Villarejo logra suspender su juicio hasta septiembre y la Audiencia ordena un “exhaustivo” examen forense al comisario
La representación del acusado ha alegado que este “no se encuentra en condiciones físicas ni psíquicas de participar en su propia defensa”
La magistrada Ángela Murillo, presidenta del tribunal de la Audiencia Nacional que juzga a José Manuel Villarejo desde el pasado octubre, ha anunciado este lunes que un forense elaborará un “exhaustivo” informe sobre el estado de salud del comisario jubilado a principios de septiembre. La jueza toma esta decisión después de que la Sala de lo Penal se haya visto obligada a suspender las sesiones previstas para esta semana, cuando iba a comenzar la recta final de la vista oral. Esta finalmente se retomará dentro de dos meses. Villarejo consigue así frenar su juicio tras alegar que había sufrido un “accidente vascular cerebral”.
El tribunal contemplaba comenzar esta semana con la fase final del juicio y, de hecho, reservó cuatro días en su calendario para ello: de lunes a jueves. Solo quedaba que las distintas defensas dijeran si elevaban a definitivas sus conclusiones provisionales, un paso previo e indispensable para poder empezar con los informes finales de todas las partes. Este lunes los abogados de todos los acusados han completado este trámite en apenas 40 minutos, hasta que ha llegado el turno del letrado de Villarejo. Entonces, la defensa del comisario ha asegurado que el antiguo policía “no se encuentra en condiciones de participar en este momento en su propia defensa por enfermedad”.
“Esperando que pueda mejorar, se elevarán [las conclusiones provisionales a definitivas o no] una vez que él pueda participar en su propia defensa. Esperamos que sea en septiembre”, ha dicho el abogado del comisario, Antonio García Cabrera, que ha añadido: “Él no está en condiciones físicas ni psíquicas en este momento”. Aunque Villarejo cuenta con abogado, también se aceptó que ejerciera como coletrado defensor, ya que obtuvo la carrera de Derecho. Esto le ha permitido intervenir en la vista de forma frecuente e, incluso, interrogar a testigos y acusados.
El tribunal ya se temía esta situación. La defensa del antiguo agente de la Policía Nacional, epicentro de una macrotrama de corrupción, pidió hace dos semanas suspender las sesiones de la vista oral previstas para este julio tras haber sufrido un “accidente vascular cerebral”, que le provocó la parálisis de un ojo. El forense lo examinó entonces y concluyó que Villarejo podía “seguir las sesiones del juicio desde su domicilio por videoconferencia”. Ante tal disyuntiva, el tribunal optó por continuar con la vista esta semana, aunque abría la puerta a permitir a la representación de Villarejo, si así lo pedía, elevar sus conclusiones en septiembre. Y así ha ocurrido este lunes, por lo que Murillo se ha visto obligada a suspender la vista hasta entonces.
Eso sí, tras comunicar su decisión, la magistrada ha instado a la defensa del comisario a que “presente los informes [médicos] que vaya obteniendo”. “A fin de que el forense, a principios de septiembre, haga un informe exhaustivo sobre el estado de su cliente”, ha apuntado la juez.
El juicio comenzó el pasado octubre. Es la primera gran vista oral que afronta el comisario jubilado en la Audiencia Nacional y se centra en los proyectos de espionaje bautizados como Iron, Land y Pintor. Solo por estas tres piezas, la Fiscalía Anticorrupción pide más de 80 años de cárcel para el antiguo agente de la Policía. Una vez que se reanude solo quedará que la defensa de Villarejo diga si eleva a definitivas sus conclusiones provisionales, que todas las partes expongan sus informes finales y el turno de última palabra de los acusados.
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