Feijóo descarta acuerdos con el PSOE de Sánchez

A pesar de que las primeras palabras de Alberto Núñez Feijóo en el Congreso este martes han ido en la línea de comprometerse a “defender y cumplir la Constitución”, el líder del PP descarta acuerdos de calado esta legislatura con Pedro Sánchez. Incluido el mandato de la Carta Magna sobre la renovación del Consejo del Poder Judicial, que acaba de cumplir cuatro años de parálisis. “Estoy convencido en que con un nuevo PSOE retomaremos los consensos”, ha subrayado Feijóo en el acto institucional por el Día de la Constitución.

El líder del PP solo contempla acuerdos con otro liderazgo del PSOE, una idea que ya había lanzado tras la ruptura de la negociación del Poder Judicial, pero que ahora vuelve a hacer explícita en un día que precisamente conmemora los consensos constitucionales. El acto celebrado en el Congreso ha vuelto a dejar patente que los puentes están rotos entre el Gobierno y la oposición. Mientras Feijóo y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, advertían de que la Constitución está amenazada si la izquierda vuelve a gobernar en 2023, el presidente del Gobierno instaba al PP a cumplir ahora con el texto permitiendo renovar el Poder Judicial. “Hago un llamamiento más a la responsabilidad de los partidos conservadores para que cumplan sus obligaciones constitucionales”, ha exhortado Pedro Sánchez al PP. “Mientras no lo hagan, no van a poder dar ninguna lección de constitucionalismo”.

Feijóo ha desoído a Sánchez y ha dado por hecho que el PP mantendrá la negativa a pactar el Consejo del Poder Judicial toda la legislatura, porque no puede pactar con un Gobierno que ha reformado el delito de sedición. “Todo aquello que sea profundizar la independencia judicial y despolitizar la justicia tiene nuestro sí. Todo lo que sea hacer un Código Penal a la carta de los políticos condenados por el Supremo y dejar sin efecto las sentencias del Supremo, tiene nuestro rechazo”, ha manifestado en el patio del Congreso el líder del principal partido de la oposición, que ha justificado su bloqueo: “No se puede hacer una cosa y la contraria. No se puede defender la independencia del Poder Judicial y anular las sentencias del Supremo. No se puede pedir la despolitización de la justicia y hacer un Código Penal para que los políticos no cumplan sus penas. Esto va en contra de cualquier planteamiento de independencia de la justicia y nuestro objetivo es profundizar en la independencia del Poder Judicial con una nueva norma en la que tengan protagonismo los jueces”.

En las conversaciones de los dirigentes del PP circulaba el debate sobre el progresivo frenazo en el crecimiento del partido que detectan las encuestas. Tras la llegada de Feijóo a la presidencia del partido, el barómetro de 40dB. elaborado para EL PAÍS y la SER comenzó a situar al PP pisándole los talones al PSOE hasta sobrepasarlo en el estudio realizado en julio. La brecha favorable a los populares fue ensanchándose y alcanzó los tres puntos en octubre. El barómetro de diciembre elaborado por 40dB., publicado este lunes, comprime a tres décimas (28,1% frente a 27,8%) la ventaja del PP. Fuentes del entorno de Feijóo han asegurado que tienen “tranquilidad” porque el PP, en sus propios sondeos, está por encima del 31% de voto y porque “el bloque” con Vox suma mayoría absoluta, asumiendo por tanto que el PP necesitará a la extrema derecha para desalojar a Sánchez de La Moncloa.

Además, el líder del PP ha subido otro grado sus críticas al Gobierno progresista al afirmar que hay una “amenaza latente” de crisis constitucional, porque el Ejecutivo se apoya en aliados “que se quieren ir de España”. Feijóo y Ayuso han tenido este martes un discurso muy coincidente advirtiendo al unísono de esa supuesta amenaza para la Constitución en el caso de que la izquierda revalide el Gobierno en las elecciones generales de 2023. Feijóo ha defendido que para que la Constitución vuelva a tener “vigencia” los españoles tienen que votarle a él, dando a entender que de lo contrario el texto constitucional corre peligro. Ayuso ha sido más explícita, en la misma melodía que su jefe de partido. “2023 puede que sea el último capítulo de un libro que todos los españoles empezamos a construir y a escribir juntos en 1978″, ha expresado la presidenta madrileña.

Feijóo y Ayuso se han pronunciado así antes de que en los corrillos de la recepción oficial trascendiera que el presidente del Gobierno abre la puerta a reformar el delito de malversación, sin que en principio afecte a la corrupción. El líder del PP se ha enterado hablando con periodistas de la noticia que el presidente estaba comunicando a solo unos metros de distancia, y ha reaccionado con indignación. Fuentes de su entorno han criticado que “[Gabriel] Rufián es el mayor penalista de España”. “Esto no es propio de una democracia”, se ha escuchado en el entorno del líder popular, que se reafirma en su tesis de la “amenaza” a la Constitución porque el Gobierno “ha aprobado un Código Penal a la carta”, en referencia a la reforma del delito de sedición.

“Ataque sin precedentes”

Solo el presidente de Murcia, Fernando López Miras, ha coincidido en el “ataque sin precedentes” a la Constitución, pero el resto de barones populares no ha ido tan lejos en sus críticas al Gobierno. Los presidentes del PP estaban más ocupados en su choque por la concesión del Ejecutivo de una agencia a A Coruña y otra a Sevilla, que Ayuso ha criticado porque “descapitalizan a Madrid”, y que, en cambio, los presidentes de Galicia y Andalucía, los también populares Alfonso Rueda y Juan Manuel Moreno Bonilla, han celebrado porque ayudará a sus territorios.