Delgado propone reformar el sistema de nombramiento del fiscal general para reforzar su autonomía

La fiscal general del Estado, Dolores Delgado, propondrá una reforma del sistema de nombramiento del fiscal general para que se instauren “contrapesos que acrecienten su autonomía” respecto del Gobierno. Así se lo ha manifestado este jueves Delgado a los representantes de las tres asociaciones de fiscales durante una reunión que han mantenido para preparar la respuesta de la Fiscalía al anteproyecto de la nueva Ley de Enjuiciamiento Criminal aprobado por el Ejecutivo la semana pasada, que dejará la instrucción penal en manos de los fiscales. Delgado quiere también que se regulen las comunicaciones entre el Gobierno y la Fiscalía General para garantizar la “trasparencia y publicidad” de estas conversaciones.

Representantes de las asociaciones presentes en la reunión —la Asociación de Fiscales (AF), de tendencia conservadora; la Unión Progresista de Fiscales (UPF); y la Asociación Profesional e Independiente de Fiscales (APIF)— describieron el encuentro como una “primera toma de contacto” para encarar los enormes cambios para la carrera que supondrá la reforma legal que tramita el Gobierno. La fiscal general anunció que en los próximos días remitirá un documento a las asociaciones que servirá de base para empezar a trabajar. Pero Delgado avanzó ya durante el encuentro algunas propuestas concretas, entre ellas la reforma de proceso de nombramiento del fiscal general para reforzar la autonomía del ministerio público frente al Ejecutivo, de quien depende la designación.

La iniciativa de la fiscal general llega después de la polémica que levantó su propio nombramiento, recibido entre fuertes críticas tanto desde el ámbito político como judicial porque Delgado aterrizó en la Fiscalía inmediatamente después de haber sido ministra de Justicia en el primer Gobierno de Pedro Sánchez. Este salto sigue generando suspicacias en parte de la carrera y sirve de munición para la oposición ante cualquier decisión relevante que tenga que adoptar el ministerio público. La fiscal general no ha concretado qué “contrapesos” propone para potenciar la autonomía del cargo, pero la medida se concretará en los documentos que la Fiscalía va a elaborar en los próximos meses para afrontar la nueva Ley de Enjuiciamiento Criminal.

La fiscal ha transmitido a los representantes de las asociaciones que los cambios que introduce la norma obligarán a elaborar un nuevo Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal que redefina la estructura, competencias y funciones de la institución. El cambio de modelo, con el fiscal como director de la investigación, es una reivindicación reiterada a lo largo de los años por la carrera. “Las y los fiscales españoles estamos decididos a asumir un reto que nos acerca a los modelos de ministerio público de los países de nuestro entorno y cuyo éxito precisa de la colaboración de todos”, expuso Delgado.

Entre otras propuestas concretas, la fiscal expuso la necesidad de reforzar la autonomía organizativa, presupuestaria, normativa y formativa, además de regular las comunicaciones entre el Gobierno y el fiscal general transcribiendo las mismas en un registro público y suprimiendo la posibilidad de que la persona titular de la Fiscalía General del Estado pueda ser llamada a informar ante el Consejo de Ministros.

Delgado explicó a las asociaciones que se van a organizar grupos de trabajo con representantes de todas las Fiscalías y en las que tendrán un papel protagonista el Consejo Fiscal y las asociaciones profesionales. Delgado aseguró que ella asumirá el liderazgo de esta tarea, con la que el ministerio público pretende prepararse el cambio de tareas que le otorga la nueva ley.