El PSOE de Castilla y León coloca ilegalmente una cámara en las Cortes enfocando a García-Gallardo

La tensión y las broncas frecuentes en las Cortes de Castilla y León entre el vicepresidente, Juan García-Gallardo (Vox), y la oposición han ido a más en la sesión parlamentaria de esta semana. El grupo socialista ha reconocido que el martes por la tarde colocó una cámara en la tribuna de invitados enfocando a Gallardo para intentar grabar los gestos obscenos que la oposición denunció en el Pleno anterior. El reglamento de las Cortes prohíbe fotografiar o grabar el hemiciclo, aunque sí está permitida la grabación de imágenes por el sistema audiovisual instalado oficialmente en el Parlamento. La cámara fue localizada por personal de la institución que, tras consultar con el letrado mayor, dio la vuelta al aparato para impedir que tomara imágenes. Poco después, la retiraron trabajadores del PSOE. El partido reconoce los hechos y recuerda que hace dos semanas Gallardo, según denunciaron, gesticuló imitando una felación mirando a dos procuradoras socialistas. El líder regional de Vox, que ha participado y coreado consignas ultras en las algaradas ultras en Madrid ante la sede socialista, argumentó que, en realidad, con sus gestos reproducía la acción de “lloriqueo”.

El aparato estaba situado en una tribuna donde suele instalarse público y enfocaba a la zona donde se sienta García-Gallardo, quien en este pleno no tenía al lado a su socio y presidente regional, Alfonso Fernández Mañueco (PP), ausente por coronavirus. La prohibición de grabar o fotografiar lo que ocurre en el interior del salón de plenos, incluso desde las cabinas de prensa que la rodean, se tomó hace varias legislaturas para proteger la privacidad de los parlamentarios durante las sesiones. Solo los reporteros gráficos autorizados pueden tomar imágenes de los Plenos.

La instalación de esta cámara subrepticia se ha hecho dos semanas por las supuestas ofensas de Gallardo a dos socialistas, quienes afirmaron haber visto cómo el vicepresidente ultra hacía gestos que se correspondían con una “felación”, como denunciaron. El vicepresidente negó los hechos y afirmó que simulaba gestos de lloros, algo habitual también en su discurso cuando responde a las críticas de la oposición. Las Cortes cuentan con dos cámaras centrales y dos laterales, pero no dejaron constancia de esa supuesta acción degradante.

El dispositivo se encontraba sobre un trípode y allí pasó varias horas hasta que el equipo de comunicación del presidente de la institución, Carlos Pollán (Vox), le dio la vuelta pero dejándolo en el mismo sitio. La decisión se tomó tras consultar con el letrado mayor de las Cortes, quien confirmó la prohibición de grabar desde esos espacios. Finalmente, a última hora de la tarde, una persona relacionada con el PSOE retiró de la tribuna el dispositivo y el trípode. Los socialistas han confirmado en la mañana de este jueves, ya sin cámara, que ellos colocaron allí el equipo y han incidido en la actitud de Gallardo como causa de esta medida.

La sesión plenaria ha proseguido este miércoles por la mañana y una de las parlamentarias que denunció los gestos de Gallardo, Nuria Rubio, ha incidido desde el estrado en los “gestos obscenos y machistas” de García-Gallardo. Este ha rechazado “lecciones de respeto” que procedan de “mujeres del partido de Tito Berni, Puente, Ábalos y Tudanca”.

Esta controversia se une a la retahíla de enfrentamientos entre bancadas en Castilla y León, con Gallardo como frecuente contendiente. En su estreno parlamentario le dijo a una socialista con discapacidad que le hablaría “como a una persona como otra cualquiera”; a su predecesor, Francisco Igea (antes de Ciudadanos), le llamó “imbécil”. En las últimas semanas, ha insultado a varios cargos socialistas, vía redes sociales, a cuenta de la amnistía a los encausados del procés, ha iniciado cánticos racistas y neonazis en manifestaciones en sedes del PSOE y hace unas semanas espetó “¡Tu madre!” al procurador de Unidas Podemos, Pablo Fernández.