos cinco meses, como portavoz en la Cámara baja, se ha caracterizado por su discreción y un perfil poco dado a meterse en charcos.

La titular de Trabajo, que llevaba buscando candidato desde el verano y tenía preferencia por una mujer, se juega mucho en estos comicios, donde estrena su proyecto en unas autonómicas. Lo hace, además, en su tierra natal y en una situación compleja para las fuerzas aliadas, que en 2020 se quedaron fuera del Parlamento de Galicia tras haberse convertido cuatro años antes en primera fuerza de la oposición. Después de que Anova cerrara la puerta a una candidatura con Sumar, las opciones de la vicepresidenta se habían estrechado. La elección de Lois, si decide renunciar al escaño, abre la puerta a cambios en la organización del grupo parlamentario, donde el puesto que ocupaba es de vital importancia y define, en buena medida, el carácter del proyecto.

Los comicios gallegos servirán como primer examen del año para Sumar, pero también para Podemos, antes de las elecciones en Euskadi y las europeas. Con una alianza entre la plataforma de Díaz y la formación de Ione Belarra prácticamente descartada, el partido tiene más complicado el volver a lograr representación. La organización ha lanzado este martes una consulta exprés para elegir al aspirante a la presidencia de la Xunta. Según el calendario, todos los interesados en presentarse a las primarias debían enviar a lo largo del día su candidatura, que tendrá que ser avalada este miércoles por el Consejo Ciudadano Autonómico antes de que el jueves y viernes se produzcan las votaciones. Los resultados se conocerán el sábado.

Primarias en la organización de Belarra

Mientras, en sus horas más bajas después del varapalo en las autonómicas y municipales del 28 de mayo, Podemos ha arrancado también este martes los procesos para renovar ocho ejecutivas autonómicas del partido. En la mitad de ellas, algunos candidatos, todos perfiles del núcleo duro de la dirección o afines, han anunciado ya formalmente o deslizado su intención de postularse para dirigir el partido en su comunidad, un movimiento que, si prospera, permitiría a la cúpula nacional mantener el control en los territorios. Se trata de los portavoces Isa Serra (Madrid), Javier Sánchez Serna (Murcia) y María Teresa Pérez (Comunidad Valenciana), además de la dirigente de Podem en Cataluña, Conchi Abellán. La formación, que esta legislatura está fuera del Gobierno y hace tres semanas rompió con Sumar al pasarse sus cinco diputados al Grupo Mixto del Congreso, afronta un inicio de año complejo, con el reto de fortalecer una estructura territorial sumamente debilitada tras la debacle en las urnas, el ERE puesto en marcha y la dimisión de algunas voces críticas con la estrategia de oposición a la plataforma de Yolanda Díaz. En paralelo, la dirección lanza las primarias para las europeas del 9 de junio, en las que ya ha anunciado la candidatura de Irene Montero.

Podemos tiene en este momento ocho direcciones pendientes de renovación, ya sea porque tocaba por estatutos o porque sus dirigentes han renunciado en los últimos meses. Se trata de Asturias, Aragón, Cataluña, Baleares, Canarias, Región de Murcia, Comunidad Valenciana y Madrid. Tres de ellas fuera de los parlamentos autonómicos desde el 28-M y cinco lastradas por las dimisiones de sus coordinadores.

Es, por ejemplo, el caso de Asturias, donde en septiembre pasado, después de meses de baja, la exdiputada Sofía Castañón anunció su renuncia definitiva a todos los cargos del partido. Este mismo fin de semana se conocía que Podemos ha expulsado a su única parlamentaria autonómica, Covadonga Tomé, después de que fuera expedientada al considerar que su actuación perjudicaba la imagen del partido. La diputada había sido muy crítica con la dirección central y regional de la formación y llegó a encerrarse en la sede durante días antes de la campaña de mayo para reclamar que no fuera excluido de la lista uno de sus integrantes, que había sido suspendido de militancia. La crisis en el Principado se remonta a diciembre de 2021, cuando la ejecutiva de Castañón (afín a Belarra) ganó por primera vez las primarias entre acusaciones de fraude y el partido se dividió en dos. En las últimas autonómicas, Podemos perdió tres de los cuatro diputados conseguidos en 2019, mientras que la candidatura de IU y Más País subió de dos a tres y entró en el Gobierno.

Todavía en estado de shock por los malos resultados, las coordinadoras de Aragón (Maru Díaz), Baleares (Antònia Jover) y Comunidad Valenciana (Pilar Lima) anunciaron sus dimisiones tras el 28-M. En los tres casos Podemos pasó de formar parte del Ejecutivo autonómico a ser oposición o incluso quedar en situación extraparlamentaria, como es el caso de Valencia. En esta comunidad se ha postulado ya la coportavoz del partido, María Teresa Pérez, que en la pasada legislatura ejerció como directora del Injuve.

En Canarias y Madrid el partido también perdió toda su representación en las últimas autonómicas. Especialmente simbólico es el caso de Madrid, región que vio nacer al partido hace ya casi 10 años. Isa Serra, en 2019 candidata a la Presidencia de la comunidad y en los últimos años asesora junto a Montero en el Ministerio de Igualdad, se ha propuesto como aspirante tras la dimisión, este mismo mes, de Jesús Santos. El teniente de alcalde de Alcorcón, próximo a Díaz, se marchó dando un sonoro portazo. “El choque con Sumar es incomprensible (...) Mis diferencias políticas con el núcleo dirigente de Podemos son hoy enormes”, aseguró en una carta publicada el mismo día que el partido de Belarra rompía con la coalición de la vicepresidenta en el Congreso. A la salida de Santos se suma la de los últimos candidatos a la comunidad y el Ayuntamiento de la capital, Alejandra Jacinto y Roberto Sotomayor. Con un partido roto y sin escaños, si sale elegida, el reto de Serra es, por tanto, enorme.