Casi la mitad de los españoles no sabe que España presidirá la UE a partir de julio

Casi la mitad de los españoles (44%) no sabe que España presidirá el Consejo de la UE en el segundo semestre de este año, según el último barómetro del Real Instituto Elcano. Quienes más aseguran saberlo son los que tienen entre 65 y 80 años (76%), frente a los menores de 30 (28%) . Otra cosa es que sepan qué es el Consejo de la UE que España va a presidir —el organismo que reúne a los Gobiernos de los estados miembros—: aunque el 65% asegura conocerlo, solo el 28% da la respuesta correcta.

El estudio, que se basa en 1.000 entrevistas realizadas entre los pasados 14 de febrero y 8 marzo, confirma que los españoles siguen siendo europeístas, hasta el punto de que, inmediatamente después del Ejército (6,2 puntos sobre 10), dos instituciones de la UE —Comisión (5,7) y Parlamento Europeo (5,4)— son las mejor puntuadas, por delante de sus equivalentes nacionales —Gobierno español (4,8) y Congreso de los Diputados (4,4)—, una situación contraria a la de la mayoría de los países europeos. La alta valoración de las instituciones europeas contrasta con el desconocimiento sobre las mismas: solo la mitad de los encuestados (52%) cree entender cómo funciona la UE, menos de un tercio (28%) conoce el nombre de la presidenta de la Comisión, la alemana Ursula von der Leyen; y hasta el 42% no recuerda ninguna decisión positiva tomada por la UE en los últimos tiempos.

El sentimiento europeísta de los españoles, en contraste con la creciente eurofobia de otros países comunitarios, se evidencia también en que, ante la pregunta de qué es lo que más le pediría a la UE, la respuesta espontánea de la mayoría es “mayor unión”. Además, el 87% cree que la UE seguirá existiendo a largo plazo o será aún más influyente en sus estados miembros en el futuro, mientras que solo un 13% piensa que desaparecerá.

A pesar del escaso conocimiento de la próxima Presidencia española de la UE, los españoles le ponen deberes. El 46% piensa que mejorar la respuesta europea en la lucha contra la inflación debe estar entre dos primeras prioridades y el 44% pone el lugar preferente el obtener mayores ayudas para la agricultura española; lo que, a juicio de los autores del estudio, refleja la profunda preocupación por el alza de los precios y, en particular, de los alimentos. Respecto a los desafíos a los que se enfrenta la UE, el principal es la guerra de Ucrania (el 57% la sitúa entre los tres primeros lugares), seguida de la inflación, la desigualdad social y el cambio climático.

El calentamiento global, que en anteriores barómetros aparecía como principal preocupación, ha sido desplazado por las consecuencias económicas del estallido de un conflicto bélico en suelo europeo. Si antes se consideraba la primera prioridad de la política exterior española, ahora ha quedado relegado a una segunda posición ante la necesidad de “asegurar el abastecimiento energético”. En la misma línea, el 56% de los encuestados considera muy importante que Europa gane autonomía en el aspecto energético y solo un 3% en el militar.

América Latina

Un capítulo aparte merece la relación de los españoles con América Latina. El 91% de los encuestados cree que su situación económica es mala o muy mala y el 82% la política. El 69% de los españoles valora positivamente la influencia histórica de España en la región (la puntúan con un 6 o más sobre 10, aunque cae un punto entre los votantes de izquierda y sube 0,8 entre los de derecha), pero un tercio de los entrevistados supone que los latinoamericanos valoran negativamente la herencia española. Preguntados por las áreas a las que la política exterior española debería prestar más atención, un 62% cita a Marruecos y Argelia; y un 59% a América Latina.